9. Remodelación de la mansión

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Se sobresalto al oir un gran estruendo proveniente de la planta baja, tomando su bata de baño, y con sólo eso cubriendo su desnudez, salió a las corridas de us cuarto bajando hasta la planta baja, siendo con lo primero que se toparon sus ojos el gran quilombo que había, a donde mirase había algo roto, como si un tornado se hubiera formado allí abajo y dejado todo ese caos, el ruido había cesado y lo que había creado aquel desastre ya no estaba presente.

Con cuidado de no clavarse algún cristal, fue hasta la biblioteca, que era en donde oía aún un ruido, al llegar vio a Greta recoger algunas cosas del suelo. Y del resto de la planta baja, la biblioteca parecía ser el unico lugar en donde los daños habían sido mínimos.

-Greta-la llamo, está inmediatamente levantó la mirada-Dejalo así. Ya mañana lo arreglamos, con más luz, y energía que ahora.

Ella sonrió incómoda, no le gustaba la idea de dejar todo hecho un caos-Esta bien.

Luego ambos, regresaron a sus respectivas habitaciones, y de lo que resto de la noche, ya no hubieron más destrozos (por  suerte); a la mañana siguiente, y al despertar, tal como lo había dicho Noah, se pusieron a limpiar todos los destrozos que había hecho ese animal salvaje.

-Creo que podria contratar a alguien para que redecoré este lugar-le comento de la nada el de pecas, cuando recogían los restos de cristales del suelo-Dado que está ahora es mi casa, y tengo una fortuna de millones, creo que le vendría bien una redemolación a la mansión.

Greta lo medito por unos segundos antes de hablar-Creo que es una fantástica idea, de seguro no se vería tan lúgubre si fuera un poco más pintoresco.

Una sonrisa se dibujó en sus labios, las cosas irían a cambiar por aquí, para ambos, para Noah como para Brahms.

[...]

Dias despues, cuando enterraron a los Heelshire, quienes había pedido ser enterrados junto a la tumba de su hijo (como dictaba en sus testamentos), esa,  fue la primera vez que Noah veía la tumba de Brahms desde que había llegado, más tarde ese día, Noah hizo unos cálculos rápidos sobre la edad que tendría Brahms en la actualidad.

-Habiendo nacido en 1983 y muerto en 1991, y viendo que estamos en 2016-murmuraba para si mismo, moviendo sus dedos, bajando y subiendolos, contando con ellos-Eso nos da un total de... Treinta... Y tres-su cabeza se movió en dirección en la que se hallaba sentado el muñeco un par de metros alejado de él. Soltando una estruendosa carcajada, llena de burla, expreso-Brahmsy, ya no creía he te quedé decirte Bramsy, ya eres un hombre con más de treinta años. Asi que ahora eres el nuevo señor Heelshire-bromeo, volviendo a reír.

Brahms, por su parte, desee el interior de las paredes, estaba que sacaba humos por las orejas. Sin lugar a dudas odiaba que le dijese viejo. Él no era ningún viejo y mucho menos para que le llamase señor, eso no le agrado. Saliendo de su escondite, aprovechando que este tenía los ojos cerrados le arrojo la pelota anti estrés, dándole justo en la cabeza. Se oculto rápidamente antes de que lo viese.

- ¿Ahora me arrojas cosas a la cabeza? Muy mal, Brahmsy muy mal-dijo, con falsa seriedad-Ahora no tendrás beso de buenas noches.

Otro golpe, otra pelotita anti estrés, ¿cuantas de esas cosas poseía? Con el ceño fruncido, y con una muñeca en sus labios, que en vez de parecer una expresión de ebojo, parecía más bien un puchero que le haría un niño a su madre porque ella no le quiso comprar el juguete que quería.

- ¿Acaso quieres que sean dos noches seguidas sin beso de buenas noches? -un leve no se escucho, y eso fue suficiente para que el semblante de Noah se relajará.,


[...]

En cuestión de unos pocos meses, la casa fue remodelada por completo, que sería irreconocible para el que la viera ahora.

Las cosas que eran del señor y señora Heelshire fueron dejadas en el ático, mientras que el cuarto de Brahms permaneció igual, con uno que otro peluche nuevo (cortesía de Noah), se deshacío de los muebles que se habían roto en las dos ocasiones en la que un animal salvaje invadió la mansión y los reemplazaron con unos nuevos. Además del cuarto de Brahms, el cuarto de juegos y la biblioteca era otro lugar que seguía prácticamente igual, con la única diferencia que ahora había una rocola en el cuarto de juegos, lugar en donde Noah comenzó a pasar mucho más tiempo.

Noah siendo el nuevo dueño de la mansión y la fortuna de los Heelshire, lo único que se le ocurrió hacer fue la remodelación. Y el resultado le había encantado, y no sólo a él, a Brahms también, le gustaba lo tan... Le gustaba porque le recordaba a Noah, como si cada rincón de la casa tuviera algo de la personalidad de su niñero.

Se sentía como si estuviera en la mansión de los X-Men, y si lo piensas bien, eran similares, solo que no habían mutantes.

Además de la redemolación total del interior de la mansión  (ya que el exterior lo dejo exactamente igual) también consiguió que le pusieran televisión por cable, una mejor recepción telefónica e Internet. Ahora sólo estaba Noah en la mansión, el solo, solin, solito, en su universo de soledad junto al muñeco.

Greta se había ido unas semanas después de que la remodelación comenzó, había conseguido un trabajo y otro lugar donde vivir, ella ya no quería seguir aprovechándose de su hospitalidad al dejarla vivir allí. Y por primera vez  en mucho tiempo las cosas estaban saliendo bien para ambos. Greta  ya no había recibido noticias sobre su ex y eso la alegraba, mientras que, Noah, básicamente ahora era millonario y tenía una mansión increíblemente tenebrosa. Y no muy lejos de allí había abierto un Bufet de abogados, en donde iba a trabajar desde las seis de la mañana hasta la una de la tarde, y recién a esa hora almorzaba junto a Brahms.

- ¿Que te parece nuestro nuevo hogar, Brahmsy? - pregunto sonriente al muñeco, sin esperar respuesta y tomando su silencio como que el gusto, continuó hablando- ¡Oh, mira la hora!

Dejando al muñeco en una silla cogió su saco junto a sus llaves, y antes de salir se despidió de Brahms, no sin antes avisarle que le había dejado su desayuno en el microondas.

Y sin más se fue corriendo hasta donde se encontraba la motocicleta que se había comprado, y se alejo de la mansión, siendo observado a lo lejos por el de la máscara. Quien en silencio contaba los segundos para que este regresará.







































[NOTA DEL AUTOR]

El próximo capítulo será uno especial, diferente a los otro y probablemente sea mucho más largo de los he han sido los otros.

Y otra cosa.

A mi en lo personal me gustaría que el verdadero Brahms y Noah se conozcan, y si les soy sincera no se como hacer que aparezca, ¿alguna idea? Aceptó sugerencias.

Nos leemos luego 😘

¿Niñero? ᴮʳᵃʰᵐˢ ᴴᵉᵉˡˢʰⁱʳᵉ Libro 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora