Equipo Sennin

6 [Prueba de supervivencia]

A la mañana siguiente.

Los tres genin llegaron al punto designado, estando allí desde temprano.

Naruto estaba adormilado, se notaba algo perezoso. Hinata, por su parte, estaba nerviosa; realmente no sabía lo que pasaría, especialmente después de lo que escuchó el día anterior, y eso le daba miedo. Sasuke, como siempre, estaba indiferente; sin embargo, al igual que sus compañeros, se mostraba algo impaciente.

Los tres esperaron por horas al Jounin. Tal era su impaciencia y nerviosismo que ni siquiera cruzaron palabras entre ellos más allá de los buenos días.

Así... llegaron las 10 de la mañana.

—Buenos días — dijo Kakashi, apareciendo de la nada, con una mochila en su espalda.

—¡Oiga! ¡Llegó tarde! —exclamó Naruto enojado, pero Kakashi permaneció tranquilo.

—Ah, es que un gato negro se me atravesó en el camino, así que tuve que tomar el camino largo —respondió el Jounin con simpleza, a lo que sus alumnos se mostraron algo molestos—. Bien, vamos a comenzar.

El sensei colocó un despertador sobre uno de los tres troncos del campo de entrenamiento, mientras que sus alumnos solo lo miraban con curiosidad.

Él tocó el botón de la alarma para luego voltear a verlos.

—Bien, está puesto para el mediodía. Su misión es muy sencilla —comentó mientras tomaba dos cascabeles de su bolsillo y los mostraba—. Cada uno tiene que quitarme uno de estos cascabeles, de eso se trata todo. El que no me los quite antes del mediodía lo ataré a uno de esos troncos y me comeré su almuerzo frente a él.

En ese momento, los tres genin cayeron en cuenta de la trampa, entendiendo la situación de inmediato.

—Nos pidió que no comiéramos para que fuera más difícil —concluyó Hinata.

—Así que fue por eso... —pensó Sasuke.

Naruto solo podía pensar en esa hipotética escena de si perdían: ellos tres atados a los troncos muriendo de hambre, mientras Kakashi saboreaba su almuerzo tranquilamente y se burlaba de ellos.

—¡Este almuerzo es muy delicioso! Oh, es cierto, ustedes solo saborean la derrota —exclamó el Kakashi imaginario mientras soltaba una risa malvada.

Naruto tragó saliva ante esa escena imaginaria, sin embargo, ese era el menor de los problemas...

—K-Kakashi sensei... solo hay dos cascabeles y... somos tres —dijo Hinata, apenas haciendo audible su frágil voz.

—Exacto. De esa manera, uno de ustedes terminará atado y finalmente descalificado por fallar, y regresará a la academia. Pero cualquiera de ustedes puede fallar o los tres. O tal vez solo uno apruebe —dijo Kakashi de forma calmada, asustando más a los genin.

Los tres tragaron saliva... sin duda estaban en problemas.

—En fin, pueden usar cualquier tipo de arma, incluyendo las shuriken. Si no están preparados para matarme, no podrán obtener los cascabeles —declaró Kakashi.

—P-pero esas armas son muy... p-peligrosas...

—Jaja... en especial cuando no pudo esquivar el borrador de mi broma —se burló Naruto, a lo que Kakashi solo le devolvió una mirada desinteresada.

—Los payasos de clase suelen ser los más débiles, charlatanes, y por sus bajas calificaciones suelen ser unos perdedores —declaró Kakashi, haciendo que una vena se remarcara en la cabeza de Naruto, antes de aclararse la garganta—. Cuando diga "empiecen", daremos inicio.