O2 ! nada bien

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Los gritos se hacían cada vez más fuertes y yo no sabía si debía seguir escuchando o huir a la casa de Jisung para pedirle un abrazo. Lo peor del caso es que ni siquiera me sentía con las ganas suficientes de salir de ella. Mi cuerpo se sentía pesado, mis ojos cansados y mi garganta ardía después de todo ese llanto mal gastado desde hace dos horas.

Dos malditas horas en las cuales mis padres no habían cerrado el hocico.

Dos malditas horas en las que se refirieron a mí persona como un error.

Dos malditas horas en donde me he sentido como una mierda.

Y lo soy. Pero eso todos lo sabían; los chicos de la escuela, las niñas odiosas que decían que todo era amor y rosas pero te criticaban por cualquier cosa y esas otras niñas que eran ignoradas por “no estar al nivel”. Incluso me era imposible creer que ese pensamiento ridículo siguiera siendo usado como forma de vida.

Pero ese no era el tema.

Estaba harto de esta situación, donde ellos se juraban amor eterno a la vista de todos, donde fingían que éramos una familia unida y feliz, pero a la hora de llegar a casa, eran rivales y me dejaban a un lado porque “soy lo suficientemente grande como para valerme por mi mismo".

A veces no entiendo como es que teniendo trabajos importantes y que tienen que ver con la salud, ellos sólo se preocupan por la salud física. Yo que estoy aquí día y noche escuchando cada una de sus estúpidas palabras, yo que estoy aquí día y noche creyendo que no valgo nada. Yo que estoy harto y que posiblemente tenga que seguir aguantando cada rechazo y muestra de amor barata de su parte.

Y sí, tal vez estarán mis otros amigos, ¿Pero de qué sirve que ellos me digan que soy lo mejor cuando ni siquiera puedo creerlo yo?

Sólo era un estúpido más creyendo que en algún momento todo iba a cambiar. Incluso era una estúpido cayendo en las garras del amor, haciendo que esto de mi vida sea aún más odiosa.

Golpeé la cama repetidas veces, ni siquiera la almohada en mis orejas había sido lo sufiente poderosa como para privilegiarme de no escuchar sus gritos.

Era una familia rota buscando quebrar más las cosas.

Tomé mi celular y busqué el contacto de Jisung, estuve así por unos minutos esperando una respuesta de su parte. Hasta que esa llamada perdida se convirtieron en seis.

Al momento obtuve su respuesta, no fue lo que esperaba, pero supongo que era lo mejor que podía obtener de su parte.

Conformismo barato.

han🔪:
estoy en una cita, por
favor no me molestes.
02:07 pm

después te cuento que tal
02:09 pm

¿noche de pijamada?
llevaré las galletas de crema
que tanto te gustan <3
02:09 pm

no olvides que te quiero
02:10 pm

ah, y te bañas.
Visto a las 02:12 pm.

Sonreí, pero esa sonrisa no tenía valor absoluto.

Han siempre tendría a alguien más en su vida. Siempre que él llegaba mis penas ya estaban en otro lado, porque tampoco le dejaba conocer la mayoría de ellas.

¿Para qué? ¿Para qué se sintiera indenticado y la conversación se enfocará en él? No, gracias.

Para él jamás seré tan importante como lo es él para mí. Pero no es su culpa, es la mía por ilusionarme con sus tontas palabras sin valor alguno.

Porque con un te quiero ya me tenía vuelto un estúpido.

Al poco rato Soonie apareció por la ventana de mi habitación. Esa gata panzona de pequeños ojos se acercó pidiendo cariñitos y fue lo que le di, porque es la única que siempre está para mí sin necesidad de que se lo pida.

— Sí algún día tú te vas no podría aguantar esto más. — Susurré ahogado, mi garganta no estaba siendo de mucha ayuda y quería golpear algo. Ella pareció entenderlo y restrego su cabecita en la palma de mi mano. Tan ella haciéndome saber que estará ahí siempre.

Sorbí mi nariz dejando que las últimas lágrimas rodaran por mis mejillas. Estúpidas lágrimas, estúpidos sentimientos y estúpido yo. Sobre todo yo.

𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒆𝒍 𝒄𝒉𝒊𝒄𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒋𝒂𝒎𝒂́𝒔 𝒎𝒆 𝒂𝒎𝒐́ ⎯  minsung / banghoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora