21 "Entrada triunfal"

33 3 0
                                    

Miriam Wilson

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Miriam Wilson.
14-07-2021.
"Siempre te recordaremos como la gran persona que fuiste."

Me es difícil leer las palabras escritas en la lápida de mi madre por culpa de las lágrimas acumuladas en mis ojos, pero aún así, lo logro, haciéndome sentir terriblemente mal.

Yo la amaba con todo mi corazón, con toda mi alma. Y ahora, está hecha polvo, desintegrada, pulverizada, simplemente desapareciendo.

Tal vez, si no hubiera ido a esa fiesta aquella noche... Hubiera podido estar ahí para protegerla.

Me tiro al suelo, cayendo sobre mis rodillas, y cubro mi rostro para llorar entre mis manos. Me siento devastado, vacío, es un dolor que jamás se irá, el perder a un ser querido es sencillamente lo peor del mundo.

Una mano helada pero suave se posa en mi hombro, lo que me hace levantar la mirada y ver hacia atrás, pero debido a mis ojos llenos de llanto, solo veo una silueta blanca, de mujer, la cual me mira con atención. Rápidamente, me limpio la cara, y es ahí cuando me doy cuenta de la mujer a la que tengo en frente, quien me está dando una sonrisa totalmente genuina. De inmediato, me levanto del suelo y abrazo con fuerza a mi madre, quien ríe al devolverme el abrazo. Ella acaricia mi espalda mientras que de mi cara no desaparece una sonrisa de oreja a oreja. Me separo de ella un poco para verla con detenimiento, sin poder creer que es mi madre la que está frente a mí, pero sus ojos, los cuales me transmiten la misma sensación de protección y amor que siempre me han dado, me confirman que es ella a la que estoy abrazando. Una lágrima recorre mi mejilla por la felicidad que siento al reencontrarme con esta persona tan importante.

Pero de repente, el cielo tan azul que había, se transforma en uno negro con una rapidez atroz, por lo que, mi mamá se asusta de inmediato y se separa de mí. Su expresión es de terror total, como si fuera a morir... de nuevo.

A lo lejos, se ve como un tornado se va acercando con rapidez, llevándose consigo las hojas y ramas de los árboles, volviéndose cada vez más y más grande.

—¡Calem! —grita mamá, pero me es difícil escucharla, es como si estuviera a miles de kilómetros cuando en realidad la tengo frente a mí —Calem, por favor, cuídala —pide con desespero.

—¿De qué me hablas? —pregunto con confusión.

—No la abandones nunca. Debes estar con ella siempre, es más importante en tu vida de lo que crees.

—¿¡De quién me hablas!? —grito exasperado.

El tornado está a pocos metros de nosotros, por lo que se nos hace difícil mantenernos de pie con firmeza.

—La solución es ella —dice con sus ojos avellanas puestos en los míos, para segundos después, ser llevada por el tornado, lo que me arranca un grito de desespero.

En cuanto mis ojos se abrieron, de inmediato sentí el sudor frío resbalando por mi frente y lo agitado que estaba mi corazón, al igual que mi respiración, la cual hacía que mi pecho subiera y bajara con rapidez, cosa que intenté controlar al notar que Amanda estaba durmiendo con su cabeza sobre mi pecho y su cara muy cerca de la mía.

KeyframeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora