Los instintos nos dominan, no se puede luchar contra ellos, ¿o si?
En una oscura y tranquila noche sin luna, el primogénito de los Wang nació en punto de la medianoche. Wang Yibo; heredero de una antigua y poderosa familia de alfas.
Un secreto ocul...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Yibo bebía un vaso ancho de alguna bebida alcohólica, estaba bastante relajado.
Su padre nuevamente un poco preocupado frente a él, esperando su respuesta.
- Él exagera, no estaba rondando a ese chico. - Dijo lo más neutral que pudo. Luego miró al pendejo de Lele detrás de su padre, haciéndose el inocente.
- Tal vez esto fue mala idea... creo que debería mantenerte en casa... que trabajes desde ahí...
- ¿Quieres encerrarme de nuevo? - Su postura relajada se tensó. Estaba molestándose.
- No estás controlándote, Yibo... ya has enfrentado a Feiyu y rondado a su secretario. ¿Qué pretendes?
- Ese alfa me ha estado provocando... y el secretario me gusta, te lo dije. - Dijo sereno.
- No vas a hacerle nada...
- Es un beta. - Se encogió de hombros. - No haré lo que piensas... solo quiero salir con él, me agrada.
Era mentira, obviamente lo quería de cena pero tenía que negarlo a su padre.
- No confío en tí. No puedes hacer relaciones normales con nadie...
Yibo se forzó a mantenerse imperturbable. Odiaba las restricciones que siempre le impusieron, pero no tenía muchas opciones. Apretó la mandíbula y miró nuevamente al beta apoyado en una pared, casi parecía culpable de haberlo acusado. A pesar de su compañía y ayuda a veces Yibo lo detestaba por contarle a su padre algunas cosas que hacía, Yibo creyó que nadie se había percatado que rondó Zhan en el estacionamiento pero a Lele casi no se le escapaba nada. Debía encontrar la forma de burlarlo, siempre estuvo vigilado y estaba harto.
- ¿No crees que eso levantaría más sospechas? El hijo de Wang Qiren no se mezcla con nadie... no va a esas dichosas fiestas empresariales... aquellas reuniones importantísimas...
- Yibo, si no puedes controlarte y someterte a Chen Feiyu y otros alfas en la empresa, no puedes...
El delta se levantó y caminó hacia su padre, Lele se acercó desde atrás por si las cosas se complicaban, a pesar de ser un beta, era bastante grande y fuerte, ya había contenido a Yibo más de una vez, aunque fuera en su adolescencia.
Qiren tragó duro, el orgulloso alfa Wang, bajó la mirada ante su hijo. Fue la única manera que encontró de mejorar la relación que tenían. Yibo lo respetaba como padre, pero cuando el delta se molestaba y mantenía su postura, el alfa maduro debía mantenerse tranquilo para no generar una lucha por el dominio. Era muy difícil para el señor Wang, pero tuvo que hacerlo. Él se había sometido a su hijo hacía un tiempo.
- No voy a someterme a Chen Feiyu ni a ningún otro alfa... que se mantenga alejado de mí y no habrá problema alguno, padre...
Su padre lo miró nuevamente y asintió. Hablaría con Kaige para que este mantuviera a su hijo Feiyu alejado de Yibo. En cuanto al beta...
