Nuestra historia. Armando y Betty.

Capítulo 25

Pov Beatriz.

Los días siguientes pasaron demasiado rápido, inmersos en el día a día de la empresa, después de realizada la transición de la presidencia y los cambios de oficina, venían por delante días de mayor calma antes de comenzar a pensar en la próxima colección.

Por suerte Doña Marcela después de todo lo ocurrido había optado por evitarnos, a pesar de supuestamente haber aceptado nuestra relación, inevitablemente todavía le dolía, a mi también me afectaba saber que ella sufría por mi culpa, pero por otro lado Armando se empeñaba en hacerme ver que nuestra relación no se merecía cambiar solo por evitar hacer sentir mal a los demás, demasiado habíamos sufrido durante tanto tiempo por estar bajo el yugo de la empresa y tantas otras cosas que no tenían nada que ver con el amor que nos teníamos.

Restan un par de días para viajar a Cartagena al cumpleaños de Cata, pero todavía no le he avisado a mi papá, irremediablemente tengo que decirle que viajo con Armando, prefiero que se entere por mí y no por alguien más, creo que es importante decírselo también porque cada día que pasa se me hace más difícil dormir alejada de él, quisiera tener la libertad de decirle que me quedo a dormir en su apartamento en vez de mentirle diciéndole que me quedo con alguna de las muchachas.

Decidí que debo hacerlo hoy, es miércoles y viajamos el sábado por la mañana. Aunque Armando quería salir a cenar lo convencí para que me dejara en casa temprano después de salir de trabajar.

-Hola mamá, hola papá- digo mientras entro al comedor.

-Hola mijita que bueno que llegó temprano así nos acompaña a cenar.

-Al fin la suelta ese doctorcito- ay papá que difícil va a ser esto.

-Se llama Armando papá, y si no llego temprano a casa es porque tenemos mucho trabajo o porque queremos salir a cenar y disfrutar un tiempo juntos.

-Ya, cenemos en paz- al fin mi mamá corta la tensión entre nosotros.

La cena transcurrió en calma, pero la noticia que estaba por dar desataría el verdadero caos.

-Quería comentarles que le fin de semana voy a viajar a Cartagena- suelto así sin más.

-Que lindo mijita al mar otra vez.

-Si mamá, es el cumpleaños de Doña Catalina y le están organizando un cumpleaños sorpresa, no puedo faltar, ella ha hecho mucho por mí.

-¿Por cuánto se va mamita?- mi papá con cada palabra que digo endurece más su expresión.

-Viajamos el sabado, él domingo estamos de vuelta por aquí.

-¿Viajamos? ¿Con quien va si se puede saber? - parece que lo único que le importa a mi padre es con quien hago o dejo de hacer cada cosa.

-Con Armando papá, él también es amigo de Cata, nos invitaron a los dos.

-Ha no, eso no, demasiado le permito que salga hasta quien sabe que hora con ese señor y como no queda conforme también sale con sus amigas, ahora no va salir con que se va a ir todo un fin de semana con él, para hacer quien sabe que cosas- reclama mi papá casi gritando.

- Papá ¿acaso no hablamos de este tema ya? ¿No quedamos en que usted iba a aceptar que soy adulta y que tomo mis propias decisiones?

- Pero jamás voy a aceptar que ande haciendo cosas indecentes por ahí.

-Y usted que sabe lo que yo voy a hacer, ¿acaso usted piensa que no sé cómo comportarme?

-¿Pero que va a pensar la gente si usted se va con ese tipo sola?- camina por el comedor como lobo enjaulado.