Capítulo 24:

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Shinees POV:

- ¿De qué estás hablando? – pregunté totalmente perpleja ante su comentario.

-Sí, es hora de que busquemos la forma de que subas al trono, querida – parpadeé con rapidez, no podía creerlo.

-Shay, amiga – Lili suspiró – A veces pienso que Ben tiene razón, es hora.

Espero que no estén insinuando lo que creo que están insinuando.

-No le haré daño a mis padres si es lo que quieren decir – Ben iba a volver a hablar, pero no lo dejé dejándolo con la palabra en la boca – Ni voy a forzarlos a bajar del trono – lo señalé con mi dedo índice con recelo.

-Shinees, tú podrías hacerlo de una forma más pacífica, pero si el pueblo en algún momento se rebela, no podrás hacer nada para salvarlos de la furia de ellos – solté el aire que no sabía que retenía. Ben tenía un punto, pero no haría nada de eso, mis padres bajarían del trono hasta que fuera el momento adecuado para mi coronación.

Además de eso, por mucho que quisiera erradicar desde ya todo lo que hacía sufrir al pueblo, no me sentía lista para algo tan grande como ser la dirigente de un reino, todavía me faltaba preparación, no sabía mucho de lo que se hacía en el trono, sabía muy poco y si tenía conocimiento de ello era porque mi padre me había enseñado solo lo superficial, no sabía lo que me vendría y temía hacerlo mal o empeorar todo.

Por algo era que había creado el centro de ayuda para los costa meinitas, para aportar algo en lo que me preparaba para ascender a mi puesto por herencia, si iba a ser una Reina quería hacerlo bien, no quería ser como ellos y claramente eso no se lograba con lo poco que conocía, no quería ser una mediocre en el trono.

-No, no lo haré...

-Niees, piensa...

- ¡No Ben! – exclamé molesta – No haré tal cosa – sentencié – Primero, no bajaré a mis padres del trono, a pesar de todo, los amo – y era verdad, incluso ante todo lo que estaban haciendo contra mí, no podía odiarlos ni dejarlos de amar – Y no quiero romper más a mi familia de lo que ya está – todo lo que pasaba nos había roto de una u otra manera desde que yo supe de cómo era gobernada Costa Mein, era culpa de mamá y papá y aun así mi amor hacia ellos era mayor – Y segundo, no estoy preparada para gobernar a Costa Mein, estoy aprendiendo y me falta muchísimo más conocimiento de cómo llevar a cabo los deberes reales, de lo que tú te imaginas – miré a mi amiga – Y Lili lo sabe mejor que nadie.

Él volteó a verla y mi amiga solo pudo hacer un gesto con sus labios que quería decir como "tiene razón".

-Niees, sé que para ti es importante hacer esto de manera correcta, pero tus padres están destruyendo al pueblo, deberías visitar el campo de siembra, ir a los barrios menos beneficiados, tus padres están dejando que todo se vaya deteriorando y muriendo cada día que pasa.

Caminé hasta mi balcón, frustrada.

-Ellos no te están formando bien porque ni siquiera saben gobernar bien – añadió – Por mucho que les tenga que servir ahora, tú siempre serás mi Reina – volteé a verlo – Siempre te seré leal a ti y si hice lo que tenía que hacer en la misión fue por ti, tú me lo pediste y yo estaba decidido a volverme el nuevo general de la guardia para servirte a ti cuando subieras al trono.

-Ben... no solo por eso te lo pedí, también lo hice por ti – murmuré audiblemente – Quería que tú también obtuvieras el puesto que te mereces, cuando te dije que quería que fueras mi jefe de la guardia era cierto, sí, pero sobre todo quería que tuvieras un ascenso bien merecido y nadie podía hacerlo mejor que tú, de eso estoy segura, pero no puedo, todavía no estoy preparada y no crearé una guerra en mi propia casa.

El Corazón de Una Princesa (Libro 1) COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora