Eran una pareja feliz y enamorada...hasta el día del accidente.
Jimin, modelo y bailarín.
Jungkook arquitecto renombrado.
Eran una pareja envidiada por lo mucho que se amaban.
Después del accidente Jimin descubrió que nunca más sería bailarín...
Jungkook se quedó pensativo después de que Jimin se fuera, ¿ qué sería lo que tenía que hacer?, es verdad que a él también le costaba asumir que Jimin ahora era más independiente y no lo necesitaba todo el tiempo, se había acostumbrado tanto a esa dependencia de Jimin que siendo sincero consigo mismo le costaba soltar, pero sabía que debía hacerlo, así que no le dio más vueltas y guardó su preocupación y ansiedad en el fondo de su mente y se puso a trabajar.
Jimin por su parte iba silencioso al lado de Ana mirando por la ventanilla del automóvil.
- ¿ Todo bien?- ana lo miró de soslayo mientras conducía.
Jimin pegó un sonoro suspiro.
- Anoche lo arruiné Ana...iba todo tan bien, pero cuando vi a mi esposo acercarse a mis piernas el aire comenzó a faltarme y me aterrorizé, no pude Ana, pero lo que más me angustia es que Jungkook estaba tan ilusionado...
- Corazón no te preocupes tanto, no puedo ponerme en tú lugar, por eso hiciste lo correcto al pedir una cita con tú psicoterapeuta, ¿ por eso viniste?, ¿verdad?- ana le apretó su mano cariñosamente.
- Sí, Ana, no quiero terminar perdiendo a mi esposo por ser un cobarde, él a sufrido tanto o más que yo, no solo cargó sobre sus hombros con sus sentimientos de culpa sino también con todo mi sufrimiento, realmente no sé como a aguantado tanto- le confesó Jimin.
- Porqué te ama corazón, y te ama de tal forma que lo más importante para él es tu bienestar por sobre el de él, tus tristezas son sus tristezas, tus alegrías son las suyas y tus triunfos son triunfos para él también, tienes un amor que no se encuentra en estos tiempos Jimin, has todo lo que esté en tus manos para conservarlo y hacerlo crecer día a día, por tí y por tu esposo- terminó ana suspirando enternecida, veía a este matrimonio como si fueran sus hijos y los apreciaba .
- Siempre me dices las palabras correctas Ana, te quiero mucho- Jimin sonrió y apretó su mano.
Llegaron a la clínica y Ana lo acompañó hasta la oficina del psicoterapeuta.
- Tú tranquilo, yo tejeré un poco mientras te espero- Ana le cerró un ojo y tomó asiento cerca de la oficina.
- Buenas tardes- Jimin saludo al entrar a la oficina.
- Te ves bien Jimin- el psicoterapeuta le tendió la mano y le señaló el asiento frente a su escritorio- cuéntame que necesitas.
- Me da un poco de vergüenza hablar de éste tema, pero necesito ayuda- le respondió Jimin.
- Olvida la vergüenza, estoy para escuchar y tratar de ayudarte- le sonrió dándole confianza.
- Es respecto a retomar mi vida sexual con mi esposo, lo he intentado, pero cuando llega el momento, me siento avergonzado de que Jungkook toque mis piernas- le contó Jimin.
- ¿ Tú esposo que te ha dicho?- le preguntó el doctor.
- El no tiene problemas, siempre me dice lo bello que soy para él, tengo miedo de defraudarlo, de no ser lo que era para él antes del accidente...
- Entiendo, ¿ Jimin?, tu vida íntima, tu matrimonio, ¿ estaba basado sólo en el aspecto físico?
- No, teníamos muy buen sexo, nos sentíamos atraídos el uno por el otro, pero era parte de un todo, quiero decir que siempre hubo amor en todo lo que compartimos, éramos amigos, compañeros y amantes, Jungkook siempre me hace sentir especial.
- ¿ No lo deseas ahora, es decir después de tu accidente?
- Porsupuesto que lo hago, pero mi miedo es más fuerte y creo que le estoy haciendo daño y también tengo miedo de perderlo, eso creo es mi mayor preocupación.
- Jimin por lo que me cuentas inconscientemente te reprimes en el aspecto sexual por temor a perder a tu esposo por qué crees que no serás capaz de darle satisfacción física, no tienes miedo de que no te ame, tienes miedo de decepcionarlo y que te deje, respóndete tú mismo.
Jimin suspiró dejando salir pesadamente el aire de sus pulmones.
- Creo que sí, inconscientemente temo perder mi vida, mi matrimonio, mi esposo...
- Jimin, eso ya no sucedió, tú mismo a través de las sesiones me has contado como Jungkook ha estado dándote su apoyo incondicional, incluso le ofreciste el divorcio y él no se alejó, ¿ porqué crees que lo hizo?, ¿ por amor o por culpa?
- Por amor- las lágrimas salieron de sus ojos y mojaron sus mejillas.
El doctor le acercó una caja de pañuelos.
- Yo he trabajado con ambos para apoyarlos y ayudarles a salir de el trauma que les dejó el accidente, cada sesión es secreta, pero en eso tienes toda la razón, tu esposo te ama, no dudes de eso, ambos han sufrido en este proceso, no hay ni ganador ni perdedor, ¿ lo entiendes Jimin?
Jimin asintió con su cabeza.
- El problema que persiste en tu cabeza es uno solo, ¿ sabes cuál?
Jimin lo miró atentamente.
- No has dejado ir a tú yo del pasado y aún no aceptas por completo al Jimin de ahora, este Jimin amputado, éste Jimin con piernas ortopédicas, el pasado no va a volver Jimin, de tí depende ser una persona sin limitaciones a pesar de tú accidente, el aceptarte de verdad, el amarte como eres, es la llave para dejar ir todos tus miedos e inseguridades, no trates de pensar en lo que podría pensar o querer tu esposo, concéntrate en tí, mírate al espejo, siéntete hermoso, sal de compras, sal a bailar a comer, tú puedes eres sano y vigoroso, no te limites, date la oportunidad de ser feliz, ¿ tú vida cambió?, sí, cambió, y nadie puede recuperar el pasado, ¿ lucharás por tú futuro Jimin?
- Sí, es lo que más deseo- un sollozo se escapó de su garganta.
- Eso está muy bien Jimin, seguiremos con tu terapia por un tiempo más, ¿ estás de acuerdo?
Jimin asintió.
- Desde ahora te mirarás a diario en el espejo, háblate con cariño, deja que tu esposo también participe, los ayudará a ambos, ¿ lo intentarás?
- Sí- Jimin sonrió lleno de esperanzas.
- Entonces terminamos por hoy, nos vemos la próxima semana- se estrecharon las manos dando por finalizada la cita.
Jimin salió y en cuanto vio a Ana la abrazó y lloró mucho, lo necesitaba, era liberador.
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