iv

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En si el entrenamiento ya era cansado, pero ahora que venía un campeonato contra otra escuela la presión sobre los chicos que conformaban el equipo lo era aún más.

Cassidy y su grupo de amigas observaban a los chicos desde las gradas. Estas no dejaban de suspirar cada que los chicos metían un gol o comenzaban a ejercitarse.

La de orbes marrones no dejaba de soltar quejidos de molestia, si no fuera porque Aidan estaba entrenando probablemente estaría haciendo algo más interesante que escuchar suspiros.

—Cass, pero si tu amigo cada día está más guapo. ¿Acaso están saliendo?

La chica posó su mirada en Kenzi. —No, él y yo sólo somos amigos.

—Sólo era una pregunta, no tienes por qué molestarte.

—No me gusta que me hagan ese tipo de preguntas.

—¿Por qué?, ¿Por qué son verdad?

Negó fastidiada, colocó su mochila en su espalda y comenzó a bajar las gradas a pequeños saltos.

La mirada cansada de Aidan se dirigió a la que sabía era Cassie, su pecho subía y bajaba a causa del agotador entrenamiento, limpio el sudor de su frente con la parte baja de la camiseta.

—¿A quién miras tanto? —cuestionó Liam acercándose.

—A nadie —destapó su botella de agua y le dio un gran trago.

—Hacía mucho que no entrenabas, creíamos que ya ni siquiera eras parte del equipo —comentó quitándose la camiseta, el grito eufórico de las chicas no se hizo esperar.

Ambos se rieron a eso. —Al parecer tienes admiradoras —lo codeo.

—Y tú tienes una.

Gallagher se mostró confundido, Liam señaló con su barbilla un punto en específico tras él.

Se giró y ahí estaba Cass observándolo, quien en cuanto lo vio mirándola se hizo la desentendida y fijo su mirada en su celular.

—¿Acaso son novios?

—¿Qué? No —negó con diversión—. Sólo somos amigos, que ahora mismo están tomando una pequeña distancia para no desatar problemas más grandes.

—Entiendo, o bueno, ustedes se entienden. Por algo son tan unidos, ¿no?

—Si, supongo.

El silbato del entrenador resonó en el campo. —El descanso terminó, a entrenar que aún les falta mucho por hacer. ¡Vamos, vamos, vamos! —gritó.

Ambos dejaron sus botellas de agua y Liam volvió a ponerse la camiseta.

Aidan dio un pequeño vistazo a su amiga y ahí seguía, con la mirada fija en su celular, soltó una deliberada carcajada y se fue corriendo a donde sus compañeros ya estaban haciendo algunas flexiones.

[...]

—¿Entonces iremos a comer todas juntas? —sí, otra vez estaba con sus "amigas"

Todas asintieron, excepto Reynolds.

—¿Cass? —esta las miró. —¿Vas a ir con nosotras?

—Oh, yo... si —asintió—. Sólo les avisaré a mi madre, para que no me esperen.

—¿No vas a avisarle a tu amigo?

—¿Ah? Oh, ¿a Aidan? No, él tiene cosas que hacer. Además, siempre estamos juntos no es como que vaya a pasarle algo porque yo no esté, ¿o sí? —todas negaron, Cassidy asintió y terminó de enviar el mensaje de texto a su madre—. Listo, ¿nos vamos?

𝑇𝑜𝑑𝑜𝑠 𝐸𝑛 𝑈𝑛𝑜 [𝑇𝑒𝑟𝑚𝑖𝑛𝑎𝑑𝑎]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora