Salimos del instituto era el segundo día que llevábamos ignorando a los chicos y ellos no parecían estar muy felices por eso.
Y Emeric solo me miraba y la pesada de Gabrielle lo seguía a todas partes.
—¿Y qué haces aquí? —dijo Lilian sin mirar a Simon.
—¿Puedes dejar de comportarte como una niña? —dijo Simon que no se veía contento— las tres están actuando extraño.
—¿Por algo será? —hablo Marion que también había ignorado a Alban.
Antes que pudieran seguir discutiendo una morocha de cabellos largos y dientes con carillas apareció en frente de nuestra mesa.
Pero para mi sorpresa un Emeric también se acercó.
—¡Tu tuviste algo que ver! —exclamo Gabrielle señalándome.
—¿Puedes dejar de hacer tanto escandalo? —hablo Emeric mirando seriamente a Gabrielle.
Mi cara de no entender era demasiado obvia pero tampoco iba a soportar ver a esa tipa y a Emeric.
Me puse de pie con el propósito de salir de allí.
—¡Estoy segura que ella tuvo algo que ver! —volvió a gritar llamando la atención de muchos.
—¿De qué hablas? —fruncí el ceño.
—No aceptaron a mi padre —dijo con dramatismo.
Por un lado quería reírme pero por otro lado me causaba molestia que hiciera ese escándalo.
—¿Y piensas que yo tuve la culpa? —dije sonriendo y cruzándome de brazos.
—¡Claro que si! —grito con su horrenda voz.
—Nos vemos en la empresa Emeric —mire seriamente a Emeric.
—¡Oh Emeric no permitas que me trate de esa manera! —y seguido de eso se abalanzo a sus brazos.
Y fue ahí donde volvió a tocar mi corazon. Todo era injusto y eso era lo que más me molestaba.
—Eres detestable —dijo Marion pasando por el lado de Gaby.
—Hombres... —acompaño Lilian.
Me di la vuelta ignorando todas las miradas. Mi vida se estaba convirtiendo en un maldito drama y yo era la protagonista que siempre terminaba lastimada.
Salimos del instituto encontrándonos con Bastien.
—Señoritas —saludo el con su sonrisa.
—¿Tarde de helados? —sugirió Marion que seguía seria por lo que acababa de suceder.
Y asi fue como nos dirigimos hacia el gran parque con nuestros helados.
—Solo quiero olvidarme de todos por un momento —dijo Marion tomando haciendo en el columpio.
—Simon es un imbécil... —dijo Lilian apoyándose sobre parte de la estructura que sostenía el columpio.
—¡Estos dramas de niños ricos me encanta! —comento Bastien con gracia.
—Es mi maldito futuro Bastien —dije sentándome en el otro columpio.
Su cara cambio pero su sonrisa seguía allí.
—Deberías ir a nuestro instituto Bastien —Lilian lo miro sonriente— eres el único sincero. ¿No eres gay?
—No me hagas reír Lilian ¿Tan mal me queda el cabello? —dijo el entre risas— se escuchar a las personas.

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Confía en Mí
RomanceDos hijos de unos importantes empresarios están obligados a casarse, pero Elise Fontaine no está dispuesta a casarse con alguien que no se lleva bien, pero hará lo posible para poder acercarse a Emeric Fortier. ¿El lograra enamorase de ella?