95: El sarcasmo de la vida, Compañeros

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Harry corrió mucho en su forma de lobo, el enorme pesar que sentía en el corazón no le dejaba pensar mucho, sus patas estaban lastimadas y dolían mucho,pero no se comparaba con el profundo dolor en su corazón, lugar que se estaba comenzando a sentir vacío que Louis ocupaba desde hace algunos años atrás.

Su lobo quería regresar y arrastrar su pancita, sólo para recibir caricias y su todo lo que había dicho ese leoncito fueran todas mentiras, se estaba mintiendo de una forma tan mediocre  que a él le molestó profundamente ser  la daga que le dejará en claro todo lo que había pasado.

Aulló por horas, lastimado y muy golpeado por las palabras de Louis, sólo supo cantarle a la luna en búsqueda de consuelo, pero esta no hacía más que sólo brillar desde la lejanía, pero no quería perder las esperanzas, hizo una promesa en un día especial:

"Te amare sin importar el tuempo y el espacio"

Como se arrepentía de haber hecho un juramento por el resto de su vida, porque seguramente, así como juró amar para siempre a una sola persona, su lobo no le dejaría amar a nadie más que sólo a él, el maldito gato que le hizo trizas el corazón y la voluntad de seguir peleando.

Siguió corriendo tratando desesperadamente de encontrar un poco de sosiego para su alma que herida y hecha jirones estaba, hasta que sus patas tronaron y le obligaron a caer de trompa al suelo dando algunas vueltas, antes de quedar laxo en un solo lugar, en donde gimio de dolor y volvió a aullar.

Aullar.

Aullar.

Aullar.

Por que sólo para eso eran buenos los lobos y sus estúpidas costumbres, en las que por cierto, nunca había creído. Al pasar los minutos, cuando su lobo se resignó y supo asimilado todo lo que había pasado, cambio a su forma humana, sorprendiéndose con torrentes calientes de lágrimas, bajando por sus mejillas como un río sin cause, gritó desesperado.

No sólo su lobo amaba a Louis, él humano que nunca había sentido nada por nadie, ni siquiera por sus amigos o por él mismo,  también estaba enamorado. Tan enamorado que por eso sentía por completo, como su corazón lloraba lágrimas de sangre en su pecho,  volvió a gritar y a revolverse en el lugar en donde estaba, del inmenso dolor físico y mental que estaba experimentando.

Amables, fuertes y cálidos  brazos le sorprendieron, cuando se apegaron unos a su cintura, otros en su cuello y los más cálidos y fuertes, apretaban el pequeño círculo que formaban las tres personas convirtiendolas en cuatro.

—A-ayúdame —tartamudeo con la voz agrietada y con su respiración agitada por la estúpidas lágrimas que se arremolinaban en sus ojos con puro dolor —, pa-padre, duele.

Al decir la última palabra su voz se quebró más de lo que estaba y volvió a llorar y a gritar, pensó que su padre le llamaría de las peores e impensables formas posibles, que le echaría en cara todo lo  que le dijo podía pasar de malo teniendo una relación con otro alfa, contrario a ello, su padre le miraba con lágrimas bajando por su rostro casi similar al suyo.

—Mi querido hijo —expreso el hombre con su siempre usual voz ronca y dominancia que aunque estuviera quebrado viendo derretirse en dolor a su hijo, no decaía ni siquiera un poco —. Somos una familia y estamos aquí para apoyarte siempre.

—Duele mucho —volvió a decir, golpeando el pecho y sacando a relucir sus garras, queriendo arrancar su corazón para ya no sentir más de aquello tan insoportable —.  Quiero morir.

Su hermano se pegó más a él y su padre Omega igual, ambos expeliendo sus aromas suaves y atrayentes para hacerle olvidar el dolor y las ganas de morir.

—Todo estará bien, hermano, somos una familia —dijo sollozante su querido hermanito.

De pronto, los lazos que creía olvidados volvieron a latir, su familia estaba más completa que nunca, eso hizo que el dolor se fuera un poco, pero permaneciera aún aquella soledad que sentía al no tener a su alfita consigo, sólo era una distracción que se sentía tan bien, tan correcta.

Mientras su padre le ayudaba ponerse en pie, entonces el sarcasmo inundó su cuerpo entero y mientras, lágrimas bajaban por su ahora, inexpresivo rostro, y el viento movía en ondas su cabello, suspiro cansado y  se pregunto:

¡Ah!~

¿Cómo terminó en aquella situación tan placentera?

Mis Solecitos con este último capítulo COMPAÑEROS llega a su fin

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Mis Solecitos con este último capítulo COMPAÑEROS llega a su fin.

Quiero darles las gracias a cada uno de ustedes por el apoyo que le dieron a esta hermosa adaptación, por cada voto y comentario.

Gracias de corazón...♥

También darles las gracias a su autora original Lilium_98 por darme permiso y honor de poder adaptar su hermosa historia, gracias de corazón.

Se preguntaran:

¿Hasta aquí quedo esta historia?

La respuesta es No.

Habrá segunda temporada, así que espero la apoyen tanto como apoyaron esta primera parte.

Atte: Alina_Stylinson_28

COMPAÑEROS  (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora