"Un accidente deja huérfanas a Lena y su hermana Lexa de apenas 7 meses, sus padres deciden dejar a cargo a la Luthor mayor de la custodia de la pequeña y de los negocios familiares, haciendo que su vida cambie de un momento a otro, tendrá que mudar...
-¡NIA!.- le grita Sara estupefacta a una Nia que sonreía nerviosa.
-¿Qué tiene? No es una mala idea si lo analizamos bien.
-¿Al menos estás pensando lo que dices antes de hablar?¿Cómo por qué aceptaría Kara casarse con Lena si ni siquiera son pareja?.- alega Sara.
Lena fingía no escuchar la propuesta que hizo Nia, en su lugar, colocaba a Lexa sobre la alfombra para que gateara por su cuenta mientras la veía con ternura.
-Pero que dices Sara, es una gran idea, verás... Si Kara se casará con Lena sería un quid pro quo para ambas partes. Lena necesita a alguien con quien casarse para que no le quiten a Lexa y Kara...mhmm Kara ¿Qué necesitas?. -en cuanto Nia dijo eso todas las miradas se posaron en mi.
Esta mañana solo podía pensar en lo aburrido que sería mi día libre, y ahora estoy aquí, en casa de Lena recibiendo una propuesta de matrimonio. La chica me gusta, sí, ¿pero casarnos sin haber iniciado aún una relación?. Hace semanas cuando Alex nos interrumpió a Lena y a mi en nuestra pequeña sesión de besos cuando toco la puerta del baño de aquella fiesta que dio el hospital y el interrogatorio que recibí de parte de ella en cuanto pisamos mi habitación en el hotel acepte que me gusta Lena, claro, no lo admití ante Alex. A ella le tuve que inventar un montón de cosas del porque me quedé encerrada en el baño aquella vez. Aunque no estoy muy segura de que me haya creído del todo, al fin y al cabo no se puede engañar tan fácilmente a una agente del FBI, ¿o si?.
De todas formas, replanteando la pregunta de Nia, podría ayudar a que Lena conserve a su pequeña y adorable hermana, pero... ¿Yo que necesito?.
-Sí, acepto. -suelto de repente con la mirada aún perdida en la nada.
-¡¿Qué?!, No tienes que hacerlo Kara.- dijo Lena que me ve con el ceño fruncido.
-Bueno, reconsiderando lo que dijo Nia, no es tan mala idea si lo ves desde otro ángulo.- dijo Sara que levantaba los hombros ante la severa mirada que le dio Lena.
-¡No!, en definitiva es mala idea, dime... si llego a recibir la ayuda de Kara, ¿ella que recibe a cambio?.- expone Lena que ahora tiene los brazos cruzados sobre su pecho.
-Mhmm, déjame pensar.- dice Nia colocando un dedo sobre sus labios. -¡Ya sé!, Kara podría quedarse en el penthouse contigo y con Lexa, ella aún no consigue un lugar decente y este creo que si supera sus expectativas, además, si ella se queda aquí podrán ganar un poco más de confianza entre ustedes, y así hacerle creer al juez que en realidad son un feliz matrimonio.
-Si, admito que es una buena idea. -digo finalmente observando a Lena a los ojos.
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-No, Kara, no te dejaré hacerlo, esto me parece una muy mala idea. -susurra Lena.
-Bueno chicas, creo que deben discutirlo entre ustedes, y como que ya empezamos a estorbar aquí.- dice Sara levantándose del sofá, atraviesa la sala de estar para buscar a Lexa, que al parecer ha mejorado ya que no se ve que tenga aparentes signos de fiebre. La encuentra detrás del sofá intentando ponerse de pie y la toma entre sus brazos en cuanto ve que se tambalea, le da un beso en la mejilla que resonó en todo el lugar, la dejó en mi regazo y en cuanto vio que ahora estaba conmigo me sonrió y yo la envolví en un abrazo. Se despidió de Lena y de mi, a Lena le susurró que la llamaría y ella solo asistió. -Vamos, Nia.
