Capítulo 28

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Perdón por errores ortográficos.

Pov Emily.

Dos semanas después de mi segundo intento de escape, como predije la Uac no logro encontrarme, escuche a Ian decir que ni siquiera encontraron la casa que tiene el Florida. Me decepcionan.

Ian sigue persistiendo aún más sobre tener otro hijo. Y esa percistencia me lleva al límite. Estoy a lista para acabar con la vida del bastardo de Ian Doyle esta noche.

Pará no levantar sospechas hago todo lo que comúnmente haria en un día normal. A excepción del cuchillo de carne que tomó prestado de la cocina. Esto podria servir mas tarde.

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Noche (mismo dia)

Empiezo a alistarme para dormir, ya acosté a don gruñón, hoy estuvo enojado todo el día, el pobre contrajo una gripe. Por suerte ya esta dormido. Como todas las noches desde los ultimos casi dieciséis meses Ian ingreso a la habitacion a las 10:00 pm.

Pero para  mi desconcierto él tiene  una expresion de ira, mi estómago se revuelve de pensar que descubrió lo que voy a hacer.

—¿Qué sucede? —Pregunto al ver que solo se quedo apoyado en el arco de la puerta. Ian suelta  una risa amarga y sin rastros de humor.

—¿Enserio eres tan cinica , como para preguntar que sucede? Sabes muy bien que sucede amor.

— No, no lo se. ¡Por eso estoy preguntando!, Ian si quieres decir algo dilo y dejate de estos absurdos juegos de— no pudo terminar la oracion cuando Ian me empuja. Me controlo, y dejo que Lauren se haga cargo por el momento, la última vez no termino bien por culpa de Emily.

—¿Enserio creiste que no me iba a dar cuenta perra estúpida? —susurra Ian en mi oído.

—Pero ¿de que hablas? —le pregunto fingiendo inocencia. Su furia aumenta al ver que me hago la estúpida.

—Deja esa actitud, tu estúpida negación me harta. A otro perro con ese hueso Emily.

No se de que hablas Ian—Sigo aferrándome a la negación —Pero por favor te suplico que le bajes a tu tono de voz, ya que nuestro hijo  esta dormido en la otra habitación « y no estoy sorda para que me grites Idiota»  el tiene un resfriado Ian, me costó dormirlo. Y si me disculpas tengo que ir a ver si esta bien—le digo mientras intento irme  ya que mi plan no funcionará, esta enojado y estará pendiente de mis movimientos.

Llevo varios pasos cuando me sejuta la mano. —Tu no me das ordenes porque aqui yo soy quien manda, asi te guste o no.

—¡¿Dónde esta?!¡ ¿Dónde esta?!! —me grita Ian.

—¿En dónde esta qué? —le pregunto con inocencia.

—El maldito cuchillo que te robaste de la cocina perra, no trates de negarlo te vi tomarlo. ¡¿Donde esta? !! Enserio eres tan malditamente estupida para creer que no me daria cuenta que te robaste mi cuchillo Emily. ¡Me crees tan tonto!

Grita y yo no veo venir el golpe que me da con su mano en la cara, toco mi labio y veo la sangre. Todo mis ganas de pasividad se van. Estoy harta de que me golpe. Estoy harta de que me grite. Miro el suelo y trato de relajarme, pero el pitido en mis oídos y él gritando me llevan al límite.

—Que planeabas hacer ¿clavarmelo en el corazón? ¿Eso es lo qué ibas a hacer ? —Brama Ian.

—Durante dieciséis  meses te he dado todo, haz tenido donde dormir, haz comido bien, te he cuidado y he hecho todo por ti y asi me pagas, primero intentando escapar de mi, y ahora intentando matarme.

-¡Yo no te pedi que hicieras eso! Yo no quiero vivir contigo. Estoy harta de ti, Estoy harta de tus arranques violentos, de tus humillación, de que me trates como si no valiera nada y luego me trates como si fuera un diamante. Quiero irme a mi casa, quiero volver a mi vida. —confieso entre lágrimas.

Se ríe sueltamente —Nunca te vas a librar de mi, vivirás conmigo hasta que te mueras, tu eres mía, y esta es mi casa, así que esta casa es tu hogar.

—¡No soy tuya Ian!—Soy un ser humano con sentimientos, no una maldita propiedad a lo que puedes llamar tuya.—le digo llorando. A pesar de todo escucho a mi bebé llorar y siento la necesidad de ir con él. Solo el me da paz. Lo necesito.

Trato de irme, pero no tuve tiempo dado que Ian se me  vino encima. Ambos caemos  al suelo del lado de la cama. Mi cabeza golpea duramente contra la madera. Ian se pone a orcajadas sobre mi y  toma mi cuello, por un momento deseo no pelear y dejar que me mate, qué todo acabe de una vez por todas, pero el llanto de Aiden me da fuerzas, el merece vivir con alguien que verdaderamente lo ame. El bloqueo de aire es demasiado, pero eso no me detiene, con toda las  fuerza que me quedan, tomo el cuchillo que escondi debajo de la cama y se lo clavo a Ian en el muslo.

Me lo quito de encima y tengo que  recomponerme lo más rápido posible para volver a apuñalarlo y esta vez el golpe  tiene que ser mortal. Decirlo es más fácil que hacerlo, la visión borrosa, el dolor en mi cuello y el ruido del llorar de mi bebé, hacen qué recomponerme sea difícil. Mis ojos al fin  enfocan y levanto el cuchillo.

Pero para mi  desgracia cuando estoy por apuñalarlo, Ian levanta su arma y la pone entre mis dos cejas, mi apuñalada no detubo a Ian por mucho tiempo. Esta sangrando, pero no lo suficiente para incapacitarlo.

—Inis dom cúis mhaith gan tú a mharú. —exclama en su idioma madre.

NO SOY TUYA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora