7 [Misiónes]

384 39 186
                                    

Algunas horas después de la prueba de supervivencia, en el complejo Hyuga.

Kakashi había visitado a los líderes Hyuga, justo como el día anterior, esta vez para darles la buena noticia.

Por su parte, Hinata nuevamente se colocó junto a la puerta de la sala para escuchar la conversación, pues sabía que a ellos no les importaba; es más, podían decir lo que fuera sin importarles su presencia.

—Puedo ver que me estaban esperando —dijo Kakashi al ver a los líderes Hyuga arrodillados junto a una mesa de té. Pero no eran los únicos; Kurenai también estaba en el lugar, a lo que el Jounin solo pensó—: Ojalá Hinata no le diga su plan durante mi prueba...

—Kakashi, has reprobado muchos equipos; es normal que haya venido a saber tu veredicto —dijo Kurenai mientras Kakashi avanzaba, colocándose de rodillas frente a la mesa.

—Dinos, Kakashi, ¿alguna novedad? —cuestionó Hiashi.

—Pasó lo que esperaba, francamente. El equipo aprobó; oficialmente, su hija y sus compañeros son Genin —dijo Kakashi tranquilamente. Kurenai no pudo evitar soltar un pequeño suspiro de alivio y una sonrisa orgullosa por ello.

Por su parte, Hinata se puso nerviosa. Hubo un largo silencio, cosa que la impacientó mucho, pues quería escuchar la reacción de su padre ante la buena noticia.

—Ya veo. En ese caso, empezarán a hacer misiones desde mañana, ¿verdad? —contestó Hiashi, tan estoico como siempre.

Hinata no pudo evitar sentir un vacío en el estómago ante tal respuesta, un simple "Ya veo"... Ni siquiera parecía darle importancia.

—Entonces ya es una ninja. Bien, en ese caso, ella ya es responsable de sus acciones, ya tiene edad y permiso para luchar e incluso matar si es necesario. Mientras no denigre o mancille al clan Hyuga, está bien —dijo Hiroshi, estoico, a lo que Kakashi solo asintió con la cabeza.

—Solo evite que estorbe en las misiones importantes —finalizó Hiashi.

—Hai, Hiroshi-sama, Hiashi-sama —contestó el peliplata.

Pero, aunque no lo pareciera, tanto Kakashi como Kurenai se sentían repudiados por el comportamiento de ambos Hyuga. Pero era de esperarse, debido a su tradicionalismo.

—Pueden retirarse —dijo Hiroshi, a lo cual Hinata, aún sabiendo que ellos sabían que estaba ahí, se retiró del lugar; no tenía nada más que escuchar.

Kakashi y Kurenai se pusieron de pie y estaban a punto de irse.

—Kakashi, una cosa más —agregó Hiroshi, a lo que ambos Jounin se voltearon.

—Como dijimos, que haga lo que quiera. Pero, por favor, mantenga a salvo el Byakugan. Si ella cae, asegúrese de recuperar la cabeza —dicho esto, Kakashi asintió para luego marcharse junto a Kurenai, dejando solos a los dos líderes Hyuga.

—Te lo dije, Hiashi; deberíamos colocarle el sello del ave enjaulada o exiliar a esa niña y dejarle el cargo de heredera a Hanabi. Tarde o temprano, terminará poniendo en peligro el Byakugan —declaró Hiroshi, a lo que Hiashi solo permaneció estoico.

—Las reglas del clan son muy claras, padre. No podemos hacer eso sin una razón válida. En este caso, es la heredera, aunque no nos guste. Además, el débil se puede hacer fuerte —contestó Hiashi, a lo que el anciano solo se vio algo molesto.

—El clan Hyuga solía ser un clan poderoso. En el pasado, hubo eslabones muy fuertes. Tu hija es una vergüenza en comparación con eso. Aun así, tienes razón; la tradición es la tradición —finalizó el anciano, antes de ponerse de pie mientras Hiashi se mantuvo calmado.

Equipo SenninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora