[25. Todo fue mentira]

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De pronto, tuvo un crudo dolor de cabeza, al sentir algo llegar a su mente

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De pronto, tuvo un crudo dolor de cabeza, al sentir algo llegar a su mente.

—Veo que ya uniste las piezas, niña. —dijo el, sonriendo macabramente— Siempre fui yo todo este tiempo, el que te observaba desde lejos, el que utilizó a esta anciana para llegar hasta ti, no fue difícil poseerla, es muy débil.

Esa voz, reconocía esa voz.

Era la voz de Mephisto...

Pero, ¿por qué?

Se tomó la cabeza, bajando la mirada hacia el dios del engaño.

—Quiero hablar contigo, a solas.

Le tomó el brazó y lo levantó, mientras éste secaba sus lágrimas.

—Vamos a esa habitación.

Ella asintió, comenzando a caminar hacia el lugar, sin decir alguna otra palabra, antes de que el pelinegro pudiese ir con ella, su hermano le tomó el hombro.

—¿Estarás bien, hermano?

—Lo estaré.

Unos minutos después, se encerró en la habitación con la mujer, encontrando a esta observando una fotografía del equipo de hace unos años.

—¿Quién es él? —preguntó señalando a Tony en la fotografía.

—Es tu padre, Tony Stark.

—¿Y por qué no está aquí?

—Porque él murió, ___.

La castaña asintió lentamente, masajeándose el lado de la cabeza que le dolía sin cesar, gesto que no pasó desapercibido para su acompañante.

—¿Estás bien?

—Me duele la cabeza, no es nada importante.

Ambos se sentaron en la cama, conectando sus miradas.

—¿De qué quieres hablar conmigo?

—Quiero que me digas por qué fue tu culpa.

Éste suspiró.

—Yo te dejé sola y Mephisto te secuestró.

Ella palideció.

—¿Q-qué?

—Mephisto no es tu amigo, es tu raptor.

—¿C-cómo puede ser eso posible? —murmuró alterada, sintiendo aún más dolor en su cabeza— É-el está en la profecía, junto a mí, ¿¡cómo!?

—Esa no es tu profecía, es la de tu madre.

—No, no... —se levantó de la cama.

—Tranquilízate, vas a tener otro colapso.

Sin embargo, hizo caso omiso a sus palabras, su respiración comenzó a agitarse y su corazón latió muy rápido.

¿Mephisto la raptó?

¿La mujer de la profecía no era ella?

Entonces, ¿quién era ella?

Las lágrimas comenzaron a descender de su rostro, Loki actuó rápidamente, tomando su rostro.

—¿¡Quién soy yo!?

—Cálmate, por favor. —pidió con preocupación.

—¿¡Si eso es verdad, quién demonios soy yo!?

Su vista se nubló, y de nuevo todo se volvió oscuro.

...

*Recuerdos*

De repente, la ilusión cambió, esta vez mostrando a la madre de la Stark, quien parecía estar batallando contra un alienígena, lanzándole una esfera gigante de energía dañina.

—E-esa es mi mamá... —balbuceó sorprendida.

—Oh sí, Melanie Smith Stark... —asintió— O como su nombre de pila real lo indica, Galactic queen, era la mujer más poderosa de todo lo que pueda existir, sin embargo, cuando conoció a tu padre, dejó de reinar en la galaxia y se volvió una mortal normal, pero sus poderes se transfirieron a ti, tú eres su legado.

—¿Q-qué?

—Ahora tú eres Galactic queen, ___, el ser más poderoso que pueda existir, es por eso que te he traído aquí, porque quiero que explotes todo tu potencial, que sepas quien eres en realidad.

La Stark rio cínicamente.

—Querrás decir que quieres mis poderes para tu beneficio. —lo miró sonriente— Pues, lamento decirte que no será posible, hallaré la forma de salir de aquí y volveré a mi hogar.

—¿A tu hogar? —murmuró burlón— ¿Con el esposo que te humilló por un malentendido?

Su sonrisa se borró al recordar las palabras de Loki en su discusión.

En el instante del despiste de la mujer, el demonio aprovechó para efectuar su magia en la cabeza de la mujer, provocando así que su manipulación comenzara, su primera fase del plan daría frutos, le lavaría el cerebro a la ojicafé para que así odiase a los vengadores, a Loki, a todo ser existente en su vida, no los reconocería porque se encargaría de apagar los recuerdos de su vida junto a aquellas personas; la volvería su aliada, a lo que de lugar, ambos dominarían la tierra y cada planeta existente, hasta que al final, los dos terminaran siendo dueños de toda la galaxia...

Soltó un grito, despertando.

Todo fue mentira, no era su profecía.

No era su destino, eran los malignos planes de Mephisto.

Le lavó el cerebro, le arrebató sus recuerdos, todo por sus deseos personales.

En seguida comenzó a llorar, sintiendo un terrible dolor emocional.

Pero ella lo había permitido, había dejado que le quitara sus recuerdos.

La puerta de la habitación se abrió, dejando ver al dios del trueno, en seguida ella lo miró con lágrimas en los ojos.

—Todo es mentira, él me usó para sus planes. —lloriqueó— Maté gente inocente, destrocé incontables planetas, y todo a base de mentiras.

El rubio no dijo nada, simplemente se aproximó hasta ella y la abrazó con fuerza.

—N-no puedo recordarte a ti, no puedo recordar a ninguno, no puedo recordarme a mí misma, y todo fue culpa de él. Esta vida no es mía, ellos no son mis amigos, este no es mi destino... ¿Quién soy yo?

—Hey hey, cálmate... —dijo, limpiando las lágrimas de sus ojos— Tú eres ___ Stark, la persona más increíble que conozco, la más gentil, la más misericordiosa, la más hermosa y la más divertida, añadiendo un montón de cosas más.

Ella sollozó.

—No recuerdo nada de eso.

Se aferró con fuerza al hombre, quien en seguida plantó un beso en su cabeza.

—Te prometo que encontraremos la forma de recuperar tus memorias.




¿Volverás a mí? [loki y tú - 2datemporada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora