● Cap 3

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Se podían escuchar los pasos de el ir y venir de las personas en el aeropuerto.

Eunji estaba esperando a que Rosé y Jennie aparecieran para así poder despedirse, espero durante los veinte minuto que faltaban para que ella pudiera tomar su vuelo, mas las hermanas nunca llegaron.

Empezaba a preocuparse, ¿Habría sucedido algo malo para que no pudieran presentarse?; realmente quería llorar no las vería durante un buen tiempo y eso la ponía muy triste.

El día anterior las llamo a ambas, pero nunca contestaron, les mando mensaje de los cuales tampoco respondieron, era algo extraño, pero se convenció de al menos vendrían al aeropuerto -suspiro de frustación-

- Eunji tenemos que irnos, ya no podemos seguir esperando más - dijo su madre al escuchar que anunciaban que su vuelo ya estaba listo para ser abordado.

Su madre tenía razón. La pelirroja tubo que ir hasta el abordador con muy poco ánimo, icluso estando ya adentro de el avión, las volvió a llamar pero no contestaron, se rindió para finalmente dar un nuevo suspiro de frustración.


Abrio los ojos lentamente, no podía moverse, se sentía tan débil y frágil.

Solo una lampara alumbraba la oscuridad de esa habitación, levanto su rostro para ver mejor el lugar y supo que estaba en un cuarto de hospital, observo a su madre echada en el pequeño sillón de el frente.

Sintió punzadas en su cuello, entonces empezo a recordar todo lo que le había sucedido, pequeñas lagrimas caían por su megillas, no quería que su madre la viera en ese estado, hizo lo que pudo para controlar su llanto que se volvía cada vez más fuerte.

- ¿Jennie? - dijo su madre en un susurro - mi amor por fín despertaste - se acerco a su hija para besarle todo el rostro - perdoname, lo siento mucho yo no debí dejar que esto pasara - comenzo a decir entre sollozos.

- Mamá no llores - dijo entrecortado - ya estoy aquí.

- Te hicieron mucho daño, se supone que tendría que cuidarte y protegerte, perdoname cariño.

Jennie la abrazo, escondió su rostro sobre su pecho, olfateo el aroma a lavanda de su madre para tranquilizarse.

Pasaron unos minutos mientras madre e hija pararon de llorar, todo lo que Jennie había sufrido era tan doloroso.

-Mamá ¿Dónde esta Rose? - pregunto Jennie ya mucho mas serena - ¿Ella lo sabe?

Dos días atrás

La omega pelirubia llegaba a su casa cansada, con las manos y la punta de la nariz heladas por el frío, cuando entro a su casa se encontro con su madre esperandola con preocupacíon en su rostro.

- ¿Por qué estas llegando tan tarde? ¿Dónde esta Jennie? - pregunto la omega cuando no vio a su otra hija.

- ¿Aún no esta en casa? Ella salió mucho antes yo - dijo Rose muy extrañada - Quizas solo salió con alguien.

-Su madre dio un largo suspiro - a lo mejor era eso pensó, esperaria un poco más.

Los minutos transcurrian poniendo a Rose y a Park Jiyu muy ansiosas, la puerta de pronto se abrió dejando ver a un alfa de cabellera negra entrar.

- Buenas noches ¿ Jiyu que sucede? pude sentir tu preocupación - dijo el alfa

Rose y Jiyu solo lo miraron por unos minutos para luego contarle lo que estaba pasando.

Ya eran más de las diez de la noche , el cielo estaba completamente nublado y hacia mucho frío, el ambiente era muy triste, todo parecía irreal como si fuera una película.

Días de lluvia  || Jenlisa || ⁰¹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora