Capítulo 24

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Cuando Jimin regresó Jungkook lo esperaba con una sonrisa y el almuerzo preparado,  Jimin simplemente lo abrazó y lo besó mientras Ana los observaba emocionada,  se perdieron unos minutos en su propio mundo.

- Gracias por ser tan lindo- le susurró Jimin.

Jungkook lo apretujó contra su pecho emocionado por su muestra de afecto,  sus preocupaciones se fueron al olvido,  su Jimin estaba ahí y no iría a ningún lado.

Se separaron sonriéndose y vieron a Ana mirarlos con dulzura.

- Disculpa Ana ni siquiera te he saludado- Jungkook se acercó y besó su mejilla.

- No hay problema,  aún recuerdo lo que es estar enamorado- les cerró un ojo con complicidad.

- ¿ Te quedas a almorzar?, no acepto un no por respuesta- Jimin tomó del brazo a Ana y la llevó directamente a la cocina.

- ¿ Quién se resiste a una comida hecha por tú esposo?- dijo Ana riéndose.

Almorzaron los tres juntos conversando y riéndose de anécdotas que Ana les contaba,  Jimin por vez primera le contó a Ana sobre su vida de bailarín y modelo con sabrosas historias de gente famosa,  Jungkook disfrutaba de la compañía y del ambiente distendido que se había dado.

Después del almuerzo Ana se despidió agradeciendo la invitación.

- ¿ Tienes trabajo aún?- le preguntó Jimin abrazando a Jungkook por la cintura mientras lavaba los platos.

Jungkook giró su cabeza y le besó la mejilla.

- Me queda un poco,  pero tomaré un descanso para regalonear un rato contigo y pequeñín- cerró el grifo y se volvió para abrazarlo.

- ¿ No preguntarás adónde fui?- Jimin lo miró sonriendo.

- No quiero ser indiscreto, ¿ tú quieres decirme?- Jungkook acarició su mejilla y luego lo tomó entre sus brazos llevándolo al jardín donde lo depositó en la tumbona con pequeñín saltando con la pelota en el hocico.

- Fui a ver al psicoterapeuta,  le pedí una cita,  seguiré viéndolo por un tiempo- le contó Jimin.

Jungkook le sonrió y besó su frente para luego entrelazar sus manos.

- Tienes mi apoyo incondicional,  lo sabes, ¿ verdad?- Jungkook lo apoyó contra su pecho.

- Lo sé- Jimin se dejó apachurrar por su esposo,  se sentía cálido y seguro entre sus brazos,  eso jamás había cambiado.

Jimin le contó todo,  abrió su corazón con completa sinceridad y Jungkook lo escuchó sin interrumpirlo hasta que terminó de hablar.

- Entonces mi querido esposo,  empezaremos cuanto antes,  ¿ tienes algo que hacer este sábado?- le preguntó Jungkook sonriéndole.

Jimin le siguió el juego.

- Tendré que revisar mi ocupada agenda,  ¿ necesita algo mi esposo?- Jimin sonrió al preguntarle.

- Una cita...me gustaría invitarte a una cita- Jungkook lo miró levantando una de sus cejas.

- Mmmm,  creo que puedo hacer un espacio para salir contigo- Jimin se largó a reír y Jungkook le pellizcó la nariz.

- ¿ Puedo besarte antes de la cita?- Jungkook puso cara de coqueteo.

- ¿ No crees que estás yendo muy rápido?, aunque es bueno probar,  por si acaso- Jimin se acercó un poco y mordió sensualmente sus labios.

- Yo estoy totalmente de acuerdo- Jungkook lo atrajo y sin dejar de mirarlo acercó su boca y lo besó,  ambos se perdieron en el beso disfrutando de la cercanía.

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