Ángel. | Wandanat.©

Capitulo 6

Wanda pasó las siguientes horas encerrada en su habitación. Quedó inconsciente tiempo después de la cantidad enorme de poder que salió fuera de su cuerpo. A veces era demasiado agotador, ella no lo controlaba, tampoco era como si recordaba mucho de lo que pasaba antes de quedarse dormida, y nadie más lo había presenciado para intentar entender qué era lo que le ocurría.

Natasha por otro lado, había metido la mezcla del pastel al horno, luego de recuperarse de la discusión que había tenido con Wanda. Jamás la había visto reaccionar de esa forma, pero entendía el porqué lo había hecho. Ella la había presionado demasiado, había tocado un tema sensible, había abierto nuevamente una herida que no terminaba de cicatrizar, Natasha había cometido un error y nunca se había sentido tan culpable.

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Natasha tocó la puerta de su habitación, abriéndola suavemente sin esperar una respuesta teniendo en sus manos el pastel recién sacado del horno que habían preparado horas antes.

— Sé que estás enojada. — Natasha murmuró hacía Wanda quien se encontraba sentada en su cama llena de papeles por todos lados. — Pero el pastel se ve bien.

— ¿Puedes venir un segundo y ver esto? — Wanda la llamó ignorando todo lo que le había dicho anteriormente.

Natasha frunció el ceño antes de caminar hacia el escritorio para dejar el pastel e ir hacia ella.

Natasha se paró a su lado mirando los papeles en su cama. Eran bocetos, bocetos de sombras, bocetos de personas, bocetos oscuros, incluso algunos no podían entenderse con claridad.

— ¿Qué es eso? — Natasha preguntó en voz baja sin apartar la mirada de los bocetos.

Wanda se encogió de hombros.

— Lo hice yo... Creo.

— ¿Crees? — Natasha la miró sin comprender.

— Es decir, desperté con ellos allí. Así que los hice yo, pero no recuerdo haberlos hecho. — Wanda respondió con una mano sobre su cabeza rascando su frente. — ¿Quizá sea sonámbula?

Natasha pareció considerarlo alejándose de ella de manera pensativa caminando a través de la habitación.

— Es posible... — ella murmuró mentiras caminaba con el ceño fruncido. — ¿Volviste a soñar con ese lugar?

Wanda se encogió de hombros sin tener la respuesta exacta.

— No, quiero decir, no lo sé. ¿Tal vez? — sacudió su cabeza intentando aclarar sus pensamientos. — Es posible pero no lo recuerdo.

Natasha asintió.

— Está bien... Probablemente hayas estado sonámbula, quizás tus sueños estén tratando de decirte algo. ¿No crees? Quizá finalmente el poder de la gema de la mente está mostrando más poder del que creías conocer.

— Pero yo no pienso utilizar nunca más mis poderes, Natasha. — Wanda respondió con firmeza. — Cada vez que los utilizo pasan cosas malas.

— Quizá sea por eso que tus sueños estén manifestandote esto. — Natasha volvió hacia ella sentándose a su lado en la cama tomando los dibujos en sus propias manos. Natasha tenía una teoría, pero era una locura. — Quizá están siendo reprimidos, y necesitan salir o... No lo sé, no se nada sobre poderes, pero éstas cosas que dibujaste... No parecen ser cualquier cosa.

Wanda estaba demasiado agotada mentalmente para discutir sobre esto o explicarle a Natasha el porqué detrás de todas sus decisiones, así que simplemente optó por asentir y volver a mirar los dibujos con curiosidad.

— Éste me gusta. — Wanda tomó uno de los dibujos en sus manos mostrandole a Natasha.

El dibujo contenía la silueta de una persona, era irreconocible y difícil de saber de quién se trataba pero sabía que era una mujer. Era diferente a todos los demás dibujos en su cama, aquellos solo eran sombras o rayones sin significado

— Parece ser una mujer... ¿Sobre qué está parada? — Natasha señaló debajo de los pies de la silueta. Wanda frunció el ceño al notarlo, Wanda tomó un segundo dibujo en sus manos intentando buscarle algún sentido. Pero en eso el rostro de Natasha se aclaró cuando notó algo. — Espera...

Natasha le arrebató el segundo dibujo de sus manos y lo unió con otro de los dibujos cerca de ella.

— Espera, ¿Qué? — Wanda se acercó más a mirarlos y luego llevó su punto de visión a la cama. — ¿Cómo se conectan?

— ¡Son un rompecabezas! — Natasha exclamó levantándose de golpe para intentar descifrar todo, colocando papeles aquí y ya buscando los que se conecten o tengan similitudes para juntarlos.

Wanda miraba con impresión como Natasha armaba el rompecabezas con rapidez y sin dificultad

Natasha dió unos pasos hacia atrás para observar el rompecabezas casi completado notando que faltaba uno en el medio.

— Falta algo.

Wanda observó la hoja de papel que contenía la silueta de la mujer en su mano, dudando al entregársela a Natasha quién la miró a los ojos enviándole seguridad.

Natasha colocó la última pieza faltante en medio y ambas miraron el resultado con impresión.

— ¿Qué caraj...

— Soy yo. — Wanda la cortó sin expresión.

El dibujo completo contenía la imagen de la silueta de Wanda con un cetro en sus manos encima de una montaña de calaberas.

— No. — Natasha negó con la cabeza. — No sabemos eso, podría ser cualquier mujer.

— Natasha soy yo. — Wanda apuntó al dibujo, la verdad era que era bastante parecida a ella.

— Quizá sea solo un sueño, Wanda. No podemos estar seguras si...

— ¡Soy yo, Natasha! — Wanda golpeo los dibujos encima de la cama con frustración enviando una ola de energía roja escarlata a través de ellos.

Natasha retrocedió al ver lo que Wanda había hecho.

Con sus poderes, los dibujos se habían convertido en algo más que siluetas. Wanda les había dado color y forma, mostrando lo que los ojos de Natasha no podían ver.

— Y-yo y-yo no quería. — Wanda balbuceó mirando sus propias manos con horror. — ¿Te asusté?

Natasha se dió cuenta que había retrocedido por reflejos.

— Lo siento... — Wanda volvió a hablar antes que Natasha contestara

Natasha se aclaró la garganta y caminó por la habitación pensando en el posible significado de los dibujos que Wanda había hecho mientras dormía. Se sentía frustrada, frustrada de no tener al equipo para ayudarlas con esto. Extrañaba el equipo que solían ser, la familia que solía ayudarse los unos a los otros pero eso se fué a la basura cuando Bucky decidió aparecer nublando el juicio de Steve y Tony tomó la decisión de que él simplemente tenía la razón, ambos dividiendo al grupo y obligandose a pelear entre ellos mismos.

Natasha deseaba que al menos Steve estuviese aquí ahora, pero él estaba afuera. Buscando cómo sobrevivir.

— Wanda... Estás aquí, protegida. Podrás soñar con eso pero esa persona del dibujo no eres tú, no la verdadera tú. Te lo prometo. — Natasha le aseguró, enciandole una oleada de seguridad. — Sé que no quieres, sé que es difícil, y no pienso obligarte a hablar. Estuve mal antes, no es bueno presionar a las personas, lo sé, pero estamos hablando de tu seguridad ahora. Necesitas volver al entrenamiento.

— ¿Mi seguridad? — Wanda frunció el ceño. — ¿Es que acaso no entendiste el dibujo?

— ¿A qué te refieres?

— La única razón por la que en ese dibujo soy la única persona viva no es porque sea la única sobreviviente es porque soy quién mató a todas esas personas.