Con las pruebas encontradas el caso seguía avanzando con normalidad, a pesar de que el contenido en los sobres les había dado un gran adelanto aún no era suficiente y aquello había comenzado a frustrar a todos. El señor Lee trabajaba día y noche guiando una búsqueda para encontrar a Eungyeom, aunque la mujer no tuviese una identificación o un registro se había dado la orden de avisar sobre cualquier individuo que quisiese abandonar el país, habían recibido un par de alertas pero ninguna se trababa de ella.Al ver que las crisis de Taehyung habían comenzado a ocurrir con frecuencia supe que necesitaba hacer algo, sabía que aunque tuviésemos que mantener especial cuidado no podía seguir manteniéndolo encerrado, no cuando había pasado años así. Después de hablar con el oficial y concretar la ayuda de Lou pude recibir la aprobación necesaria para que Tae pudiese comenzar a tomar clases de violín con el hombre de la tienda, Taehyung estaba emocionado y más aún cuando conoció al señor, a pesar de su avanzada la pasión que sentía por la música le hacía brillar y aquello era algo que Tae admiró desde que lo conoció.
El trabajo para Yeojim se intensificó cuando comenzó a trabajar con la policía, dejó de atender pacientes en su casa y comenzó a hacerlo en una oficina que la comisaría entregó a su disposición, la necesitaban presente y atenta ante cualquier cosa sobre todo después de que ella accediera a firmar un contrato en el que aceptaba dar apoyo psicológico a víctimas de casos policiales, personas como Taehyung.
Siguiendo con nuestra rutina aquel día me levanté temprano para poder limpiar la casa, me gustaba dejarla reluciente mientras que Yeojim trabajaba, era mi manera de agradecerle. Taehyung se había levantado con mucho sueño aún y se dirigió a ducharse mientras yo preparaba algo para desayunar.
_ ¿Cuánto tiempo durará tu clase de hoy? - pregunté cuando lo vi salir vestido y con una toalla en su cuello
_ El señor dijo que podía quedarme dos horas si quería, hoy tiene un rato libre y me enseñará escalas musicales - sonrió este mientras se sentaba
_ Me alegra - respondí dejando su desayuno frente a él - come, Yeojim tenía frutas así que esto será muy sano para ti
_ Ami... n-no me gusta la avena - reclamó revolviendo el contenido con la cuchara
_ ¿De verdad? Debiste decírmelo Tae Tae - respondí pensando en qué otra cosa poder hacer - aun no recibimos el apoyo de este mes y no hay muchas cosas en la despensa
_ Está bien - respondió Tae levantándose de la mesa - de todos modos no tengo hambre
Sin decir más Taehyung se levantó de la mesa y desapareció camino a la habitación. Los últimos días ambos habíamos estado distantes, no es porque quisiéramos, al menos no por mi parte, estaba tan preocupada por lo que estaba pasando que sin comentárselo a nadie había estado haciendo pequeños trabajos online para poder ayudar a Yeojim, en las mañanas me sentaba con su computadora y me dedicaba tanto a eso como a estudiar. Tras preparar el almuerzo y limpiar la casa llevaba a Tae a sus clases, en la tarde lo iba a buscar y nuestro día solía terminar así.
Caminé hacia la habitación encontrándomelo recostado y de espalda, estaba en posición fetal por lo que no podía ver su rostro, toqué la puerta tratando de llamar su atención pero este no volteó. Suspiré profundamente y me recosté a su lado.
_ ¿Que sucede Taehyung? ¿Estás molesto conmigo? - pregunté observando su cabellera
El silencio siguió, Taehyung no decía nada y sinceramente aquello había comenzado a molestarme.
_ Bien, puedes hablarme cuando dejes de estar así, no tengo tiempo para esto - respondí levantándome de la cama, me había comenzado a doler la cabeza y sinceramente estaba agotada
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대구 기념품 | 𝙳𝚊𝚎𝚐𝚞 𝚖𝚎𝚖𝚘𝚛𝚒𝚎𝚜
FanfictionDecepción, lecciones de vida, una cafetería, amor, autismo y un enorme misterio. Demasiadas emociones para Ami, quién tras una fuerte crisis existencial es obligada a enmendar sus errores en uno de los pueblos más tranquilos de Corea... Daegu. Las l...