Capítulo 46 - Principio del fin

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Ángela Brown

Carter, mi pelirrojo caliente como el infierno.
Estoy completamente segura que va a ser mi perdición.

Me escanea con la mirada invadiendo mi espacio en el cuarto de baño.

—Voy a salir un momento al balcón, así tú puedes terminar de quitarte la piel de zombie— comenta bromista quitando un poco de aguacate de mi cara.

Sale de su baño dejándome con la palabra en la boca. Aún no asimilo que haya llegado antes, aunque es obvio que esté aquí, después de todo es su departamento.

Vuelvo a lavarme la cara, esta vez asegurándome que no quede rastro de la mascarilla. Me peino un poco con los dedos y me pongo un poco de humectante en los labios, tratando de lucir un poco más presentable. No es que no me haya visto desmaquillada y en pijama, pero a nadie le gusta que la agarren desprevenida.

Conservo mi playera holgada que uso para estar cómoda y cambio mi pijama afelpada de pandas por algo más presentable como una licra negra. Salgo y me dirijo hacia donde está agarrando aire varias veces.

«¿Por qué rayos están tan nerviosa?»

Entonces veo la razón.

Carter está de espaldas fumando. Puedo distinguir su fornida espalda a través del suéter carmesí que trae puesto. Esa espalda que tanto me gusta tocar mientras estamos en la cama. Y su acolchado trasero se ve más redondo con ganas de darle unas buenas nalgadas.

«Brown, tranquilízate de una buena vez»

El humo del cigarro se funde con la fina niebla que envuelve el campus. El día se ve más melancólico de lo usual igual que mi novio, que no se ve molesto sino un poco nervioso. Y para que esté fumando algo grave tuvo que haber pasado en su ciudad.

«¿Debería preguntarle?»

—Me peleé con mi familia— menciona después de una larga calada al cigarro como si hubiera leído mis pensamientos.

—Debiste quedarte para solucionar las cosas— las palabras salen solas de mi boca e inmediatamente me arrepiento.

En nuestra última conversación me dijo controladora y con mis comentarios es justo lo que demuestro.

—Prefiero pasar mi tiempo contigo— responde con una sonrisa y me sorprendo, no espere que la conversación fuera a tomar este curso. —¿Tienes hambre? Puedo prepararnos algo de comer.

Asiento ante su pregunta viéndolo apagar el cigarro para tirarlo al suelo en vez de ponerlo en el cenicero que tiene en la terraza.

Volvemos a la cocina y yo me siento en la barra viendo como busca cosas en el refrigerador.
Se supone que soy madura, pero aquí estoy preguntándome por qué no me ha reclamado sobre nuestra última pelea mientras él pica verdura tan tranquilo.

Mi teléfono vibra con un mensaje de Tamara y quito la vista de mi sensual novio para ver las fotos que envío mi amiga. La mayoría son de Sebastian y ella abrazados y de la familia paterna de mi amiga.

—Es de mala educación contestar mensajes cuando estás en compañía de alguien más— escucho la seductora voz de Carter en mi oído.

«¿En qué momento salió de la cocina?»

—Solo estaba viendo las fotos de mando Tamara de Inglaterra— el pelirrojo vuelve a la cocina un poco irritado— solo te molestas por tú no tienes un celular con el cual distráete.

—Hablando de eso, fue un malentendido, ya lo recuperé— menciona sin voltear a verme.

Algo con su tono de voz me indica que está mintiendo o que las cosas fueron más graves de lo que quiere hacerme ver. Me levanto dispuesta a ayudarle y descubrir que oculta. «¿Desde cuándo volvió el Carter misterioso?»

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⏰ Última actualización: Jan 17, 2023 ⏰

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