Nara... Me darías el honor de ser mi esposa ?Narra Chrys...
No podía esperar más. No iba a permitir que algo le pasara de nuevo y que esta vez no la volviera a ver. La amaba y la quería a mi lado por el resto de mi vida. Estaba muy nervioso a la hora de preguntarle que si quería ser mi esposa.
Nara ya se acordaba de mi, pero y si estaba asustada por lo que pudiera pasar o si simplemente no se quería casar a sus 19 años de edad. La entendería perfectamente, es muy joven, pero en que estaba pensando.... Nara es demasiado joven para casarse... Fui interrumpido.
Sí, sí, sí Chrys quiero casarme contigo. - y en seguida Nara me dio un suave beso. Todos comenzaron a aplaudir.
Nara había dicho que sí y yo pensando en su edad, ahora digo yo... En que estaba pensando ? Porque me importo la edad. Nara es muy madura y ya mismo cumpliría los 20 años. Vamos a casarnos!
Narra Nara...
Estaba muy feliz. Nos encontrábamos en casa hablando de lo que sería nuestra boda, etc. Chrys me dijo...
Nara te acuerdas que ayer al medio día en el centro comercial me probé un gabán blanco? - preguntó
Si, me acuerdo. Porque? - contesté
Bueno es que... A mi me gustaría usarlo para la boda, que dices ? - dijo
Claro que me encantaría usarlo. Se veía tan bello cuando se lo probo ayer. Estuve a punto de halarlo por la corbata y meterlo al vestidor para...... No importa para que... Pero estaba súper sexy ayer.
Si, me encantaría - contesté
Bueno Nara, ve desde ahora mirando los trajes de novia y eso para que cuando te toque comprarlo ya sepas cual. - dijo Chrys dándome un beso en la frente. Ahí me acordé del beso que nos dimos ayer, digo que yo le di ayer. Ese fue nuestro primer beso desde el hospital y yo se lo había dado. Wao ya no me ponía nerviosa cuando pensaba en darle un beso. Me estaba superando.
Cuando note, Chrys había salido de mi habitación. Bajé las escaleras llamandolo, pero no contestaba. Verifique en la sala y no estaba. Fui a la cocina y no estaba. Mire por la ventan y me vino una imagen a la mente.
Esa chica. Ya era la segunda vez que me acordaba de ella, pero quien rayos era. No entiendo como puedo tener la imagen de alguien en mi cabeza y no saber su nombre. Esto es imposible.
Reaccione y mire hacia atrás. No había nadie, tenia la esperanza de que un Chrys estuviera ahí. Subí las escaleras y Verifiqué el baño, no estaba allí. Donde se había metido este ?
Cuando entré a mi habitación nuevamente, Chrys estaba acostado en mi cama. Que haces aquí ? - pregunté - digo... Donde te metiste ?, te estaba buscando y apareces en el lugar de inicio, enserio ? - dije con una ceja alzada.
Me acosté a su lado y este cogió mi mano. -solo estaba en el baño y cuando vire ya tu no estabas- dijo abrazándose por la cintura y atrallendome hacia él.
Oh lo entiendo. - dije - disculpa, amorsito- le Sonreí y cerré mis ojos.
Abrí los ojos. Wao no puede ser. Estaba todo oscuro. Chrys ya no estaba a mi lado. Me levanté y abrí la puerta. La luz de la cocina estaba encendida y de allí salía un olor increíble.
Después de enjuagar mi boca, bajé las escaleras. Entré a la cocina y hubiera deseado no hacerlo. Un escalofrío corrió por todo mi cuerpo. Chrys estaba sin camisa. Toda su musculatura estaba fuera. Sus abdominales bien marcados y la V más abajo de su ombligo.
Me quedé en estado de shock. Si ayer se veía sexy con un simple gabán, imaginense como se veía ahora. Mis hormonas estaban a millón. Yo hacia un intento por controlarlas, pero se me hacia muy difícil.
Terminaste - preguntó
Que... Yo.... Yo... Estaba.... Que rico huele. - sentí cuando mis mejillas se tornaron rojas.
Me había cogido miraolo de esta única manera la cual nunca había mirado a alguien. Que vergüenza. Lo abracé lo cual también fue un grave error. Pude sentir todo su cuerpo contra el mio. Me debilitaba.
Estaba a punto de derretir al frente de él. Había bajado a ver que cocinaba y mira lo que provocó. Todo con su hermoso cuerpo. Y todo ese cuerpo ahora era mio. Me puse roja nuevamente y este comenzó a reír.
Te vez tan linda cuando te sonrojas - dijo el muy idiota entre risas. Lo fulmine con la mirada.
Además de verme cuando casi me lo como con la vista también me vio cuando me puse roja. Esto no era sencillo. Tenía que inventarme algo, pero era inútil. No podía esconder lo que era cierto.
Ignore completamente todo. Me dirigí hacia la estufa. Cuando abrí la olla, había arroz con amarillos y en otra olla habían chuletas. Mi barriga comenzó a sonar.
Tienes hambre princesa - preguntó
Si, amor - respondí
Chrys saco unos platos y sirvió comida para tres personas.
Porque sirves para tres? - pregunté
Porque mi madre vendrá. Quiero darle la noticia de que nos casaremos. Además de que hace tiempo que no la veo porque estabas contigo en el hospital. Mi madre tiene todos los trabajos de la universidad. Tenemos que hacerlos y entregarlos. Nos darán una oportunidad. - dijo Chrys
Cuando terminamos de preparar la mesa, sonó el timbre de la casa.
Yo abro- le dije a Chrys caminando hacia la puerta.
Abrí y me encontré con una Silvia muy alegre y sonrienta. La saludé con un beso en la mejilla y la invité a pasar. Cuando pasamos las dos a la cocina Silvia se tiró encima de Chrys y se abrazaron.
Nos sentamos a comer. Cuando todos terminamos de comer, Chrys comenzó a hablar.
Madre, tenemos una noticia para tí - dijo Chrys con una gran sonrisa.
Diganme - respondió ella
Nos vamos a casar- dijo Chrys poniéndose en pie a mis espaldas y dándome un abrazo por el cuello.
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La chica de los "converse" (EDITANDO)
Genç KurguNara, mejor conocida cómo la chica de los converse, es una joven con un pasado doloroso y complicado, pero que a raíz de esto ha aprendido a llevar una vida llena de felicidad y sobre todo a tomar buenas desiciones.