Watercolour [Birdflash]

Hold On (The Break)

Aferrándose (Al Rompimiento)

La mesera pasó nuevamente a su lado. Está vez no le dijó nada, no le preguntó si quería más agua, u otra canasta de pan (ya se había acabado tres, y había recibido más de unas pocas caras, que iban desde asombro hasta asco, por parte del personal) En vez de eso, al pasar junto a su mesa, le dirigió una mirada de lástima y siguió caminando. Wally la vió en el reflejo de la ventana a su derecha. El asiento de enfrente estaba vacío, y la vela de té en medio de la mesa se estaba reduciendo a la mecha. Wally exhaló bruscamente por la nariz, sintiendo como el fuego que devoraba su pecho rugía y se elevaba a su cabeza. Se pasó la mano por el cabello y apoyó el codo en la mesa mientras intercalaba por enésima vez la mirada entre su celular y la ventana.

Una hora.

Se suponía que Dick debería haber llegado hace una hora.

Ahora bien, Wally no era quien para juzgar. Irónicamente, antes de retirarse, siempre se encontraba llegando tarde. Tal vez era un efecto secundario de pasar mucho tiempo con Barry. En cualquier caso, llegaba crónicamente tarde, y Dios sabía que Dick estaba acostumbrado a ello.

La cosa era que no llegaba tarde cuando era importante. Había una gran diferencia entre llegar a la escuela cinco minutos tarde y plantar a tu cita en un restaurante por una hora.

Wally volvió a desbloquear su celular, buscando cualquier mensaje que pudiera haber pasado por alto y se aseguró de tener señal, pero, de nuevo, no había nada. A estas alturas eso era lo que más le molestaba. Sí Dick iba a llegar tarde, o no podía ir, lo menos que jodidamente podía hacer era mandarle un mensaje a Wally, solo para avisarle. Aparentemente, eso era mucho pedir.

Y sí, había una pequeña voz en la cabeza de Wally diciendole que probablemente Dick estaba atrapado en una misión, que estaba sin comunicación, que aparecería con un millón de excusas. En el pasado, Wally habría aceptado eso. Se habría molestado y discutirán por ello antes de que Wally por fin cediera. Esto era una parte de sus vidas. Wally era un civil, (sí, él había elegido eso, pero aún así le dejaba un sabor amargo en la boca) y Dick era un maldito Superheroe. Estaban tratando que las cosas funcionaran, pero tropiezos como estos iban a suceder, ¿no?

Pero... mierda, esta no era solo una cita. Ya no se veían tan seguido como antes, y con Wally a punto de entrar en temporada de exámenes, y Dick tomando por completo el Liderazgo del Equipo, además de sus propios exámenes, el precioso tiempo que tenían cada vez era más escaso. Tal vez no tendrían oportunidad de pasar tiempo juntos en persona hasta el verano. Esto era importante, maldita sea. Wally lo había esperado durante toda la semana, y Dick ni siquiera podía enviarle un mensaje avisandole que llegaría tarde.

Bueno, que se joda. Wally estaba harto de esperar. La mesera regresó y Wally llamó su atención. No iba a ocupar una mesa por una hora para no ordenar nada, carajo.

Pasó otra media hora antes de que Wally se fuera. Ordenó un corte barato de carne; lo devoró entero, y más de una vez lamentó el hecho de que aún no pudiera ordenar una cerveza en público.** Eso no lo detendría de abrir una de las que tenía en su refrigerador cuando llegara a casa, pero ese no era el punto. Terminó, le dio propina a la mesera y se disculpó por tardar tanto. Ella le respondió con una sonrisa lastimera y afirmaciones de que no había problema. Aparentemente había sido realmente obvio que lo habían dejado plantado. Obligándose a sonreír a cambio, Wally tomó su chaqueta, una menta del tazón en la puerta principal y salió a la calle.