En la cima

18.

12 de agosto, recepción de MTM
17:32

Chris juntó sus cejas cuando vio a su mejor amiga caminar por la recepción, miró la hora en su teléfono y frunció el ceño ¿Noelia saliendo antes de las cinco del trabajo? ¿Y sin Ruby? Aquella tarde había chisme.

A paso decidido y con la ayuda de su metro noventa se acercó hasta dónde estaba la morena, más pendiente de su teléfono que de otra cosa, y le tocó el hombro. Noelia se giró con el ceño fruncido y una expresión de completa molestia.

- No me extraña que nadie se te acerque si te giras siempre con esa cara de malas pulgas- la mujer rodó los ojos al escucharlo- ¿Te vas ya?

- Si. He terminado por hoy.

- ¿Y no te vas con Ruby?

- ¿La ves en algun lado?- el pelirrojo negó- Bien, pues hay tienes tú respuesta- Chris hizo una mueca de fastidio. Noelia estaba demasiado de mal humor para ser un viernes.

- ¿Te ha dejado plantada para ir a por el helado y por eso estas así?

- Tenía que hacer no sé cosa con su novio- aclaró sin una pizca de emoción en su voz- Y no estoy molesta por eso. Es viernes y estoy harta de arreglar todos los errores que hacen mis empleados no muy competentes por lo visto- refunfuñó- Por suerte tengo hasta el lunes para terminar de solucionar todo antes de que me vengan más problemas.

- Y por desgracia hasta el lunes no volverás a ver a Ruby.

Fue a contestar, pero el sonido familiar de su teléfono la interrumpió. Masculló buscando en su bolso el dichoso aparato. Como fuera otro empleado diciendo que había cometido otro error iba a despedir a todo el mundo.

Miró con cierta duda el nombre que aparecía en la pantalla "Ruby" ¿Que se le habría olvidado en la oficina?- pensó atendiendo la llamada. Chris al ver el nombre de la pelinegra levantó las cejas y formó una sonrisa pícara, acercándose lo máximo posible a la oreja de Noelia para escuchar la conversación.

- Buenas Ruby, quiero advertirte que tengo un cotilla pegado al mo...

- Noe- la voz de Ruby sonaba como un susurro agustiado e hizo que se callara al momento- ¿Puedes venir a mi casa, por favor? He roto con Mario y...

- Enseguida estoy- habló empezando a andar para ir a la puerta, haciéndole un gesto de despedida a Chris, que se quedó en el sitio entre asombrado y confuso.

*****
12 de agosto, portal del edificio de Ruby
17:59

Cuando el señor Davies le abrió la puerta no tuvo que preguntarle cuál era el piso de Ruby, fue directa al ascensor, no sin antes regalarle una sonrisa al hombre.

Llegó a la puerta de Ruby y llamó al timbre, esperando tener una contestación. La puerta se abrió y unos ojos brillantes fue lo primero que vio.

-Lo siento por llamarte a ti. Samantha no me cogía el teléfono y... No quiero estar sola- trató de disculparse de forma atropellada en el segundo que la mayor entró al apartamento. Noelia solo negó y avanzó un par de pasos para abrazarla. Obviamente Ruby se sorprendió al contacto, Noelia no era justamente la persona que más afecto mostraba pero agradecía el contacto.

- No tienes que disculparte por nada- le dijo a acariciando con suavidad su nuca, tratando de darle apoyo- Me alegro que me hayas llamado.

- Lo siento. Me he quedado en blanco y no sabía qué hacer, solo necesitaba a alguien y...

- Te he dicho que no te preocupes. Después de todo soy tu amiga ¿No? No soy experta en amistades pero creo que se supone que tienen que estar para esto- bromeó un poco tratando de hacer sonreír a Ruby. El imbécil de su novio tenía suerte de no estar ahí, si lo veía iba a dejarle claras unas cuantas cosas- ¿Puedo saber que ha pasado?