Ultimatum

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Klaus me miraba de una manera extraña, yo comencé a llorar al ver la mordida ya que sentía mucho dolor.

No sabía si iba a salir de esta, mi orgullo es tan Grande que no pensaba rogarle que me curara con su sangre, prefería darle la satisfacción de morir sin rogarle ni pedirle nada.

Elijah regreso y nos encontró a ambos, rápidamente corrió hacia mi.

— ¿Nathanel qué pasó? — Elijah miro la mordida y volteo a ver a Klaus.

— Tranquilo... – dije entre sollozos – voy a estar bien... — Me incorpore ya que por el dolor me había caído al piso.

— ¡Como fuiste capaz! — Elijah le gritó a Klaus.

— El se lo busco... y si me disculpas teng...

Klaus quedó atónito ya que mi mordida comenzó a sanar por arte de magia, yo quede igual de asombrado porque no sabía a qué se debía.

— Imposible... ¿como es que? — Mi magia, fue inevitable no pensar en eso.

— Tu magia te curo... debió ser eso — Dijo Elijah feliz, me abrazo cuando vio mi brazo sano y salvo.

— Veo que necesitarás más que una mordida tuya para eliminarme Klaus... — Me acerque a el y el solo me miraba con enojo.

— Escucha...

— ¡No! Tu escúchame a mi... si alguna vez pensé que esta amistad entre tú y yo podría llegar lejos estaba tan equivocado... no necesito de ti y me queda claro que tú no necesitas de nadie más que de ti... me largo de aquí para siempre...

— Nathanel no...

— Lo siento Elijah... seré feliz de ayudarte a ti, Rebekah o Freya en lo que sea... pero para mi, Nik esta muerto... — Klaus comenzó a llorar sin dejar de tener un rostro de furia.

— Perdón... — Lo dijo como si lo estuvieran obligando.

— No, ni lo intentes... vete al diablo.

Salí del lugar y solo alcancé a escuchar los gritos de ambos hermanos peleando de nuevo por las decisiones tomadas por Klaus.

Salí a caminar, me encontraba dudando si fue buena idea involucrarme con la familia Mikaelson, en el fondo sabía que yo estaba consciente que acepté cualquier situación al involucrarme especialmente con Klaus, fue una suerte no morir la primera vez que lo conocí y a pesar de que hemos tenido buenos momentos, momentos de fragilidad entre ambos no me entra en la cabeza como fue capaz de hacer semejante acción.

Aun seguía pensando si mi magia fue la que me salvó de la mordida, es sabido que la mordida de un hombre lobo puede matar a un vampiro, pero yo siendo brujo, ¿la magia habrá sido capaz de poder sanarme? Estaba muy confundido, ya había sido muchísimo por hoy, lo peor era que el día apenas iba iniciando.

Me senté en una banca y solté un gran suspiro y cerré mis ojos y.

En eso sentí como alguien se sentó a mi lado, abrí mis ojos y... ahí estaba.

—Nathanael... — Me fue imposible no exaltarme de verlo ahí.

— ¿Que quieres Klaus? ¿No fui lo suficientemente claro? — Klaus tenía un rostro muy serio.

— Elijah... me hizo entender que fui un idiota con lo que te hice...

— Wow, entonces debo agradecerle a Elijah ¿no? Por qué sin el no hubieras sentido nada de remordimiento por lo que me hiciste... pude haber muerto Klaus... — Me exalte y le grite furioso.

Más Allá De Ser InmortalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora