SPEED [JOOKYUN] #2 ✔

JOOHEON.

TOC TOC TOC.

En mi sueño, estaba en la cabina de mi avión, preparándome para despegar cuando alguien golpeó el dosel, miré alrededor, tratando de ver
quién era, pero no había nadie allí.

Toc toc toc.

Espera... nadie estaba tocando el dosel y no estaba soñando, abrí los ojos para ver a Solo sentado en el suelo al lado de mi cama, con su manta enredada alrededor de sus piernas.

—¿Esperas compañía tan temprano? —preguntó, con la voz adormecida mientras se frotaba los ojos.

Sólo con verlo semidesnudo y tan cerca fue suficiente para que la erección con la que me había despertado fuera palpitante, hasta que los golpes a mi puerta empezaron de nuevo.

—Voy a ver. —Le di una patada a la sábana, pero cuando fui a sentarme, Solo ya se estaba poniendo de pie.

—No, lo tengo. —Sus ojos se dirigieron a mis caderas, y cuando vio lo que yo estaba mostrando, se quejó—. Joder, sólo... cúbrete. —Mientras abría la puerta, murmuró— Palabras que nunca pensé que diría.

Me recosté mientras él abría la puerta para atender a quien había venido a llamar tan temprano, pero cuando oí las voces de mis padres, me volví a levantar, Oh, mierda, miré a Solo con horror, no se había molestado en
ponerse nada sobre sus calzoncillos, lo que significaba que estaba hablando tonterías con mis padres en ropa interior, mierda, tenía que mantenerlos fuera, esto se vería peor de lo que
era...

Solo abrió la puerta de par en par e hizo un gesto a mis padres para que entraran, como si no hubiera razón para mantenerlos fuera, como si
no estuviera medio desnudo y yo todavía estuviera en la cama, y...

—Oh, pensé que nos habíamos equivocado de habitación, pero aquí estás. —Mi madre vaciló en la puerta y luego entró, con cuidado de no
tocar la pila de ropa de cama en el suelo.

—Déjame quitar eso del camino. —Solo tiró la almohada en la cama, recogió las sábanas, y luego se puso a recoger su ropa desechada.

Noté que mi padre no se había movido de su lugar justo fuera de la puerta, observando cada movimiento de Solo como un halcón, probablemente se preguntaba por qué estaba aquí, por qué estaba desnudo, y por qué obviamente había pasado la noche.

Dispárame, dispárame ahora.

Mamá se mordió el labio mientras estaba sentada en el borde de la cama a mi lado, sus ojos escudriñando mi cara como si estuviera
evaluando el estado de mis heridas.

—Parece peor de lo que es —dije, dejándola tomar ese doble sentido de cualquier manera que eligiera, yo lo decía en ambos, pero ella eligió centrarse en mí mientras mi padre seguía mirando a Solo.

—Oh, cariño —dijo, su barbilla temblando mientras me tocaba ligeramente la cara.

Podía sentir la tensión en la habitación, tan espesa que se podía cortar con un cuchillo, solo se aclaró la garganta donde estaba parado
en un rincón de la habitación sosteniendo su ropa y mantas sobre su cuerpo prácticamente desnudo, aunque no parecía incómodo en absoluto por ese hecho.

—¿Estás bien? —me preguntó, y cuando asentí, me devolvió el gesto—. Bien, bueno, supongo que les daré a todos algo de privacidad, estaré al lado no escuchando a través de la delgada pared, así que no digan nada que yo no dijera. —Sonrió cuando salió de la habitación, pero cuando vio la expresión de acero en la cara de mi padre, la sonrisa desapareció ligeramente—. Nos vemos, Capitán Lee.

Mi padre levantó una ceja.

—Esperemos que no como... demasiado de ti.

Solo se rió. —Bien.