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Doyoung se sentía lleno de Jaehyun.

No importaba cuanto tiempo pasara, él aun podía sentir contra su cuerpo o su aliento cálido sobre sus labios. Durante la noche, Doyoung no se atrevió a cruzar miradas con ese hombre y se convirtió en la sombra de Jungwoo, él sabia que estaba actuando como un adolescente asustadizo que acababa de recibir su primer beso, pero cada vez que ese hombre estaba cerca de él, su cuerpo vibraba por el deseo de volver a repetir.

Doyoung fijo su mirada en otro punto, Haechan estaba al lado de Lucas que había sido empujado a otro lugar por Doyoung, ese hombre mantenía la mirada fija en Mark con esa intensidad en sus ojos cuyo pedido silencioso de atención cada vez se hacia más evidente. Por otro lado, Johnny se mantenía ligeramente inclinado hacia Jaehyun que tenía la espalda rígida con la cuarto copa entre sus manos.

Mark no hizo ni una sola pregunta sobre ellos ni la extraña cercanía que existía en Johnny y Jaehyun, él no era del tipo de persona que metía su nariz en donde no era llamada, Doyoung estaba agradecido con eso.

A la media noche, Jungwoo era arrastrado por el pasillo por Lucas y Doyoung, Haechan iba por delante con paso irregular. El grupo no paraba de armar un gran escandalo por los tropiezos de dos de ellos, él sabia que los pocos vecinos de ese lugar los estaban odian profundamente pero no podía hacer nada para acallar los chillidos de Jungwoo y Haechan.

Lucas parecía agobiado, cargando la mayor parte del peso del chico.

Debian darse prisa, un auto los estaba esperando abajo.

Fue un camino largo, pero cuando llegaron a su destino, Haechan se había quedado dormir contra Doyoung y no hubo manera en despertar, ese hombre se había emocionado demasiado con la bebida y perdió miserablemente, al menos, parecía plenamente feliz al escuchar la risa de Mark cada vez que soltaba algo sin pensarlo mucho. Doyoung deseaba empujarlo al otro lado, pero Lucas estaba en su misma condición, acurrucado a su lado con el cansancio dibujado en el rostro.

Jungwoo dio lucha cuando intentaron meterlo en el asiento delantero, se había negado rotundamente ir en la parte de atrás. Doyoung no era una persona nocturna, por eso, siempre era una sorpresa ver las calles tan vacías y solitarias, solo con algunas personas que regresaban a sus hogares.

Después de unos minutos, solo faltaba un par de cuadras para llegar a su destino y Haechan seguía roncando, sin responder. Al llegar a la puerta principal, Doyoung entrego un par de billetes antes de abrir la puerta, para ese punto, Lucas se encontraba despierto con un Jungwoo entre sus brazos.

No tuvo otra opción, Doyoung se llevo a Haechan entre los suyos, no era tan pesado como pensaba, pero si era demasiado largo, sus extremidades caían descuidadamente a cada lado al igual que su cabeza, en cambio, Jungwoo iba acurrucado contra el pecho de Lucas.

Entre los dos, el sonido de los ronquidos era resonante. Lucas y él, se reía de ese par de desastres. De alguna manera, Doyoung se sintió bien al estar entre ellos, aunque no era un momento memorable, solamente estaban esperaban que el ascensor abriera sus puertas, él la recordaría y torturaría a ese par por el resto de sus días.

Y las puertas metálicas se abrieron, era momento de subir.

...

El sol pegaba directamente a su rostro, Doyoung había olvidado en cerrar las cortinas la noche anterior, estirando los brazos hasta que se encontró con el otro chico que seguía acurrucado entre sus sabanas, él no había tenido corazón de dejarlo en el sofá.

Ese mueble no era un gran lugar para pasar la noche. Para su sorpresa, Haechan no se había movido en toda la noche. Doyoung se acerco para comprobar que seguía vivo y cálido, colocando los dedos sobre su pulso constante y aun caliente, Haechan se quejo antes de girar hacia el otro lado, quitándole parte de las mantas.

In my burning heart [JaeDo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora