Perdonén los errores ortografícos.
Bang, Bang resonó en todo el bosque.
Pov Emily.
Siento mi vida pasar ante mis ojos, mis recuerdos más preciados recorren mi mente sin piedad. Veo los momentos más falices de mi infancia, veo recuerdos en los que jugaba con mi papá antes de que nuestra relación se arruinara, mi adolescencia y adultez cruzan por mi mente como si fuera una película, en mi opinión era una película muy bonita hasta que todo se torno negro o mejor dicho real.
La conmoción del momento pasó y es ahí cuando me doy cuenta de que no estoy muerta y ni siquiera me han disparado, el muy perro miserable me ha engañado. Logró reincorporarme lentamente.
Aun sentada en la tierra lo miro. Me esta mirando con su maldita risa de insuficiencia, burla y descaro .
—¿Pensastes que te había disparado amor? —Pregunta aun burlesco.
—Si, si lo creí—contestó con apenas un hilo de voz. Mientras me pongo de pie temblorosa.
—Pues no amor, esto solo es una advertencia de lo que te va suceder si vuelves hacer algo tan estúpido como intentar huir de mi . Y además aun tienes un trabajo que hacer. —culmina desviando su mirada de mis ojos a mi pecho.
— Si el trabajo es dejar que me folles otra vez, dejame decirte que te puedes ir al infierno, y si tanto te hace falta una follada hay personas que lo hacen por dinero. —le digo.
Se ríe —Para que pagarle a una prostituta, si tengo a úna prepago exclusiva a mi disposición.
—¿Ya no soy tu novia Ian? ¿ahora soy tu perra? —le pregunto.
—Eras mi novia, ahora no lo eres, ahora eres mi perra , ya que al parecer así es como te gustan qué te traten.
—Te surtí te ropa, y te invite a desayunar conmigo, cuando facilmmete puede encadenarte al sótano y alimentarte una vez al día.— suelta como si fuera lo más normal del mundo.
No me gusta como suena eso así que mejor cambio el tema —¿Qué trabajó?— Preguntó con prisa antes de que este Infeliz cambie de opinión y me ate a un sucio sótano.
Me mira con aprecio—Hace un momento tenias razón en parte, solo que no en todo, no solo quiero follar contigo, quiero un bebé Emily.—dice y por un momento creo que esta bromeando, pero al ver su seriedad se que no es así. La idea de estar atada a un sucio sótano no suena mal después de lo que acaba de decir.
—Cómo dice el dicho amor. Ojo por ojo, diente por diente. En este caso, niño por niño, libertad por libertad.
—Tu me quitaste a mi hijo y mi libertad , así que me vas a dar otro niño y perderás tu libertad amor.
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NO SOY TUYA
Hayran KurguLas situaciones de la vida nos obligan a convertirnos en quienes nunca quisimos ser. A veces la sumisión y la violencia es con lo que tenemos que lidear para sobrevivir, aunque eso destruya nuestra alma y mente con lentitud. Universo alternativo al...