Timeless Love *Kookmin* COMPLETA

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Nuestra primer cita fue un éxito total. Recorrimos bastantes juegos y nos tomamos fotos en cada uno de ellos.

Bromeamos como dos tontos, actuando como si el lugar realmente estuviera en funcionamiento, imaginando juntos como hubiera sido vivir en aquel entonces.

Charlamos y nos conocimos más a fondo.

Jimin me contó que fue el donante para el embarazo de su mejor amiga Mina, ella quería ser mamá pero el sistema aleatorio no le gustaba. Quería estar segura de que los genes de su hija serían seguros, aunque la inseminación artificial está más que probada y es la forma más natural de concebir desde hace muchísimos años.

Él quería ayudarla a cumplir su sueño de ser mamá y obviamente acepto cuando ella se lo propuso.

Estuvo con ella cada día durante el embarazo y eligió formar parte de la vida de la pequeña como figura paterna.

Jihyo y él tienen una relación única y especial. Son polos opuestos en casi todo, salvo en la terquedad, dice que cuando comienzan una discusión ninguno quiere perder.

Ella vive con su mamá y Jimin la cuida algunos días de la semana, se encarga de ayudarla con las tareas de la escuela también. Es un papá muy presente y está orgulloso de lo inteligente que es su pequeña.

Yo le conté sobre mi trabajo y los viajes que pude hacer gracias a ello. Gritó emocionado con cada aventura que le narré y sus ojos brillaron al escuchar todo lo que conocí y probé durante estos últimos años.

Tiene alma aventurera sin dudas y hambre de conocimiento.

Jimin es maestro de música de primaria, cantó para mí y juro que  sentí por un momento que me trasladaba a otro tiempo.

No exagero. Su voz es extraordinaria, hizo que mi corazón latiera acelerado, como si quisiera estallar de alegría.

Caminamos tomados de la mano, comimos dulces que simulé sacar de una máquina antigua. Él sigue todos mis juegos y ocurrencias como si nos conocieramos desde siempre.

No sé cómo explicar todo lo que siento al estar a su lado.

La próxima cita está bajo mi organización y estoy buscando arduamente dónde llevarlo.

Jimin ama las películas románticas y lo anticuado como yo así que quiero darle las citas más clásicas de antaño.

Creo que un picnic le gustaría.

Uno real, con manta en el pasto y comida hecha por mis manos, bajo la luz de la verdadera luna, no esas citas holográficas que todo el mundo usa.

Sí, sería perfecto.

(...)

Voy camino a buscarlo a la casa de Jihyo, estoy entusiasmado para que negarlo.

Me hubiera encantado llevarlo a una laguna pero no tenemos ninguna cerca, así que me decidí por el arroyo Cheonggyecheon que cruza gran parte de la ciudad y todavía mantiene naturaleza real a sus lados.

Por la noche no suele haber mucha gente y mucho menos en el horario que elegí así que vamos a poder armar nuestro picnic sin molestar a la nadie y cuando a las 23:00 hs las luces de la cuidad se apaguen la luna será la que nos alumbre.

Se supone que a esa hora todos ya estamos en casa, listos para dormir. Pero Jimin y yo somos rebeldes y aventureros.

Presiono mi dedo sobre la pantalla en la puerta de la casa y automáticamente escucho unos pasos que corretean dentro.

—¡Es el señor Jungkook!— se escucha a la pequeña gritar adentro.

Mi sonrisa se agranda al sentir su entusiasmo.

Tan solo unos minutos después una chica muy bonita abre la puerta con Jihyo a su lado.

— ¡señor Jungkook! Bienvenido a mi casa— me dice y hace una reverencia.

—Hola bonita— le digo— Buenas noches ¿Mina supongo?— agrego algo avergonzado.

Ella me sonríe y asiente.

— es un gusto por fin conocerte, Jimin habla mucho de vos— dice y me saluda educadamente con una reverencia.

— también habla mucho de ustedes, el gusto el mio— respondo.

Ellas se hacen a un lado invitandome a pasar. Me saco los zapatos y me paro rápidamente sobre la plataforma de entrada y espero paciente a que me escaneé por completo. La luz verde confirma que estoy saludable para ingresar a su hogar.

La casa está impecable como era de esperarse. Jimin me comentó que la personalidad pulcra y organizada de Jihyo es 100% heredada de su madre.

— ¿Querés algo para tomar Jungkook? Jimin está un poco demorado— me comenta Mina.

—Mi papá se cambió de ropa como diez veces y está en crisis arriba— agrega Jihyo entre risas.

Me contagia y también rio a la par.

— un vaso de agua estaría bien— le respondo finalmente.

Mientras esperamos Jihyo me cuenta que su papá estaba emocionado con la cita y que hasta había gritado de la emoción.

No se lo digo pero yo también lo hice cuando me dijo que si a la invitación.

Mina regresa con el agua, bebo un sorbo para calmar mis nervios y se lo devuelvo.

— Jimin es muy difícil de conquistar, debes ser una persona muy especial— me dice y mi pecho se infla de orgullo.

Segundos después escuchamos los pasos de alguien bajando las escaleras a saltos y Jimin aparece luciendo extremadamente hermoso.

Al verme su rostro se ilumina como si de miles de estrellas se tratara. Y no duda en correr hacia mi.

—¡Jungkookie!— exclama y me atropella en un abrazo. Mi cuerpo reacciona por si solo rodeándolo automáticamente y levantandolo en el aire por algunos segundos.

Los ojos se Jihyo y Mina parecen salirse de sus órbitas del asombro.

—te dije que era un loco como papi— dice la pequeña dirigiéndose a su mamá.

Jimin y yo nos reímos al unísono.

— ¡bueno este loco se va! ¡No me extrañen!— dice mientras me toma de la mano para dirigirnos a la puerta.

— cuidense y no estén por la calle cuando sea la hora del corte— dice Mina preocupada.

— no no, tranquila... Somos adultos responsables— responde y me saca de allí casi corriendo.

La noche nos espera, deseo con todo mi corazón darle una cita inolvidable.