El gran paso presiona en acercarse y los recuerdos emergen en el punto fuerte de la mente como un cofre.
Cuando todo da paso al inicio de una nueva era, algo aparece derrumbando todo lo que una vez fue, los problemas se arrastran en su surgimiento...
Temprano para que lo lean sin apuros. ●• Disfrútenlo... •●
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Agnes Ivanova.
Bajamos del avión en un completo silencio y nos quedamos todos en una línea mientras los agentes empezaban a hacer su trabajo de recibimiento. Harper estaba a mi lado con su cabeza descansando en mi hombro y con los ojos cerrados, en espera a que nos llegara el turno, luego de que fuera a despertarla de un sueño profundo.
No había dicho nada en el viaje, pero se había aferrado a mí, de forma inmediata cuando me distinguió.
Ni siquiera permitió que William se acercara a ella, dejando solo a Grace, que la atendía de vez en cuando.
— Agente Daniels, si me permite, la llevaremos al ala médica para que descanse un momento — llegó uno de los paramédicos que atendían a los afectados del combate.
Ella negó sin abrir los ojos y entrelazó sus dedos con los míos.
LadyDi se plató frente a nosotros y la miró.
— Ve a que te atiendan a profundidad, el golpe fue muy fuerte y necesitas una tomografía para descartar percances más graves. Luego pasarás a sala de interrogatorio cuando te den de alta o ellos mismos acudirán a ti — ella abrió los ojos, pero no negó, solo miró a LadyDi reprimiendo su desacuerdo — Ahora — sentenció con más fuerza.
Se enderezó y siguió a los agentes médicos mientras LadyDi me pasaba un short deportivo que me lo puse de inmediato bajo la camisa de William, en tanto la veía alejarse de nosotras.
Miré a William quien me observó un momento y luego se dirigió a hacer lo correcto.
Sinceramente, cuando me lo dijo, yo quedé en blanco.
No identifiqué si aquella confesión esperaba un cambio en mis decisiones pactadas a ellos o si solo justificó todo el alivio que sintió en ese momento, pero tampoco pude decir nada al respecto cuando cansado, cayo dormido sin intención de volver a despertar luego de unas horas.
Yo sé que dije que no volvería a sentir algún tipo de empatía por ella, yo sé que me prometí ser egoísta cuando ella no fue amable conmigo, pero esa no era yo y verla abrazarlo y llorar en su pecho, me dio mucho sentimiento. No fueron celos, ni alegría por la desgracia ajena, nada de eso. Yo lo único que veía era alguien que pasó lo mismo que yo, e incluso peor porque a algo que se aferró, creció y estaba a punto de nacer, lo perdió. Estaba de nacer.
Trauma o recuerdo, no podía dejar de verme en ella.
William pasó su mano por el cabello de Simone, reconfortándola, y distinguí la despedida, un adiós irreversible pues a pesar de su buena actitud ahora mismo, él nunca quiso esto, y lo tuvo decidido siempre.
Se estaba despidiendo de ella y todo lo que le atormentó los meses del embarazo.
— Comandante — me paré firme frente a Hans y Sarah — Me gustaría ir primero, si no hay algún problema.
