Cláusula 13

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En el coche de camino a casa me tomé mi tiempo para hablar con él. Quería hacerle entrar en razón. Sabía que estaba enfadado, pero él no era así. No podía ser así.

— Marcos, lo nuestro no funciona. Hace tiempo que no estábamos bien y...

— No sigas Julieta, lo vamos a arreglar—

— ¿Vas a dejar a Rocio?—

— Si es lo que quieres...— Me reí aunque intenté que él no lo viera.

— No se ni como te lo planteas. Me dijiste que jamás me ibas a hacer daño, que nunca me ibas a ser infiel y confié en ti—

— ¿Que quieres que te diga que me arrepiento? Bueno si, pero tu y yo no teníamos sexo y ella se pasaba el día a mi lado con esos escotes y esas faldas y... no soy de piedra—

— No es excusa—

— ¿Y tú?... Lo acabas de conocer y ya te lo follas—

— Pues mira no...—

— Te lo follaste el día que te llevó al hospital también?—

— ¿Pero qué tonterías dices?—

— No me mientas Julieta—

— Mira Marcos...solo quiero que me dejes ir—

— Eres mía—

— No soy de nadie—

— Antes te gustaba que te dijera que eras mia— Era cierto, pero fue mucho antes de darme cuenta de que lo decía literalmente.

— Esto no tiene arreglo—

— Claro que lo tiene. Ya está, yo me he follado a una, tu a ese imbécil y ya está...—

— ¿De verdad no te la vas a follar más?— No es que estuviera aceptando su trato, claro que no, pero quería ver hasta donde podía llegar.

— Ya te he dicho que si es lo que quieres...—

— ¿Y tú? ¿Quieres?— Resopló— ¿Tanto te gusta follártela?—

— No me hagas hablar... porque te quiero—

— Oh vamos, suéltalo— Me arrepentí al momento de habérselo preguntado.

— Si... el sexo con ella es... como el de antes, cuando éramos jóvenes, claro que me gusta. Tiene diez años menos que yo y... si claro que me gusta follármela.— Se me revolvió el estómago. No supe que decir.— Pero te quiero y si para que volvamos a estar como antes tengo que dejar de follármela lo haré...—

— O por mi no te cortes— le dije.

— Te estoy diciendo que me encanta follármela pero que por ti... POR TI JULIETA, voy a dejarlo y ¿te pones así?—

— ¿Tengo que darte las gracias?—

— Pues estaría bien.— Resoplé. Y...Desistí.

Dejé de hablar. Me puse a pensar en Denis y en lo que iba a pensar cuando llegara a casa y no me viera. Fue entonces cuando me di cuenta de que me había dejado el móvil y que no tenía manera de contactar con él. Con suerte Marcos me dejaría en casa y volvería al trabajo.

Metió el coche en el parking y cerró. Luego bajó y me dijo que bajara. Entré en casa. Estaba igual que cuando había venido antes. Me miró. Yo me lo quedé mirando todo otra vez. Me imaginaba a Marcos haciendo todo eso y me dio miedo.

— Me volví loco al saber que te había tocado otro hombre— se acercó a mi y me dio un beso en la frente— pero ya está, ya pasó ya estás aquí conmigo y vamos a olvidarlo todo—

Mi silencio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora