BORRADO DE LA FAZ DE LA TIERRA

136 17 2
                                    

A la mañana siguiente, Ned despertó bastante temprano para él. Demasiado temprano de hecho.

Volteó a ambos lados, aún era de noche, o por lo menos aún estaba oscuro. Moze se encontraba a su lado, en un muy profundo sueño, con su Hermosa pijama. No pudo evitar darle un beso en la nariz, le parecía simplemente enternecedora la imagen que veía.

Quitó la cobija de vaqueros que tenía y se levantó. Solo llevaba puesto el pantalón del pijama.

Recordó lo que había sucedido horas atrás, y se sintió invencible, como si pudiera escupir fuego o tuviera un superpoder.

<<Definitivamente fue la mejor noche de mi vida>>

De pronto, el sonido de un trueno lo sacó de sus pensamientos. Observó a través de la empañada ventana, que estaba lloviendo.

El sonido de las gotas de lluvia lo ponían muy nostálgico, como recordar cosas de su pasado, que desearía poder vivir de nuevo.

Sin que se lo propusiera, y sin aviso alguno, Ned comenzó a pensar en Cookie.

<<Oh Cookie, si aún estuvieras aquí, ¿Qué dirías cuando te contara lo que pasó con Moze y conmigo?>>

No sabía si dónde quiera que estuviese Cookie, lo escuchara, o si quiera pudiera recordarlo. ¿Cómo hubieran sido las cosas, desde la Graduación, si Cookie estuviera vivo?

No sabía con certeza la respuesta, lo que si supo fue que empezó a extrañarlo de nuevo.

<<No sabes cuánta falta me haces Cookie>>

                        ***

Salió de su habitación, sin despertar a Moze, y fue hasta la sala. Todo estaba silencioso, Incluso la calle, lo único que se escuchaba aquella noche, era la lluvia.

Se sentó en una silla cerca de la mesa. Se dió cuenta por el reloj de la pared, que eran las 4:39 AM, pero curiosamente no tenía sueño.

Ned no podía volver a dormir, a pesar de ser tan temprano, sentía que durmió al menos catorce horas.

Escuchó un sonido proveniente de la cocina, un sonido que no eran las gotas de lluvia, sino algo que cae al suelo.

Se levantó a prisa y fue hasta la cocina, al llegar, encontró un plato roto en el piso. Se extrañó de eso, ya que no tenía mascotas, y estaba casi seguro que no habían ratas.

-Neddy, ¿Qué haces a esta hora?-

Una voz gutural, tétrica y algo sofocada se hizo presente a sus espaldas. Ned volteó, algo temeroso.

Casi se desmaya al ver aquello.

Una figura oscura, de por lo menos dos metros de altura, con una bata negra y garras que sobresalían de los guantes que portaba. Tenía unos ojos brillantes, los cuáles lo veían con odio y perversidad, y sus dientes, eran tan afilados como un cuchillo de carnicero.

Ned se quedó estático, sin poder mover un músculo. La figura era demasiado física para ser un fantasma.

<<No, esto es otra cosa>>

Lo que lo hizo temer mucho más, fue que, justo en el momento que se volteó y vió a la "criatura", un olor nauseabundo, similar a la carne podrida o una alcantarilla abierta, inundó toda la estancia.

<<¿Qué Demonios es esto?>>

En ese momento, la criatura se lanzó contra Ned. Logró tirarlo al suelo e inmovilizarlo.

-Neddy, los niños malos se despiertan antes de tiempo-

El demonio atravesó a Ned, desde el estómago hasta la espalda, con sus garras demoníacas y ensangrentadas...


**********************



Ned despertó bruscamente del sueño. Se hallaba en su cama, junto a Moze, pero ya había amanecido. Dió un suspiro, y exhaló aliviado.

<<Menos mal, fue una pesadilla>>

Se puso de pie y se vistió en silencio. Moze aún no despertaba, y ya eran las 10:08 AM.

Una vez que estuvo listo, se acercó a su novia para despertarla.

-Moze, Moze, Mosely, despierta Moze- masculló Ned con voz infantil.

Moze despertó al poco tiempo. Ella tenía su pijama, solo que su camisa estaba algo arrugada y tenía una mancha pequeña color blanco.




-¡Hoy será un día grandioso!- Exclamó Ned lleno de positivismo.

(No sabía lo equivocado que estaba)

Tras lo ocurrido la noche anterior, Ned y Moze estaban mucho más relajados y tranquilos. Era como si de alguna forma, haberlo hecho sirvió como medio de liberación de todo el estrés y preocupación que tenían.

Moze estaba sentada frente al televisor, mientras Ned intentaba cocinar el desayuno.

-Y ¿Qué será lo que haremos hoy?- cuestionó Moze alegre mientras veía "Clarissa Lo Explica Todo" en el televisor.

Ned salió de la cocina y puso la mesa para desayunar. Había conseguido hacer (y sin quemarse) hot cakes, huevos con tocino y jugo de mango exprimido.

-Tengo una idea para hoy. Podríamos ir con Gordy y hacer algún juego, o reunirnos con los chicos de nuevo, o tal vez quedarnos en casa y fingir estar en un apocalipsis- Recitó Ned.

Resultaba obvio su alegría desbordante. Jennifer se puso de pie y fue a sentarse junto a Ned para desayunar.


                           ***

Sin que los chicos lo esperaran, a media comida alguien llamó a la puerta.

-Yo iré- dijo Ned cómo todo un caballero.

Se levantó y fue hasta la puerta. Antes de abrirla miró por el picaporte, y pudo notar que Lisa estaba del otro lado.

Abrió la puerta y se encontró con ella, estaba algo asustada y preocupada.

-¿Lisa, estás bien? ¿Sucede algo?- comentó Ned al verla.

Lisa pasó adentro, y se sentó en el sofá. Moze regresó a la sala con los otros dos.

-¿Lisa que tienes?- Preguntó Jennifer una vez que la vió.

Lisa inhaló profundamente su medicamento para las alergias, y se decidió a hablar.

-Cabeza de Coco está desaparecido- dijo en un hilo de voz.

Ned puso cara de preocupación y temor. Moze durante unos segundos no creyó lo que escuchaba, pero después se asustó.

-¿De qué estás hablando? ¿Cómo que Cabeza de Coco desapareció?-

Ned se sintió culpable.

-Nunca llegó a casa de sus padres, la última vez que lo vieron fue aquí, y Ustedes estaban con él- inquirió Lisa de forma acusadora.

-¿Lisa que demonios estás queriendo decir...?-

























Continuará...

DESPUÉS DE LA ESCUELA: EL MANUAL DE NED Donde viven las historias. Descúbrelo ahora