500 Años Después.. ( Sesshome Finalizada)

Imprudente

(Capítulo 16)

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(Pov-Kagome _ Pov- Inuyasha - Pov- Sesshomaru)

Todavía no logro asimilar por completo todo lo ocurrido en el día de ayer junto a Sesshomaru.
Mí cabeza parece haber quedado en una especie de transe por tanto placer que mí cuerpo había recibido por parte del candente demonio.
Como me había atrevido a llegar tan lejos?..
Sesshomaru es mí jefe después de todo!
Eso no pareció haberme importado mucho en aquel momento, pensé.
Incluso he llegado a desconocerme a mí misma.

(Sigue porfavor, necesito más de ti)

El solo hecho de recordar lo vulgar que sonaron aquellas palabras, mís mejillas se encienden por la vergüenza, Cómo podré mirarlo a la cara después de todo lo que hicimos en su precioso auto?..

No puedo evitar juntar mis piernas, para buscar o poder sentir algún tipo de fricción en mí intimidad.
Recordar la sección de besos prohibidos cortesía de quién alguna vez fue mí enemigo, me hace tener un fuerte cosquilleo en esta.
Vaya!
Para enemigos así, quien necesita amigos?.. pensé y no puede evitar largar una risita.

Sesshomaru es asombroso, es apuesto, exitoso y...
Y el es un maldito asesino!
Cómo se me había podido olvidar ese pequeño detalle?..
Lo conozco más que cualquier  otra mujer de aquella carpeta, la cual seguramente solo puede apreciar su belleza exterior o quizás su dinero.

Yo lo he visto comerse la cabeza de Naraku! Grita mí racionalidad en mí mente.

Mí cuerpo se estremece y mí piel se eriza al recordar tal acto de poder de su parte.
Si Sesshomaru es el ser más poderoso que existe no hay duda de ello, y no es precisamente porque nade en dinero.

Aunque el tiempo ha transcurrido y he visto como se adapta perfectamente con los humanos e incluso trabaja con ellos, sin ningún tipo de problemas.
El ha dejado de ser un peligro evidentemente, pero no debo de olvidar su verdadera naturaleza.

Yo y mí extraño gusto por lo prohibido, porque claro está.
Sesshomaru es alguien prohibido y en su frente lleva un cartel de neon que grita ALEJATE!

Y no es solo el hecho de que primero estuve perdidamente enamorada de su hermano menor, por cierto..
Inuyasha...

El..
Realmente sus intenciones nunca habían sido atentar contra mí vida y eso hace surgir un extraño sentimiento de culpa y odio hacia mi misma por haber querido purificarlo en el preciso instante en que lo vi.
Ahora pensadolo bien no difiero mucho de Sesshomaru.
Pensar que yo también tuve mis motivos no sería justo para quitarme aquél sabor amargo que estoy sintiendo por experimentar tanto arrepentimiento.

Realmente lo hubiese hecho?

Si cuando Inu me aferró a sus brazos, sentí derretirme cual mantequilla puesta a la sartén..

Definitivamente no pude evitar sentirme feliz de haberlo visto nuevamente.
La alegría que desprendía mí alma era tan evidente, como el saber que una marca suya siempre llevará mí corazón.

Estoy segura que Inuyasha en estos precisos momentos sabe que entre su hermano y yo existe algo.
Algo a lo que todavía ni el ni yo dimos nombre.
Pero si que lo hemos demostrado más con hechos que con palabras.
Y que hechos!! Grita mí diablillo interior..