Watercolour [Birdflash]

72 Hours

72 Horas

Cuando los héroes aterrizaron en las ruinas del Monte Justicia todo estaba en silencio. Descendieron del cielo nocturno como espectros, encontrándose con sus mentores en la orilla esparcida de rocas. Vieron desde la distancia el brillo esmeralda de la nave de Los Linternas Verdes que transportaba a la Liga de la Justicia de vuelta a casa. Todo había empezado aquí, en más de una forma. El inicio del equipo, la partida de los seis miembros de La Liga hacía su juicio en Rimbor, todo. No hubo ninguna sensación de regreso a casa cuando los grupos aterrizaron. No quedaba nada de casa aquí, y eso dolía demasiado, resonaba claramente, a través de la ansiedad y de la tristeza, pensar en ello de esa manera. El Equipo tocó tierra, y se quedó en silencio.

Sentado en la parte trasera de la Esfera, en su forma de cycle, Dick observó la distante imagen del Monte Justicia elevándose debajo de ellos, y a las figuras de la Liga agrandándose. Estaba sentado junto a Artemis, con los brazos cruzados sobre el pecho mientras ella mantenía su brazo alrededor de él. Su agarre se apretó ligeramente mientras descendían, los héroes mayores los miraban con angustia y confusión. El aterrizaje se sintió demasiado como caer, con esa ligera sensación en la boca del estómago que le dolió cuando aterrizaron. Dick no podía levantar la cabeza, no podía soportar ver a nadie. Apenas y pudo aguantar las miradas de lástima cuando Artemis y Barry finalmente lo persuadieron de entrar a la Bionave. Observar como el Ártico se desvanecía en el interminable blanco y gris, del interminable cielo crepuscular había sido jodidamente insoportable. Dick lo había dejado todo atrás con una mirada aturdida, sintiendo demasiado como si estuviera abandonando el hielo y el viento gélido, como si realmente se estuviera yendo...

Mierda.

Al otro lado de la playa en el atardecer, Batman dio un paso al frente, su mirada penetrante escaneando al Equipo. Dick prácticamente podía sentir como la mirada del hombre se detenía en él. Finalmente, enfocó su atención en Kaldur, su voz era severa y demandante.

一Aqualad, 一se dirigió al joven con un deje de brusquedad en su tono.一 ¿Qué pasó aquí?

Kaldur dudó solo por un momento antes de enfrentarse a Batman para responder. En ese momento, Dick fue abofeteado en el rostro con una amarga nostalgia; el haber visto innumerables veces como Kaldur le había reportado al Caballero de la Noche después de las misiones, años atrás, cuando eran tan solo unos niños, cuando... Dick apretó los dientes, cerrando con fuerza los ojos por debajo de su máscara, y luchando por respirar, con dificultad, por la nariz. A su lado, Artemis se acercó y le pasó la mano por la espalda. Aunque no lo veía, podía escuchar el intercambio.

一No temas, 一respondió Kaldur.一 La Crisis ha pasado... pero a un terrible costo.

Dick sintió esas palabras como si fueran una mano alrededor de su garganta. La playa estaba demasiado tranquila. La olas se estrellaban en la orilla, en un rítmico chapoteo en las rocas y la arena con un rugido sordo, como si el océano estuviera tratando de respirar por él. Dick podía saborear la sal en su lengua, y no podía distinguir si era la sal en la briza o la de sus lágrimas secas. Todo lo que sabía era que el sabor era amargo y no desaparecería, y que el océano era demasiado grande y estaba demasiado vacío, y su mente no podía formar pensamientos coherentes a través de las olas rompiendo y el océano respirándole en el cuello. Le tomó un momento, pero Dick consiguió respirar lentamente, sintiendo la mano de Artemis en su espalda deslizarse con la expansión de su pecho, exhaló mientras abría los ojos.