Esa era la tercera vez que enviaban esa carta a su nombre, Doyoun estaba seguro que las dos anteriores se encontraban perdidas en ese departamento. Solo tenía tres días para pagar esa deuda que con el tiempo se había multiplicado, intento hablar con el banco, pero nadie sabia como ayudarlo, excepto que cancelara o esa propiedad pasaría a las manos del banco y él seguiría en rojo.
Doyoung deseaba que esa mañana fuera una simple pesadilla, que seguía durmiendo junto a Jungwoo en aquella cada, pero todo se sentía demasiado real a su alrededor. La parte posterior de su cabeza palpitaba y una fina capa de sudor cubría la palma de sus manos. Él no noto el paso del tiempo, en cada parpadeo, el sol caía más y el atardecer comenzaba a cubrir a la cuidad entera.
Doyoung sentía que la mañana solo había sido hace unos minutos atrás, que no tenia sentido que el tiempo pasara tan rápido, nada de eso tenía sentido. Jungwoo mantenía el computador encima de sus piernas, con el teléfono aun pegado a su oreja derecha, Doyoung no podía entender que estaba diciendo, solo escuchaba murmullos demasiado lejanos.
No supo cuanto tiempo estuvo parado pero sus piernas comenzaban a doler por el esfuerzo, su cuerpo entero dolía. Doyoung estaba seguro que había sido una mala persona, durante su matrimonio, para ser merecedor de todo ese dolor, que no había sido una buena pareja y estaba tan centrado en si mismo que no se dio cuenta a la víbora que tenia dentro de casa.
Una víbora que lo inyectaba de su veneno, lo estaba matando lentamente.
Él se acerco hacia su amigo, sentándose a su lado y volvió a ver a través de la ventana, el cielo oscuro al igual que esa habitación que solo era iluminada por la pantalla del computador de Jungwoo. Doyoung se sentía inútil a su lado, deseaba ayudarlo, pero no sabia por donde empezar o si tenia fuerzas para mantener ese ritmo, estaba terriblemente cansado.
No se había sentido de esa manera desde hace un tiempo.
Jungwoo seguía sosteniendo su teléfono, conversando con personas que aun no eran conocidas para Doyoung, ese hombre había dicho que no se preocupara. Todo se sentía como un terrible chiste o quizás, su cabeza aun no procesaba correctamente la situación que estaba viviendo.
-Listo- Jungwoo murmuro, se veía agotado.
- ¿Qué es lo que está listo? - pregunto Doyoung.
-Ya hay un comprador.
Doyoung despertó, irguiéndose en el sofá.
- ¿Qué? ¿Cómo?
-Eso es el punto a favor de conocer a muchas personas con dinero y tener una cara linda, algunas personas están dispuesta hacer lo que pidas a cambio de un poco de atención- dijo Jungwoo con una sonrisa-
-Te estas aprovechando de las personas, Jungwoo- dijo Doyoung- eso es muy malo. Por favo-...
-Todo el tiempo- interrumpió Jungwoo- las personas se están aprovechando de otras personas para conseguir algo a su favor, ¿Qué tiene de malo? ¿Qué tiene de malo aprovecharse de una persona? Además, no estamos aprovechando de nadie, solo le ofrecí la oportunidad de comprar un departamento y él acepto, no lo engañe ni le mentí.
Doyoung bajo la mirada, pero no por mucho tiempo, Jungwoo tomo su barbilla para elevar su rostro.
-Te ofrecí mi ayuda, me costo mucho encontrar a esa persona y estoy completamente hambriento- murmuro Jungwoo- hice todo esto por ti, pero si quieres que rechace al comprador, lo hare.
Doyoung lo pensó, pensó en la cantidad de ceros que tenia esa deuda y sabía que no podía darse el lujo de rechazarlo, además, no sabia de donde conseguiría otro comprador. El concepto de querer vender ese lugar resultaba extraño para la cabeza de Doyoung, sentía que una parte de él, aún vivía en ese lugar, se quedo atrapado en esas paredes.

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In my burning heart [JaeDo]
FanfictionDespués de cinco años de matrimonio, Johnny acaba de pedir el divorcio a Doyoung. Él ya no lo ama. Él ya no lo desea. Él ya no lo necesita. Él encontró todo lo que necesita en su asistente personal. Johnny se llevo cada una de sus pertenencias de...