26. DOS CARAS DE LA MISMA MONEDA.

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Había sido una madrugada difícil y lo único que quería era descansar. Sin embargo, alguien no dejaba de golpear la puerta de mi habitación, logrando que el sueño me abandonara.

Me aparté las sábanas de encima y abrí. Era Steve.

-Espero que tengas una muy buena razón para obligarme a levantarme de la cama - le advertí.

-Miranda y Grayson Parker están aquí - informó, algo disgustado. Claramente no había sido a la única que no le agradaba que interrumpieran su sueño - Llamé a Arthur pero aún tiene que permanecer en la fiscalía, Mason sigue sin responder mis llamadas y supongo que Noah está lo suficientemente cansado como para escuchar su celular.

-¿Para qué los llamaste exactamente? - entrecerré los ojos - Como si no pudiera arreglármelas sola - salí de la habitación.

-No estás sola, ¿sabes? - dijo detrás de mí.

-Pensé que estabas enojado conmigo por mentirte e ir a buscar a Justin - repliqué.

Me retuvo por la muñeca y me giró hacia él.

-Hablaremos después de eso. Ahora tenemos que averiguar qué hacen los padres de Jayden aquí.

-Créeme, sé lo que quieren.

Apenas entramos a la sala, Miranda y Grayson se pusieron de pie. A pesar de vestir formalmente, ambos se veían cansados.

-Gracias por aceptar vernos - dijo ella - Y disculpa por venir sin avisar, pero necesitábamos hablar contigo.

-Sobre Jayden y Greg - afirmé.

-Realmente la hemos estado pasando muy mal. Perdimos a más de la mitad de nuestros clientes y la prensa no deja de acosarnos. Sin mencionar que mis hijos se están llevando la peor parte. Así que te suplico que retires los cargos en su contra. Jayden actuó sin pensar en las consecuencias y Greg solo ayudó a su hermano.

-Podría decirles que lo siento, pero no es así - espeté - Desafortunadamente no soy la única chica que pagó por las malas decisiones de un imbécil que ni siquiera se molestó en pensar en las consecuencias. Eso o pensó que era intocable por el simple hecho de pertenecer a una "buena" familia - hice comillas con los dedos - Lo que hizo fue malintencionado, y nadie obligó a Greg a ayudar a su hermano a huir como un cobarde. En el fondo ambos sabían que tarde o temprano diría la verdad.

>>Ahora hablemos sobre que ellos se están llevando la peor parte. Créanme cuando les digo que lo que están pasando no se compara con lo que yo y otras chicas tuvimos que soportar por no tener la valentía de levantar la voz.

>>Podrán tener a los mejores abogados del país, pero todos sabemos que eso no servirá de nada. Y precisamente por eso están aquí: porque todo depende de mi decisión. Ustedes nunca me trataron bien, ¿creen que me voy a tragar el cuento de que ahora son buenas personas, cuando en realidad se trata de una fachada para conseguir lo que quieren?

>>No otorgaré ningún perdón ni retiraré cargos. Y sinceramente no me importa cuánto se esfuercen, no descansaré hasta que ambos paguen por todo el daño que ocasionaron.

Di media vuelta, dispuesta a regresar a mi cama, pero la voz de Grayson me lo impidió:

-¿Cuánto quieres?

Me giré hacia ellos.

-¿Disculpe?

-Hagamos esto: te daré un cheque en blanco. Escribe la cantidad que desees, solo deja a mis hijos libres.

Solté un bufido.

-Mi dignidad vale más que todo el dinero que puedan ofrecerme. Les haré un favor y fingiré que esta conversación no sucedió. Pero si vuelven a insistir con lo mismo, los demandaré por intentar sobornarme.

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