☞Porque tú

07

A la mañana siguiente desperté con el sonido de mi despertador, lo cierto es que fue gracias a los ruidos que salían de la recámara de Kate, no era ninguna inocente para saber que es lo que estaba haciendo. 

Cuando termine de arreglarme fui a la cocina a tomarme mi cóctel de medicamentos, antes de ir al hospital,  como Kate estaba ocupada supuse que tenía que pedir un taxi, ya que conducir no era lo mio. Estaba pasándome las 6 pastillas de seis medicamentos diferentes, cuando Elliot  el chico de anoche apareció, al verme me regaló una sonrisa y al parecer no tenía ni un ápice de vergüenza al estar solo en boxers. 

— Hola,  porque tan temprano, vas algún lado.

-Al hospital. 

—Quieres que te lleve, nomas me cambio y ya.

— No así está bien, sigue disfrutando con Kate,  se escuchaban muy motivados.

— Vamos esperame, voy me cambio y regreso, además tengo curiosidad por conocerte, casi nadie se atreve a sacar de sus casillas a mi hermano.

Sin decir más salio, sino quedaba de otra lo esperaría almenos así me ahorraría el batallar con el taxi. Ya en su carro solo me miraba y sonreia, tal vez debí de haber pensado mejor las cosas mejor, prácticamente no lo conocía y si intentaba hacer algo no creo que pondría mucha resistencia.

— Mis padres no dejaban de reírse cuando vino a comer a la casa, y saber que fue una chica que lo dejo asi fue peor, mi padre no dejaba de burlarse de el.

-Se lo tenia merecido, creo que algunas veces ser un idiota viene de nacimiento. 

— No me hagas reir que estoy manejando, pero estoy de acuerdo contigo, nunca lo e visto divertirse, siempre se la pasa diciendo que tiene cosas importantes que hacer, cada vez que lo invito algún lado.

— Pero ayer estaba contigo en un antro.

— Es que lo amenaze con con publicar la foto que le tome todo golpeado en mis redes.

— Con lo vanidoso y lo galán que se cree, ya lo imagino haciendo berrinche. 

— Solo espero que no se entere que no cuide a nuestra hemana por andar como loco detrás de una rubia.

— Más bien de caliente.

Cuando al fin llegamos al hospital, supuse que solo me dejaría y me diría adios, pero bajo y me acompañó y no le importo verme vomitar.