LE COEUR DU DUC (EL CORAZÓN DEL DUQUE)

CAPITULO 9

Estos días, Londres está invadido por todas las madres omegas ambiciosas.En el baile de lady McGonagall de la semana pasada, esta autora vio, al menos,once solteros convencidos escondiéndose por los rincones y marcharsecorriendo de la casa con esas madres ambiciosas pisándoles los talones. 

Es muy difícil decidir quién es, precisamente, la peor de todas aunqueesta autora sospecha que, al final, la lucha va a ser muy cerrada entre lady Nott Weasley y la señora Jhonson, con Angelina de esta última por unanariz en el último metro. 

Al fin y al cabo, Angelina Jhoson casadera en el mercado, mientras que lady Nott Weasley sólo tiene que ocuparse deun joven omega.Sin embargo, sería recomendable que todas aquellas personas condos dedos de frente se mantuvieran muy, muy alejadas de los hombressolteros cuando las Hermano Fred un omega y Genny una beta pero hermosa joven se presenten ensociedad. Lady N.W no es de las que miran a ambos lados antes de entrar enun salón de baile con dos hijos detrás, y que el Señor nos asista si decideponerse botas con la punta de metal.REVISTA DE SOCIEDAD DE LADY HOGWARTS,28 de abril de 1813 

Blaise pensó que la noche no podía empeorar. Nunca lo hubiera dicho, pero elextraño encuentro con Ron Nott Weasley, aquel omega acabó por convertirse en lo mejor deaquella velada. Sí, se había quedado horrorizado al descubrir que se había sentidoatraído, aunque sólo fuera por unos momentos, por la hermano pequeño  de su mejoramigo. Sí, los patosos intentos de seducción de Seamus Finnigan habían sido un insultopara su sensibilidad de vividor. Y sí, al final, Ron lo había exasperado hasta loimpensable con su indecisión de tratar a Seamus como aun criminal o preocuparse de élcomo si fuera su mejor amigo. Sin embargo, absolutamente nada de eso teníacomparación con lo que todavía tuvo que soportar después. 

Su fantástico plan de presentarse en el baile, saludar a lady McGonagall  y marcharsesin que nadie lo viera pronto dejó de ser tan fantástico. Cuando apenas había dado dospasos en el salón, un viejo compañero de Oxford que, para mayor desgracia suya,recientemente se había casado, lo reconoció. Su mujer era una joven encantadoraaunque, desafortunadamente, tenía grandes aspiraciones sociales y se ve que, en cuantolo conoció, decidió que su camino a la felicidad pasaba por ser la que introdujera alnuevo duque en sociedad. Y Blaise, aunque solía definirse como un hombre de mundo ybastante cínico, descubrió que no era lo suficientemente maleducado como para insultara la mujer de un viejo amigo de universidad.Y así, dos horas más tarde, le había presentado a todas las chicas casaderas delbaile, a todas las madres de las chicas casaderas y, por supuesto, a cada hermana mayorcasada de cada chica casadera. 

Blaise no sabría decir qué grupo había sido peor. Laschicas casaderas eran terriblemente aburridas, las madres eran descaradamenteambiciosas y las hermanas... bueno, Simon llegó a plantearse si había ido a parar a unburdel. Seis de ellas le habían hecho insinuaciones sin ningún tipo de paliativos, dos le habían dado notas invitándolo a los tocadores y una incluso le había acariciado elmuslo.En conjunto, Ron Nott Weasley empezaba a parecerle de lo mejorcito.Y hablando de Ron, ¿dónde se había metido? Creía haberla visto de reojohacía más o menos una hora rodeado de sus hermanos, un grupo que intimidaba. No esque, por separado, intimidaran a Blaise, pero tenía claro que uno tendría que ser imbécilpara provocarlos en grupo.Pero desde entonces parecía que se la había tragado la tierra. 

De hecho, era laúnico chico omega casadero del baile que no le habían presentado ah por supuesto su amigo un tal Harry omega tambien.No creía que Finnigan lo volviera a molestar después de haberlo dejado en elpasillo. Al fin y al cabo, le había dado un buen puñetazo en la mandíbula y tardaría unrato en despertarse. Y más teniendo en cuenta la cantidad de alcohol que había ingeridodurante toda la noche. E incluso, aunque Ron se había dejado llevar por lacompasión cuando su patoso pretendiente se había desplomado en el suelo, no era tanestúpido como para quedarse con él en el pasillo hasta que recuperara la conciencia. Blaise miró hacia donde estaban los hermanos Nott Weasley, y le pareció que se loestaban pasando en grande. Los habían abordado casi tantas jóvenes como a él, pero elser tres jugaba a su favor. Blaise vio que las debutantes no estaban con los Nott Weasley nila mitad de tiempo que estaban con él. Blaise hizo una mueca. Theo, que estaba apoyado tranquilamente en la pared, lo vio y levantó la copade vino que sostenía, sonriéndole. Luego ladeó la cabeza señalando a la izquierda de Blaise. Éste se giró, justo a tiempo de encontrarse con otra madre rodeada por sus treshijas, que llevaban unos vestidos de lo más recargado, llenos de pliegues y volantesaparte de, por supuesto, montones y montones de lazos.Pensó en Ron, con su sencillo a la par que elegante vestido verde asi que los omegas varones les vestian como mujeres y a decir verdad hay algunos omegas varones que les queda mejor los vestido que una mujer beta o omega como el caso de Ron. Ron era un omega, conesos ojos azules y esa sonrisa...