Siempre amé los días de invierno, nublados con bastante frío o aquellas lluvias que te dejaban empapado de agua, o al menos, para mi, de felicidad.
Estaba sentada en el mostrador esperando a que alguien apareciera pronto por la puerta de entrada, lo cuál dudaba mucho debido a que la lluvia había aumentado bastante, me dedicaba a observar por la ventana, pero no había nisiquiera un alma deambulando por las calles de Daegu._ la gente aquí teme al invierno, supongo que temen resfriarse o algo, nuestras pequeñas clínicas aún no son tan modernas para darnos el lujo de que tener una mala salud - habló la pelirroja observando hacia afuera, del mismo modo que yo
_ Nadie querría enfermarse Annie, ni teniendo el mejor sistema de salud - reí ante su comentario - debe ser porque saben que el invierno aquí suele ser más crudo que en otros lados
_ Al principio parecías afectada por la diferencia climática, pero ahora te veo muy a gusto eh - rió también, bebiendo un sorbo de su café
_ aunque me ponga nostálgica, me gusta el invierno... - respondí recordando mis inviernos en Seúl - dejando de lado los malos momentos que pasé en el, siempre disfruté mucho el invierno
_ comprendo...
Me habría quedado otros minutos observando la ventana mientras recordaba el pasado, lo habría hecho encantada de la vida, pero mi nostalgia se vió interrumpida por un leve olor a quemado.
_ ¿Annie? - pregunté olfateando - ¿ese olor es...?
_ ¡Las galletas! - gritó ella en lo que inmediatamente corría a supervisar el horno
Reí viéndola espantar el humo con un paño de cocina, la verdad es que Annie era bastante divertida cuando no estaba concentrada cocinando. Era una buena compañía, de eso no tenía duda.
Me levanté del pequeño asiento de madera para ir hasta la cocina y burlarme de ella, pero la campanilla colgada en la puerta de entrada sonó y inmediatamente volteé a atender al cliente.
Uno guapo, mojado y de nariz muy roja._ Tae... - dije preocupada saliendo del espacio de ventas para poder llegar hasta su lado - estás empapado, ¿Porqué no has usado un paraguas?
_ quería g-galletas - susurró botando vapor por sus labios - Y-y no habían en casa
_ Debiste pedírmelas, yo podría haberlas llevado - regañé tratando de no ser muy dura con él - podrías resfriarte
_ A-ami - susurró tiritando
Lo volteé para poder quitar el abrigo húmedo que traía puesto, quitándome el mío para así abrigarlo un poco. Su cabello también estaba algo mojado. Por lo que tomé un paño de cocina seco del mesón y traté de quitarle la humedad.
Taehyung tan solo me abrazó mientras secaba su cabellera._ ¡salvé las gall-
Taehyung y yo volteamos a ver a Annie, quién parecía más sorprendida por la forma en la que estaba ayudando a Taehyung a verlo en aquel estado.
_ ¿Qué sucede con Taehyung? - preguntó aún un poco dudosa
_ a llegado empapado, por eso le di el mío y ahora trato de secar su cabello - respondí tratando de sonar súper neutra - quizás el chico pueda resfriarse
_ llamaré a su madre - respondió ella desapareciendo por la cocina
_ N-no era necesario - respondió Taehyung con un volumen de voz bastante bajo - Tae está b-bien...
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대구 기념품 | 𝙳𝚊𝚎𝚐𝚞 𝚖𝚎𝚖𝚘𝚛𝚒𝚎𝚜
FanfictionDecepción, lecciones de vida, una cafetería, amor, autismo y un enorme misterio. Demasiadas emociones para Ami, quién tras una fuerte crisis existencial es obligada a enmendar sus errores en uno de los pueblos más tranquilos de Corea... Daegu. Las l...