•Capítulo especial III•

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La llegada del verdadero amor

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La llegada del verdadero amor.

—¡Yo soy Galactic queen, arrodíllense ante mí o morir...!

—Bueno, lamento interrumpir tu aburrido discurso, pero la fiesta se acabó.

Su llegada a la tierra, no había salido como quería, con la llegada de un hombre con un traje de metal que decidió enfrentarse a ella.

—¿Cómo te atreves, humano insolente? —siseó molesta, mientras sus ojos se tornaban oscuros— ¿Acaso no ves lo que soy?

—Eres realmente atractiva, pero eso no importa ahora.

—Serás el primero en morir, escoria.

Pero esa muerte nunca llegó.

En medio de su pelea con el hombre, las cosas se salieron de control, por primera vez en toda su existencia, había experimentado lo que era ir perdiendo. Para su desgracia, en aquella batalla no había asistido Mephisto para ayudarla, teniendo sus propios asuntos para atender, y Karun, era la menos apropiada para una batalla después de todo lo que estaba ocurriendo con ella.

Su ejército estaba siendo atacado, su servidora más fiel había sido derrotada, y en medio de toda su confusión, ocurrió algo aún peor, algo que había creído prácticamente imposible.

Había sido derrotada.

El ataque que le mandaron a través de una clase de nave gigante, provocó que perdiera el sentido, quedando inconsciente.

¿Ese era su fin?

No, no lo era.

Cuando despertó, se encontró en un lugar extraño, sin su ejército, sin sus naves, sin Karun.

Estaba absolutamente sola.

—Veo que ya despertaste.

Atormentada, se giró hacia la voz, encontrando a unos pasos de ella, al mismo hombre con el que se había enfrentado, sin embargo, éste ya no tenía su traje de metal, por lo cual vio la oportunidad para atacarle, pero no lo hizo hasta que se enteró de lo sucedido.

—¿Qué estoy haciendo aquí?

—Te salvé, ¿qué no es obvio?

—¿Por qué habrías tú de salvarme, humano?

—Tenía curiosidad de saber de ti. —se encogió de hombros— Un gracias sería bueno.

—Ni creas que voy a agradecer tu acto de piedad, no necesito ayuda de un inútil.

Pero el hombre no se inmutaba a su agresividad.

—Como sea, soy Tony Stark.

—No me interesa.

Llevaba días confinada en la mansión del hombre, por lo que éste le había dicho, unos agentes habían acabado con su ejército, y sobre la joven Karun, no se sabía nada.

¿Volverás a mí? [loki y tú - 2datemporada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora