No puedo estar sin ti!

44 Un poco de luz

Bárbara

Estaba frente a Maca, mi rubia de ojos más hermosos, ante mis ojos ella es la mujer más hermosa que este mundo pueda tener, ella está totalmente sorprendida y me da paso para que yo entre a su departamento, ella cierra la puerta tras de mí y observo que una persona sale de la cocina, es Camila.

Camila: Hola, ¿Cómo estás? Bárbara me da gusto saber de ti. ¿Cómo sigue tú papá?

Ella me abraza, presiento que hoy es un día de esos, dónde por una extraña razón todos querían abrazarme.

Bárbara: Estoy bien, gracias por preguntar. Y mi papá está igual, aún no despierta.

Camila: Me alegro, y no dejes de tener esperanza que él saldrá de allí.

Bárbara: Así es, tengo esa fe que mi papá saldrá de allí.

Camila: Bueno yo las dejo hablar. Y tomen estos helados, les servirá a ambas.

Camila se fue a una de las habitaciones y mire a Maca, quien estaba frente a mí.

Bárbara: ¿Podemos hablar?

FLASHBACK

Me levanté y fui al otro lado del jardín estaba de pie llorando, no comprendí porque mi papá fue capaz de arriesgar tanto por mí, Maca puso en riesgo su vida también, esto que siento en mi pecho es desasosiego, desespero, preocupación, mi familia y mi novia corrieron peligro por culpa de Gonzalo, además está en mi ser la culpa por haber ocultado a todos, lo que él me hizo mientras fuimos novios.

Mi hermana llegó por detrás y me voltee y ella solo me abrazo no dijo una palabra por varios minutos, agradezco a la vida por tenerla, ella sabe llenarme de paz con solo un abrazo.

Ella viene a mi cuando estoy molesta, o cuando estoy triste o angustiada y solo me abraza, es algo que tenemos como hermanas, cuando ella hace eso mi humor cambia. Comencé a desahogarme.

Bárbara: Yo lo pude evitar

Mariana: Claro que no, tu no sabías que esto iba a ocurrir.

Bárbara: Yo sabía la horrible persona que es Gonzalo.

Mariana: ¿De qué hablas?

Bárbara: Sabes, ¿Por qué dure tanto con él? Porque le tenía miedo, viví muchos abusos de su parte, nunca llegué a pensar que él tenía tanto alcance de maldad, pero si llegó a ser muy celoso, me llegó a jalonear, fue agresivo, nunca me golpeó, pero si me amenazaba; que si me iba con otro me mataría, a veces pensaba que eran cosas del alcohol. Y terminé con él porque de cierto modo, cuando Maca entro en mi vida, ella me enseñó qué podía estar en una relación sana, ella no sabía, yo nunca le conté, pero muchas veces se dio cuenta que no me daba mi lugar, y era un poco abusivo, ella me dio fuerzas, me enseñó a ser valiente, me dio valor y me mostró que ninguna mujer debe soportar ese tipo de trato por el más mínimo que sea. Nunca les conté tampoco a ustedes porque pensé que yo tenía la culpa.