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Despertar con Camilo era como despertar con un niño, uno asustado que se aferraba a ti, temeroso, uno que necesitaba protección por mas que dijera que estaba bien, estaba claro que no lo era, lo podías distinguir en la forma en la que te miraba, e...

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Despertar con Camilo era como despertar con un niño, uno asustado que se aferraba a ti, temeroso, uno que necesitaba protección por mas que dijera que estaba bien, estaba claro que no lo era, lo podías distinguir en la forma en la que te miraba, en la que se expresaba.

Cada palabra que salia de su boca no convencía a nadie, pero tampoco quería hablarlo, por mas que la familia le preguntara el no decía el porque de su sentir, por mas que me preguntaban a mi no podía decir nada, así es como el lo quería, y así es como seria, incluso Dolores, que, aunque no quisiera saberlo lo hacia pero tampoco hablaba, simplemente daba el espacio necesario, el espacio que el quería y requería.

Permaneció esquivo una semana mas, una semana en la cual por mas que quisiera demostrar cuanto quería a __ tomar su mano y caminar de esa forma a su lado, no lo hacia, temía que Camilo nos mirara transformado en alguien mas y el dolor regresara a el.

Ella parecía entenderlo, parecía que no le preocupaba mucho eso, sabia porque no no hacia con la intención de querer sepárame o algo por el estilo, simplemente era el remordimiento, una parte de mi no estaba feliz conmigo mismo, por mas cómodo que estuviera a su lado, Camilo me preocupaba mas, y ver esa actitud lejana era una alarma para mi, de que no estaba haciendo bien las cosas.

Las cosas en casa se estaban volviendo cada vez mas locas, la boda, la gran boda se estaba acercando peligrosamente, poco a poco, y con ella la histeria de la boda de una de las nietas Madrigal, para mi, aun me resultaba hipócrita por parte de la anciana Alma, quizá el cuento de que cambio todo mundo se lo tragaba, pero era testigo que la gente no cambia de la noche a la mañana, y para mi tres años no compensaban toda una vida de desprecios, de ser utilizados como un centro de atracción, de diversión para todos.

Para aquella mañana, después de una noche pesada de pensar, dar mil y un vueltas a esas decisiones por tomar, en si era realmente lo correcto, en dudar, en dar los pros y los contras de todo lo que me acongojaba, sin saber que es lo correcto, sin saber si realmente  estaba dispuesto a sacrificar aquello que tanto se debatía en mi mente, correr sin haber comido absolutamente nada en dirección con el señor juan, el tiempo se había escapado de mis manos, no me gustaba ser impuntual y el necesitaba ayuda, lo había dicho desde un día antes, esquivando a la gente que se atravesaba en mi camino, siendo desde la persona mas alta y ágil hasta el niño mas pequeño, solo para encontrarme con una escena que llamo mi atención.

Solo para ver a ___ y Camilo conversando, parecían afligidos ambos, parecía que finalmente estaban limando las perezas, un callo emocional que comenzaba a sanara, podía verse en la forma en que el le sonreía, con gentileza, con cariño, abrazándola como si de un muñeco de felpa se tratara mientras ella acariciaba su espalda, dando pequeñas palmadas y daba gentilmente mimos en su cabello, jugueteando con los risos, mientras le dedicaba palabras que no podía escuchar.

No quería ser descubierto, no quería que pensaran que los estaba espiando, si no que, simplemente me preocupaba, por el, por ella, por el futuro tan incierto que nos estaba esperando, un futuro donde ella permanecería e la vida de Camilo, mas no de la forma en la que el planeaba, dejándolos un momento a solas para seguir con mi camino, ellos lo necesitaban, necesitaban hablar, necesitaban expresar eso que ellos guardaban en su interior.

Heart's Puppeteers (CXCXT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora