Corona de Sangre [RookVil TWISTED WONDERLAND]

Cazador cazado

Capítulo 6: Cazador cazado

Neige no había regresado del viaje a la playa junto a Fleur y ya era bastante tarde.

Vil había cenado a solas ya que no encontró necesario invitar a Rook una segunda vez. De hecho, aquel día no se vieron durante todo el día, debido a la ocupada jornada de Vil.

Vil había bajado al patio de pozo algo preocupado: si Neige no regresaba, ¿Eso significaba que pronto se iría por más días?

De todas formas, si Neige lograba formalizar algo con la chica, no tendría por qué irse del palacio, si algo le pasaba a Vil, él era el siguiente en la línea heredera, al menos que Vil tuviese hijos.

Hacía algo de frío y la noche había caído hace al menos una hora. Vil llevaba el cabello suelto y no portaba la usual corona. En la tarde se decidió por soltar sus cabellos, ya que el dolor de cabeza le hacía sentir mareado y creía que tener el cabello atado le hacía doler más.

Soltó un pequeño suspiro viendo a lo lejos, la entrada del palacio: un enorme camino delineado con setos recortados, jardines de flores hermosas, fuentes de aguas y algunos asientos y árboles colocados estratégicamente. El portón de entrada se hallaba cerrado y los centinelas no parecían necesitar abrirlo.

Vil se cruzó de brazos y se los acarició, intentando que el roce le diera algo de calor. Ya era tarde, seguro Neige había decidido quedarse en la casona de la playa y no volver hasta el siguiente día, pero ¿Por qué no avisó antes de partir?. Neige había viajado con centinelas y guardias reales, nada le pasaría.

Decidió que la espera sería en vano y resignado iba a regresar al palacio, cuando vio a Rook apoyado en el pozo.

El cazador estaba cruzado de brazos observando a Vil. La brisa despeinó levemente su melena bajo el sombrero y algunas hebras rubias cruzaron sus ojos, dejando solo a la vista, la sonrisa misteriosa. Vil apartó la vista una vez más hacia la entrada y simplemente decidió girar la cabeza hacia Rook.

—Buenas noches—saludó Vil, caminando hacia el pozo—, ¿Por qué siempre sabes donde encontrarme? Comenzaré a creer que estás vigilándome.

—Y si fuese cierto, ¿Es un problema contemplar tu belleza y ser esclavo de tus pasos?

Vil guardó silencio. Había algo perturbador en esas palabras, pero por alguna razón, quiso enfocarse más en el hecho de que Rook le había halagado. A pesar de estar consciente del cumplido, no dijo nada respecto a él.

Decidió iniciar una conversación.

—Al parecer Neige no regresará de su viaje hoy. Cuando vuelva le dejaré en claro que no puede hacer ese tipo de cosas. Él es miembro de la familia real y como tal debe mantener un orden en su rutina y agenda.

—¿Te preocupa quedarte solo, Vil?—Rook relajó la postura y le señaló su lado para que Vil fuera hacia ese lugar—, veo que el lazo que tienes con el Príncipe Neige es bastante fuerte.

—No me quedaré solo y si Neige tuviese que irse a algún reino vecino, podría vivir sin él—Vil no aceptó la invitación de Rook y se quedó a una distancia prudente.

—Rose Rouge, incluso las flores más hermosas del mundo necesitan espectadores. A veces no es suficiente estar conscientes de su propia belleza.

—Conmigo mismo es suficiente.

Rook soltó una risa escueta, negando con cierto relajo.

—Tu corazón está rodeado de espinas al parecer, ¿Cómo llegar a él si sigues permitiendo que tu jardín te oculte?