DESPUÉS DE LA ESCUELA: EL MANUAL DE NED

LA FURIA DE LA TIERRA Y UN SALTO A LA FAMA

Moze despertó, algo somnolienta, pero con energía. Busco con la mirada a Ned en la habitación.

No estaba ahí.

Se levantó y salió en pijama rumbo a la cocina, tenía algo de sed.

Nunca se esperó encontrar a Ned con un mandil, y haciendo algún platillo.

-Buenos días Moze- saludó Ned al verla. Él estaba cocinando algo, y tenía una espátula en la mano.

-Hola, ¿Por qué te pusiste eso?- dijo Moze sin evitar poder esconder su risa. Señaló el mandil que llevaba consigo Ned.

-El mandil para hombre es bastante vergonzoso- respondió él, modelando su vestuario ante Moze -Pero muy cómodo- terminó.

Moze lo observó durante algunos segundos, después se sentó en la mesa y bebió un vaso de agua.

-Y con que nos va a sorprender el chef Neddy?- comentó ella sonriendo.

Ned acercó un plato con lo que parecía puré de papa. Moze sonrió y tomó una cuchara.

-Genial, hiciste puré de papa- dijo ella y tomó una probada.

-No, es sopa de fideos- masculló Ned.

Al momento Moze se quedó congelada, después escupió todo en el plato y se limpió tres veces la boca.

-Esto, es lo más asqueroso, que he comido- respondió Moze dando gestos de asco.

Ned río como tonto por unos minutos, hasta que se sentó junto a ella.

-Por algo no soy chef- pronunció y se rió de la cara de asco de su novia.

(Y también por algo, Moze lo lastimaría)

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Ese día, Moze quería hacer algo que llevaba tiempo planeando. Se lo dijo a su novio y él aceptó, pero algo nervioso.
Ella y Ned fueron a su ahora ex-escuela Polk.

Cuando llegaron, estaba completamente desierta, ni siquiera los estudiantes que iban a la escuela de verano se encontraban ahí.

-Adonde vamos?- Preguntó Ned viendo las grandes puertas, por dónde, miles de veces durante los últimos tres años, entró y salió de ahí.

Moze sabía que hacer, así que se dirigió, junto a Ned, a la parte trasera, dónde se encontraba la Gran Estatua de JAMES K. POLK

Él y Moze la observaron por algunos segundos.

Era de por lo menos tres metros de altura. Hecha cien por ciento de bronce.

-Lo haré yo- dijo y subió a la base de la estatua.

Ned estaba algo nervioso, si alguien los llegaba a pillar, estarían en Problemas por dañar propiedad de la escuela.

Pero a quién le importaba? Ya no estudiaban ahí.

-Hazlo, y hazlo rápido- comentó Ned vigilando.

-Tú deberías estar aquí haciendo esto, Tú Eres El Hombre!- gritó Moze indignada, pero divertida.

Le encantaba vencer a Ned siempre.

-Tú eres más fuerte que yo, y lo sabes Moze- inquirió Ned.

Y eso era una gran verdad.

Moze dió un suspiro y sacó la gran navaja que tenía para emergencias.