ONCE

1.5K 204 103
                                    

TW: violencia

flashback en cursiva

Sus pies tocaban el pasto del jardín trasero, mientras caminaba lentamente junto a Hange. Viendo como este era iluminado por las lámparas, marcando un largo camino hasta el final. El cielo de noche estaba despejado, prácticamente se podía ver todas las estrellas presentes y la luna, brillante y llena iluminando sus figuras.

-¿No me dirá en que estaba pensando hace rato? -le preguntó para romper el silencio.

Las flores se extendían a lo largo de todo el lugar, había de todos tipos, ya sean rosas, margaritas, claveles. Todo se veía teñido por sus distintos colores, ocasionando un escenario maravilloso. El espino de fuego había florecido hace tiempo, siendo el más penetrante en todo el lugar, invadiendo los costados y marcando el camino. Su aroma, corría todo su ser de una manera suave y delicada.

—Si es que quiere, claro -volvió a hablar al no obtener respuesta.

—Solo...recordaba cosas, aveces es increíble cuando el pasado puede llegar a perturbar mi presente —confesó con sus manos juntas.

—¿A que se refiere, señorita?

—Cosas que viví en mi adolescencia, que actualmente afectan a mi hoy —aclaró.

—No parece una mujer que se preocupe por el pasado —dijo parándose para mirarla con detenimiento.

—Hay cosas que no sabes sobre mi, Hange.

Un corto silencio las invadió, para ser tapado por la risa nasal de la mayor.

—Espero algún día poder conocerlas a profundidad -esto pareció un susurro, aunque lo dijo para que solo su compañera lo escuche.

La chica formó una leve sonrojo para sentarse en un banco que se encontraba allí, la castaña copió su acción. Completamente en silencio, disfrutando se la compañía de la otra. Jugaba con sus manos inquietamente, la presencia de Hange seguía afectado a su comportamiento.

El ojo bueno de Zoë se posó en el anillo de compromiso que (n) traía, la piedra en el brillaba bajo la luz de luna, observando todos los detalles de este. Y pensaba, que si ella le propusiera matrimonio, seria un sortija mucho más sencilla y ordinaria.

¿Eso sería suficiente?

De todas maneras jamás podría hacerlo y no entendía el porqué le daba lugar a ese pensamiento.

—¿Que hay de ti, Zoë? —el silencio se vio nuevamente interrumpido —, jamás me haz dicho algo sobre ti, siento como si no nos conociéramos.

—Oh bueno...—se detuvo a pensar —nací y me crié aquí, he vivido con mis padres hasta los 18 para luego comenzar a trabajar.

—¿Siempre trabajo para la empresa Arlert?—comenzó a interrogar mientras tenía toda la atención en lo que decía.

—Claro que no —río—, mi padre si...recuerdo que comencé acomodando los tubos de tela, para luego estar en la fabricación de estas mismas y para actualmente, viajar por todo el mundo.

—¿Sus padres, donde están? —aquella pregunta generó un silencio, posiblemente porque Hange odiaba hablar de ello.

—Lejos —respondió seguido de un suspiro — , hace tiempo no los veo... de hecho, hace años.

Sus labios se fruncieron y observó como agachaba la mirada.

—Aveces los extraño y otras veces digo que fue lo mejor alejarme de ellos —confesó, la chica la seguía mirando con pena, atentamente viendo como todas sus facciones estaban tristes. Pero, para calmar la situación Hange se volteo a ella y le sonrió -. No me mire de esa manera, estoy bien.

KAOS| Hange ZoëDonde viven las historias. Descúbrelo ahora