-Lo que tú digas pequeña-, dije y lance su cuerpo sobre la cama posicionándome sobre ella inmediatamente, lleve sus manos sobre su cabeza y volví a besarla, el beso era aún más intenso que los anteriores, su olor era aún más delicioso para mi olfato y su cuerpo se estremecía bajo el mío. -Abre las piernas pequeña, quiero ver que tan deliciosa eres-, dije y así lo hizo
Deslice mis besos a su cuello, clavículas y abdomen, levante su bata y deslice su ropa interior por sus tonificadas piernas.
Y miré, miré lo húmeda y deseosa que se encontraba para mi, por mi.
Mi lengua recorrió desde su entrada hasta su clitoris de arriba hacia abajo y viceversa, mis manos sujetaban sus muslos manteniendo su centro a mi disposición, aún mirando su excitado rostro, sus ojos conectaban con los míos exigiendo más atención.
Cuando succione por primera vez su parte sensible llevo una de sus manos a su boca para silenciar el gemido que salió de ella, la otra se dirigió a sus senos, la forma en la que se tocaba era aún más excitante, verla provocándose más placer y callando sus gemidos me prendían más de lo que ya estaba.
Fue mala idea no usar algo debajo de mi pijama, estaba duro y goteante, esperaba poder contenerme, esperaba controlar las ganas de un hundirme en ella y marcarla mientras la hago gemir mi nombre.
Seguí besando y succionando su parte sensible y dirigí mi mano a su centro, introduje uno de mis dedos y luego otro, los deslizaba dentro y fuera y esta apretaba su interior por puro placer.
Dolía.
Dolía mucho mi ereccion, así que lleve la mano que sujetaba uno de sus muslos aún y la toque aún por encima de la tela, estaba sensible, los toques, su olor, su respiración errática y su palpitante coño en mis dedos me harían perder la razón.
Unos ruidos en el pasillo y dirigiéndose a la plata baja se escucharon, los correteos bajando la escalera de madera y las voces de Min Yoori hermana de Yoongi y este discutiendo, mientras el último le gritaba a Jungkook que lo mataría, hicieron que retirara mi rostro de su entrepierna, pero cuando iba a ponerme de pie Raya me tomó por la parte trasera de mi cuello, acción que hizo que pusiera toda mi atención a ella nuevamente.
-No te moverás de aquí hasta terminar-, dijo ella y podría jurar que uso voz de mando, cosa que es imposible en una omega, en sus ojos estaban esos hermosos destellos plateados.
Así que coloqué nuevamente mis dedos en su entrada haciéndola gemir y curvar su espalda, -Me salió mandona mi pequeña, ¿Que debería hacer?-, dije y moví mi cuerpo posicionándose sobre ella, esta me besó con ferocidad y comenzó a tocar mi entrepierna, introduciendo su mano por dentro de mi pantalón y tocando, era increíble como me tocaba, era fuerte y brusca, deseosa, nuestros gemidos eran callados con la boca del contrario y nuestros cuerpos estaban sudorosos.
Sentí mi cuerpo tensarse y el de ella relajarse, mire su rostro, su boca entreabierta, sus ojos cerrados y una pequeña mueca de riza se colaba por sus labios, había conseguido su liberación, mientras que la mía se aproximaba, me coloqué de rodillas en la cama aún con sus manos tocándome maravillosamente, y me sostuve del respaldo de la cama, no sabía cuánta fuerza usaba hasta que lo oí crujir, así que desvíe mis manos a la pared, pero en ese momento me golpeó el orgasmo que tanto deseaba, haciéndome perder la razón.
Segundos después la oí hablar
-Creo que acabas de romper la pared Hulk-, dijo y mire mis manos, efectivamente mis puños se encontraban sobre la pared y alrededor de estos se podían apreciar las grietas en ella.
Tomé la toalla con la que había llegado retirando la humedad de mi cabello al salir de la ducha y limpié sus manos y torso que habían quedado empapados con mi eyaculacion y luego me recosté a su lado.
-Creo que los Jeon se quedaran sin sucesor esta noche-, dije y ambos comenzamos a reír, al parecer el niño hizo de las suyas antes de irse.
Luego de algunos minutos una respiración pesada a mi lado me hizo voltear, percatándome de que Raya se encontraba dormida, me levante, asee un poco y baje esperando no encontrar a nadie muerto.
-¿Todos estamos vivos?-, dije al bajar y ver a Yoongi darle una mirada de muerte a Jungkook que se encontraba justo al otro extremo
-Hyung, dile que me casaré con ella, solo que no puedo hacerlo hasta que sea el líder, papá me matará-, dijo Jungkook cuando me posicione a su lado.
-Y yo te mataré si no lo haces ahora, ¿Como se te ocurre anudarla y embarazarla aún si marcarla?, ¿Te crees que es una de tu putas?-, dijo Yoongi y ahí entendí la razón de su molestia
-No creo eso de ella, yo la amo, es solo que no podía casarme antes de obtener el liderazgo-, dijo
-Pues ahora lo harás, antes de que nazca el cachorro,- sentencie - ¿Donde esta Yoori?-
-Se fue al cuarto molesta por el idiota este-, dijo Jungkook y luego de que Yoongi casi se abalanzara sobre él salió corriendo en dirección a las escaleras, supongo que para donde su futura omega.
-¡No cierren la maldita puerta!-, grito Yoongi cuando lo vio irse
-¿Porque no?, ya no puede quedar más embarazada-, dije y la mirada que me regaló me dio a entender que aún no era momento de bromear.
-Son unos idiotas, él no podía enlazar antes de los 20 años y ahí está, esperando un cachorro con mi hermana, es un estupido.
-No lo culpes, no todos podemos ser ermitaños y solterones como tú-, dije y bufo, -ademas es solo una tonta tradición, no creo que al consejo superior le importe mucho que esté enlazado al momento del nombramiento.
Solo lo vi asentir, así que respire tranquilo, se le estaba pasando el enojo.
-Lamentó que el escándalo interrumpiera tu noche-, dijo y al ver mi cara de confusión continuó, -tienes marcas de uñas en tu cuello-, dijo y lo señalo, no lo había notado.
-No es nada, no lo interrumpieron, por cierto mándame la cuenta de la reparación del respaldo de la cama y la pared, me voy a dormir-, dije y comencé a subir
-Bie.., espera ¿Que? - lo oí decir antes de perderme por el pasillo.