Made In Greece || Derek Hale

12. Cazadores

A mediados de la mañana siguiente, Meghara impartía la clase de arte a los alumnos de primer año, enseñándoles la técnica del realismo. Con las instrucciones en el pizarrón, todos los jóvenes comenzaron con sus dibujos, siendo asistidos por la griega de vez en cuando.

Con materiales simples como los lápices de colores o marcadores, los chicos intentaban captar el movimiento y la forma de una copa de piña colada.

- Profesora, una pregunta ¿No tiene usted carbonilla para dibujo? - una temblorosa voz inundó el murmullo general de la clase - Es que... me es más cómodo para hacer el pie de la copa - pidió una alumna del fondo. La alfa se giró hacia la joven, era una chica castaña con ojos celestes y piel pálida. Particularmente introvertida pero que había tenido la valentía necesaria para cruzar miradas con el beta de McCall en días anteriores.

Porque sí, los chismes en la sala de profesores nunca acababan. Resulta que Galani no había sido la única en notar las miraditas o las indirectas para nada sutiles del joven beta Liam Dunbar hacia la simple humana, Valery Chase.

Valery era una alumna que siempre se había mantenido al margen de todas las situaciones, conviertiendola en la típica comelibros del salón. Aunque para Meghara no era así, ella veía que Valery tenía infinidades de talentos escondidos que poco a poco, saldrían a la luz.

Algo extrañada por el profesional pedido de la joven Chase, la loba se acercó a su mochila y sacó una caja de carbonilla para dibujo, minuciosamente protegida. Con una mirada curiosa en sus ojos, la profesora se acercó a la castaña hasta quedar junto a ella, quedando maravillada ante el retrato frente a sus ojos.

La joven Chase había logrado captar el movimiento, la técnica del claroscuro y la forma de la copa con tan sólo un lápiz y una goma. A ojos de profesionales como los de la loba, faltaban algunos detalles pequeños en el dibujo, más no esperó que Valery le pidiera la carbonilla para hacerlos.

La joven parecía ser una completa profesional y había captado la atención de la alfa.

- ¿Hace cuanto dibujas? - le preguntó a su alumna, sin quitar la mirada del maravilloso dibujo.

Valerie levantó la vista de la hoja y observó a la profesora con timidez - Mi madre era dibujante, ella falleció hace años en un accidente de tránsito junto a mi hermano mayor y ahora solo somos... mi padre y yo.

Meghara notó como las pulsaciones de la humana se aceleraron ante la mención de su progenitor, más decidió ignorarlo por el momento. Estaba segura de que no sería un tema muy lindo de abordar.

La rubia asintió y siguió con su recorrido por los bancos, pensando en la situación de la joven. Había olido el temor y sentido como las pulsaciones de la joven se aceleraban al mencionar a su padre, por lo que intuyó que no tenían una relación precisamente buena. O, por otro lado, habían demasiadas emociones relacionadas a él que eran difíciles de procesar.

En cuanto sonó el timbre de esa clase, la loba anotó los deberes en el pizarrón y salió del aula, guiándose por su mapa mental hacia la siguiente clase. Sin embargo, cuando pasó frente a la puerta de entrada de la preparatoria, visualizó una camioneta azul que salía del estacionamiento a toda velocidad, cargando con ella un fuerte aroma a ser sobrenatural.

Derek.

¿Qué mierda hacía allí el lobo? La rubia frunció el ceño ante la imagen del vehículo alejándose a toda velocidad, más siguió camino hacia su clase, creando distintas teorías.

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Otra vez el bosque.

Meghara corría por su vida por todo el bosque, esquivando los disparos y las flechas que volaban en su dirección, bañadas en wolfsbane y muérdago.