Paseo

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Exactamente en un mes es mi cumpleaños, y si le sumamos 4 días más, es la boda de Francisco. No me gustaba ese tema, por lo que disfrutaba lo poco que me quedaba con mi amigo, alias, mi amor imposible. Desde que me enfermé, él ha ido todos los días a mi casa sin faltar, como antes. De ahí, la mayoría de veces íbamos al bosque, al lugar donde nos conocimos, y ahí repetimos la misma rutina que hacíamos en mi cuarto: hablábamos y nos besábamos.

No recuerdo cómo fue que, entre nuestras charlas, salió el tema de que me gustaría aprender a leer y a escribir. Francisco se ofreció a ello, ya llevaba unas semanas aprendiendo, 3 para ser exacta, según Fran voy muy bien. Ahora estábamos en el bosque practicando mi lectura y escritura con algunas textos que hizo Francisco en su casa.

-La bar... La barca que estaba en el río llegó al mar, pero nau...- pensé tantito, era una palabra nueva para mí -¿Naufragó?- dije dudosa -por unos meses, hasta que llegó a otro reino...- miré al apuesto joven Príncipe que estaba a mi lado -¿qué es naufragar?, nunca había escuchado la palabra.

-Sí hablamos de un barco o de una barca, es hundirse o destruirse en el mar. Si nos referimos a una persona que naufraga, hablamos de que ella estaba en el barco que se destruyó en el mar, lo arrastraron las olas y lo llevaron a la costa, o murió ahogado... Depende del sujeto- me asombré.

-¿Cómo es posible que sepas mucho? Además de guapo, eres culto- jalé tantito su vestimenta a hacia mí y lo besé, me devolvió el beso.

-Sí ese es el premio por conocer muchas cosas, aprenderé más- dijo con una sonrisa al separarnos. -Vas muy bien, te trabas en algunas palabras pero son las que nunca o rara vez usas. Solo falta practicar un poco más y ya estarás lista... ¿Has estado leyendo las cosas que te he dado?

-Sí, todas las noches lo hago. También imito la escritura de las palabras.

-¿En serio?- afirmé con la cabeza -escribe "hombre"- me dió una rama de árbol para que escribiera la palabra que dijo en la tierra. Eso hice, escribí esa palabra, Francisco me felicitó. -¡Qué bien!, ahora "mujer"- lo escribí, volvió a felicitarme -ahora escribe "eres hermosa"- me sonrojé, pero escribí la frase -¿Qué tal si escribes "eres la mujer más bella que he conocido"?- dijo y se levantó. Me sonrojé más, sin embargo, escribí lo que pidió. Tardé un poco pero lo hice, al parecer, lo hice sin errores.

-¿Qué tal?, ¿voy bien?- pregunté.

-Sí, vas muy bien- se sentó detrás mío y me abrazó la cintura. Me jaló hacia él, mi cabeza se recargaba en sus pectorales. Tomó mis mejillas y se acercó -Eres la mujer más hermosa que he visto- me besó -La palabra "hermosa" se queda corta para lo que eres- volvió a besarme, este beso era más tierno y duradero.

Se escuchaba el sonido de nuestros labios al separarse y volverse a unir, amaba esto. Éste momento, él, sus acciones, sus atenciones hacia mí, todo era perfecto. Mis manos subieron y jugaban con sus cortos y ondulados mechones. El beso se detuvo por un momento, me senté frente a él y seguimos besándonos, sus manos se posaron en mi cintura y las mías en su nuca. Sé que él no gusta de mi, pero yo sí de él, así que aprovecharé estos últimos momentos que tengo con él. Vuelvo a repetir, es un poco egoísta de mí pero, si alguien estuviera en mi lugar, dudo que hiciera lo contrario.

-Savannah- habló entre besos -desearía que Aurora fuera tu persona- me sonrojé, dudé y molesté un poco, no sabía a qué se refería en sí -Eres bellísima, eres hermosa, eres perfecta. Te preocupas por todos y luchas por tus metas. Aurora es una chica muy superficial que busca poder y dinero de forma fácil...- quería callarlo, sus palabras me enamoraban.

-Ay Fran, deja de decir esas cosas- dejé de besarlo -tienes que estar con ella, decirle lo que me dices a ella. Es tu prometida- dije mientras tenía mi mano en su mejilla y la otra en el pasto.

Diario de una CampesinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora