8. ¿Tiempo?

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- A ver, acá la única engañada soy yo. ¿Ya se te olvidó que hace unos años me fuiste infiel y te perdoné? – preguntó a la defensiva.

- ¿Entonces te estás vengando por lo que te hice hace tiempo?

- No se trata de vengarme, yo no te estoy siendo infiel con nadie, pero últimamente siento que nos embarcamos en una rutina y siento que eso me tiene un poco estresada y necesito relajarme para pensar bien la cosas.

- Esta bien Alicia Montiel, haré lo que me pides, me iré a la casa de mi de mis papás para dejarte pensar. Pero eso si te advierto, no me quiero enterar de que estás teniendo una aventura con ese muchachito porque me las va a pagar muy caro, ¿lo entendiste?

A Alicia en ese momento se le heló la sangre, nunca antes su esposo le había hablado de esa manera y antes de que pudiera reaccionar ya Sergio había salido de la habitación azotando la puerta.

Esa noche Alicia no pudo conciliar el sueño, y así estuvo los siguientes dos días, debatiéndose con lo que sentía y con lo que debía hacer. Trataba de no pensar en ese hombre de ojos azules, pero le era imposible.

Pasaron unos días más, y había llegado el día del estreno de la novela en México. Sergio no había regresado a casa.

Alicia y Martin ya no se habían hablado, pero el sentimiento entre los dos crecía cada vez más. Ese día se tenían que ver sí o sí, pues les tocaba hacer la promoción del estreno en Televisa.

Ambos llegaron un poco antes a Televisa para prepararse para las entrevistas que tenían.

- Martin... Hola. – lo saludó con una media sonrisa.

- Hola Alicia. - él respondió serio.

- ¿Ya listo para la entrevista?

- Sí, claro.

Martin seguía algo distante con Alicia, cosa que a ella se le hacía raro, quería preguntarle que le pasaba, donde habían quedado todas esas palabras tan bonitas que le había dicho, pero muy en el fondo sabía que era lo mejor para ambos. Por supuesto no le dijo que Sergio se había ido de la casa.

Hasta que, en un impulso, Alicia se arriesgó.

- Martin, ¿crees que te pueda ver en mi camerino antes de entrar a la entrevista?

- Si, ¿pero puedes decirme para qué?

- En mi camerino hablamos, te espero en 10 minutos, ¿sale?

- Ok, ahorita nos vemos.

Alicia estaba en su camerino esperando que llegara Martin, muy entusiasmada porque volvería a platicar con él después de varios días, pero nerviosa a la vez.

- Hola... ya estoy acá. – dijo Martin entrando en el camerino

- Sí, es que... quería saber cómo estabas, tenemos rato que no hablamos.

- ¿Enserio para eso me dijiste que viniera? - Dijo algo disgustado, aunque en realidad trataba de evitar las ganas de besarla al verla parada ahí, tan hermosa como siempre.

- He notado que estás bastante distante conmigo, ¿puedo saber qué sucede?

- ¿Es enserio que me preguntas eso? – se acercó un poco más - ¿Crees que es fácil para mí pensar que yo estoy deseando estar contigo y tú cómo si nada en tu casa con tu esposo tan contenta? Porque lo que yo estoy sintiendo por ti sí es real, no sé tú...

- Martin, yo le pedí un tiempo a Sergio también, porque lo que siento por ti sigue creciendo incontrolablemente y no puedo estar tranquila, en el fondo sí siento que estoy fallándole a mi marido, aunque él ya lo hizo una vez, yo no soy una persona vengativa.

Martin cuando la escuchó decir esas palabras cambió su semblante por completo y se alegró.

- ¿Es verdad lo que me estás diciendo? – preguntó con una sonrisa.

Alicia al ver que él se acercaba también no dudó en hacerlo, pronto sus labios estaban casi juntos, los dos sentían el corazón acelerado y entonces se besaron, él la sujetó fuerte y la pegó totalmente a su cuerpo y el beso iba tomando forma, y cada vez se hacía más intenso.

Ellos estaban tan apasionados que se les había olvidado que pronto tendrían una entrevista. De pronto alguien toca la puerta.

- Alicia, necesitamos que te hagas presente en el set, quedan 10 min para ir al aire. – dijo la voz del otro lado.

Los dos tuvieron que separarse, pero se fueron muy contentos a la entrevista para el Programa Hoy, sus miradas no se podían ocultar. Martin estaba más que feliz, no se imaginó que Alicia tendría el valor de dejar a Sergio.

En la entrevista hablaron de la telenovela que ambos protagonizaban e invitaban al público a que no se la perdieran. La entrevista concluyó, y ambos iban de camino a sus camerinos.

- Me iré a cambiar de vestuario, luego te veo - le dijo Alicia sonriendo.

- Está bien. - le respondió Martin

Martin dio la vuelta y siguió su camino al camerino, pero de pronto tuvo la idea de regresar al camerino de Alicia. Lo que pretendía hacer era una locura, estaba consciente de ello, pero esta mujer lo estaba volviendo así.

Alicia estaba tratando de elegir qué ropa usaría, cuando llaman a la puerta, al abrir se encontró con la sorpresa de que era Martin.

- ¿Qué haces aquí? - le dijo Alicia sin comprender.

- Vengo a ayudarte a que te cambies... - respondió con una sonrisa coqueta.

- Pero yo no necesito que nadie me ayude a... - empezó a decir, hasta que se dio cuenta de sus intenciones - Martin, esto no es correcto, alguien nos puede ver. - dijo un poco nerviosa.

- ¿Y eso no te parece emocionante? - habló él mientras entraba y le ponía seguro a la puerta.

Alicia se quedó en silencio unos segundos.

- Bueno, si no quieres yo me voy. - se volteó para salir del camerino.

- No, quédate... - susurró Alicia.

El arte del amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora