Mi silencio.

Pantomima

Denis me llamó, se presentó en el hotel y me mandó varios mensajes, pero no atendí a nada. No quería saber nada de nada de él. En su lugar llamé a Veronica. Tenía su teléfono por un día que Denis me pidió mi teléfono para llamarla y yo me lo guardé.

No se bien bien porque lo hice. Supongo que necesitaba saber y sabía que ella me diría la verdad. O al menos eso creía.

Ella me lo cogió enseguida.

Reconozco que no me pensé muy bien que iba a decirle, simplemente me salió nada más oír que me descolgaba el teléfono.

— Mira... ya me da igual. Solo quiero saber la verdad porque ya no me fio de la palabra de los hombres—

— Claro dime Julieta—

— ¿te has follado a mi marido desde que estoy con él?

— Si...— Se me heló la sangre al oírla.

— ¿Por qué?—

— Mira Julieta... él se empeña en creer que te quiere pero no... yo le conozco bien y no te ama, solo quiere el recuerdo que tiene de ti, pero tu nunca podrás darle lo que él quiere, lo que a él le gusta—

— ¿Qué quieres decir?—

— Quiero decir que no lo conoces tan bien como te crees, y que él a tu lado finge ser otra persona—

— Mientes—

— No... no te estoy mintiendo... pero él... si—

— ¿Me estás diciendo que todo los que he vivido con él es una pantomima? ...—

— Te digo que si le quieres, le dejes volar, yo puedo hacerle feliz y darle lo que quiere... —

— ¿Que es lo que quiere?—

— Yo no soy quien para contártelo—

Me colgó y me quedé con un sabor agridulce en la boca.

¿De que estaba hablando? ¿Qué era eso que Denis quería y yo no podía darle?

Los siguientes dos días Denis no paró de insistir y al final le cogí le teléfono.

— No quiero que me llames más. No voy a permitir que me mientas. Verónica me lo ha contado todo. Se que te la has estado follando y no... no te lo voy a perdonar jamás—

— Julieta por favor... hablemos—

— ¿te la has estado follando?—

— Julieta...—-

— Solo responde...—-

— NO es tan fácil—

— SI lo es... solo di si o no— le oí suspirar.

— Si...— cerré los ojos. Me agarré a la pared porque creí que iba a caerme y después me llevé la mano al corazón.

— Pues no tengo nada más que hablar contigo—

— Julieta por favor... te amo—

— No... cuándo uno ama no daña al otro. Tu no me quieres, tu solo has jugado conmigo—

— Para mi... el sexo y el amor son dos cosas distintas—

— Ya bueno... que pasa si yo me voy follando a otros... ¿te gustaría?—

— No, porque para ti no es lo mismo... lo que yo hago... ejem... lo que yo... hago con... con Veronica es... es difícil de contar cariño por favor ven y hablemos—

— ¿Cuantas veces te la has follado?... NO espera... ¿La noche que tenías la polla llena de carmín pasó algo?—

— No lo que tu crees—