5. Vibrador

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[NOTA DEL AUTOR]

No se que verga acabo de escribir xd

Estaba aburrido y pos, salió esto, si queres leerlo, hazlo, pero es algo raro o por lo menos para mí.


























Otro sueño, pero no uno normal, eran de esos que hacían que su amiguito despertara, y al igual que las anteriores veces había vuelto a soñar con ese hombre, y eso le molestaba, no le gustaba saber quien era el hombre de sus sueños. Suspiro frustrado, vio de reojo el reloj a su lado, eran las tres, soltó otro suspiro, se levantó de su cama con destino el baño, planeando darse una ducha fría, pero tropezó con su maleta, aún tenía algunas cosas guardadas allí dentro, acá ya algo he sobresalía del cierre, algo rosa, al abrirlo encontró algo que no veía desde hace tiempo. Aquel pequeño círculo que se encendía con el control. Lo pensó dos veces si usarlo, o no. Pero, a alguien le gustaba dormir desnudo, además de que estaba a dos velas (o sea, está necesitado).

Humedeciendo su entrada con lubricante, lo introdujo con cuidado, y sintiéndose incómodo, agarró el control, comenzando a ver los botones, intentando deducir cuál era el de encendido, sin saber bien cuál tocar, presionó el botón verde. Se sobresalto al sentir como comenzaba a vibrar, no recordaba que fuera tan fuerte, provocando que soltara un grito exitado. Había soltando el control por error, y sinceramente, él ya se hallaba en su propio edén, tan sólo era él, pese a estar con la mente nublada, no oyó el ruido que hacían las paredes, no escucho los pasos que se aproximaban hasta donde él estaba y no sintió como era observado desde el umbral de la puerta; mientras, él comenzaba acariciar sus pezones y bajaba su mano hasta su erecto miembro, masajeandolo de arriba a abajo, soltando jadeos ocasionales.

Y a su mente, en ese instante, no pensaba nada más que en él. El hombre misterioso de sus sueños, se imagino que era él, el que lo hacia sentirse en el paraíso, que era él quien provocaba aquellos gemidos tan fuertes.

Su miembro ya se hallaba con líquidos preseminales, estaba a punto de venirse en cualquier momento.

- ¡Mmm!

Mordió su labio apaga evitar venir muy alto. En pocos minutos aquel aparato lo hizo venirse muy rápido.

Busco con desesperación el control remoto, sus piernas temblaban pese a la constante vibración en su interior.

-Ah... Ah... El control....

Y lo diviso a lo lejos, pero las vibraciones sólo hicieron que cayera al suelo, teniendo que arrastrarse hacia el control. Tomandolo entre sus manos al control lo apagó, suspiro un poco más aliviado, cerró los ojos con pesadez, tenía sueño, y aún faltaban otras tres horas para comenzar su rutina, cayendo en los brazos de Morfeo, quedo inconsciente.

Aquel quien lo observaba oculto desde el umbral de la puerta se acerco hasta donde yacía el cuerpo. Lo elevó del frio suelo con cuidado de no despertarlo, por suerte, Noah era de sueño profundo. Lo deposito en su cama y lo cubrió con las sábanas, no quería que se resfriara por dormir en el suelo.

Brahms, lo negaba, auto convenciendose de que lo odiaba, pero muy en el fondo, bien sabía que lo quería, que lo amaba como nunca antes había amado a nadie.

Antes de irse se quedo viéndolo fijamente. Se veía tan tranquilo durmiendo, tan relajado, estaba callado y eso le incómodo, siempre lo oía cuando le contaba alguana anecdota, o cuando comenzaba hablar de trivialidades, o incluso cantar, a pesar de que aveces cantara desafinado, o no.

Siempre se le era y será grato escuchar su voz, pero, cuando lo escucho gritar, creyó que estaba en peligro, y ya no le importó que lo viera, era su deber protegerlo. Pero, Noah no estaba en peligro, se estaba masturbando, y eso le molesto bastante, más porque utilizaba ese aparato cuando podía.... Negó rápidamente con la cabeza, como si aquel acto quitará esa idea de su mente.

Soltó un bufido.

Estaba pasando el umbral cuando recordó que aún tenía ese aparato infernal. Regreso desidido a quitarselo, no le gustaba ni un poco que tuviera juguetes de ese tipo. Allí el problema, esa cosa aún seguía en su interior... Pero Brahms no tenía tiempo para dramas innecesarios.

Destapando la parte interior de su cuerpo, con cuidado abrió las piernas del muchacho, dejando a la vista aquel orificio rosa pálido, trago en seco antes de hacerlo, e introdujo el primer dedo en busca del vibrador. Sentía como sus paredes lo comprimián y evitaban que continuará, introdujo un segundo dedo, provocando que el chico soltará un gemido ahogado, lo ignoró, movía sus dedos en forma de tijera intentando alcanzar el aparato, lo tocaba pero se le resbalaba de entre sus dedos, a la vez que hacia aquello, Noah no había pasado de soltar jadeos ante la excitación, se sentía increíble.

Un tercer dedo se introdujo, y Noah para ese entonces de forma inconciente movía sus caderas en busca de mas placer, un acto que ayudó a que Brahms sacará el aparato, momento justo en el que un fuerte jadeo se oyó mientras eyaculaba, salpicando la máscara del mayor.

[...]

A la mañana siguiente Noah busco por todas partes su vibrador, pero no hubo caso, lo había perdido. Por su parte Brahms no le había dirigido la palabra a su niñero en todo el día, después de lo sucedido, se dio cuenta de lo que habia hecho y se sentía avergonzado. Mientras que, al de pecas todo había sido un sueño bastante placentero.


























































































































































































































































:/

¿Niñero? ᴮʳᵃʰᵐˢ ᴴᵉᵉˡˢʰⁱʳᵉ Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora